Ancelotti y el problema de los tres porteros

Andriy Lunin, número 13 y portero del Real Madrid, juega en el partido de vuelta de cuartos de final de la Liga de Campeones de la UEFA entre el Manchester City y el Real Madrid en el Etihad Stadium de Manchester, el 17 de abril de 2024 – PHOTO/MI News/NurPhoto/NurPhoto vía AFP
Courtois, Lunin y Kepa han ocupado la portería blanca esta temporada 

El Real Madrid afronta un mes decisivo sin tener claro quién ocupara la portería ante el Bayern de Múnich en el partido de vuelta ni en una hipotética final en Wembley. Carlo Ancelotti ha ido virando en sus decisiones sobre su portero favorito desde que comenzó la temporada en agosto hasta el 30 de abril de 2024, el día en el rinden visita al equipo alemán.  

Lunin tenía un pie y medio fuera del Real Madrid antes de comenzar la temporada. Ancelotti no quería al ucraniano y prefería que saliese del equipo y dejar como segundo portero a uno del filial, bien Diego Piñero, Lucas Cañizares o Fran González. Era suficiente para el italiano al que le gusta confiar en jugadores experimentados antes que dar oportunidades a jóvenes.  

La lesión de Courtois obligó al Real Madrid a moverse en el mercado porque Lunin no sería el portero titular de Ancelotti bajo ningún concepto. Aunque Bono, el meta del Sevilla y de Marruecos, sonó con fuerza, su ausencia un mes y medio por la disputa de la Copa de África hizo que el Real Madrid se lo replantease mejor.

El portero belga del Real Madrid Thibaut Courtois (C) y sus compañeros de equipo celebran al final del partido de fútbol del Grupo F de la UEFA Champions League entre el Celtic y el Real Madrid, en el estadio Celtic Park, en Glasgow, el 6 de septiembre de 2022 - AFP/ANDY BUCHANAN

 

Kepa estaba a punto de volar hasta Múnich cuando el Chelsea le cambió el billete para tomar un avión a Madrid. Un portero de garantías, internacional, experimentado en Champions y de esos que le gustan a Ancelotti. Lunin apenas jugó un par de partidos hasta que Kepa se aclimató. En aquellas ruedas de prensa el italiano no tenía problema en confirmar la titularidad de Kepa en cuanto estuviese disponible pese a que Lunin cuajaba buenas actuaciones.  

La delgadísima línea que separa a los porteros de defender una portería o calentar el banquillo la cruzó Kepa el día que se lesionó. Carlo Ancelotti devolvió al ucraniano al césped y ya no le pudo quitar en vista de sus buenos entrenamientos, de sus intervenciones y, sobre todo, de su fortaleza en los balones por alto, algo en lo que había fallado estrepitosamente Kepa en aquel partido ante el Atlético de Madrid que le costó la derrota a los blancos.  

Nada hacía presagiar que Ancelotti volviera a tocar la portería hasta que terminase la temporada. Nada, excepto Courtois. El belga se recuperó en menos de los nueve meses esperados y cuentan que un día en Valdebebas Carletto le confesó a Javi Martínez que Courtois sería titular en cuanto estuviese recuperado. Lo que no se esperaba el entrenador blanco ni el futuro entrenador, ex del Bayern y del Athletic, es que el potero se rompería el menisco en ese mismo entrenamiento.  

Carlo Ancelotti, entrenador del Real Madrid, supervisa el partido de fútbol del Grupo C de la Liga de Campeones de la UEFA entre el Real Madrid y el SSC Nápoles en el Estadio Santiago Bernabéu de Madrid, España, el 29 de noviembre de 2023 - PHOTO/NURPHOTO VÍA AFP/CIRO DE LUCA

La recuperación va por buen camino y Ancelotti no ceja en su empeño de devolverle minutos al belga. No será en el partido de ida de semifinales, pero podría ser en el de vuelta y casi seguro que será en Cádiz justo antes de recibir a los alemanes. La obsesión llega a tal punto de poner en un compromiso la hipotética final de Wembley. Courtois sería el elegido, pero, de no poder estar, el temor es que Ancelotti dude si debe jugar ese partido Kepa o Lunin.  

El problema de los tres porteros no existía hasta que Ancelotti decidió ceder a su forma de entender a los jugadores y premiar los méritos. En ese momento se generó una disyuntiva complicada en la que se mezcla la experiencia con la seguridad bajo palos y los buenos entrenamientos. Tres porteros para tres partidos.