El Ministerio de Inversiones anima a los marroquíes residentes en el extranjero a que inviertan en el país
Con motivo del Día Nacional de los Marroquíes Residentes en el Extranjero (MRE), que se celebra el 10 de agosto de cada año, el Ministerio de Inversión, Convergencia y Evaluación de Políticas Públicas de Marruecos ha organizado una semana dedicada a este colectivo, con el objetivo de animarlos a contribuir al desarrollo del país.
Los 12 Centros Regionales de Inversiones (CRI) distribuidos por todas las regiones de Marruecos son el vehículo encargado de fomentar, apoyar y canalizar las inversiones en el territorio nacional de la diáspora marroquí.
Según un comunicado del Ministerio de Inversiones, esta iniciativa busca acompañar a los marroquíes del mundo en sus proyectos, desarrollando sus competencias y reforzando sus lazos con su patria.
A ello contribuye de manera especial la nueva Carta de Inversiones, un mecanismo que contempla numerosos incentivos con el objetivo de consolidar el atractivo de los territorios, simplificar los procedimientos y fomentar las inversiones productivas.
Semana de Inversión
La iniciativa de la semana de inversión organizada en los 12 CRI de Marruecos coincide con la Operación Paso del Estrecho (Marhaba) 2025 y aprovecha el programa integrado destinado a acoger a los marroquíes de todo el mundo durante el periodo estival para animarlos a invertir en su país.
El programa presenta las oportunidades de inversión que ofrecen los distintos territorios, los bancos de proyectos disponibles en cada centro e incluirá sesiones interactivas y reuniones directas para responder a las preguntas de los potenciales inversores marroquíes.
De esta forma, se identificarán las oportunidades de inversión en los sectores más prometedores de cada una de las provincias y prefecturas de Marruecos, haciendo de los marroquíes del mundo socios clave del desarrollo regional y de la creación de valor añadido.
Los Centros Regionales de Inversiones permanecen abiertos durante todo el año para acoger a todos los inversores, incluidos los marroquíes residentes en el extranjero, con el fin de ofrecerles la información necesaria y apoyarlos en la realización de sus proyectos de inversión.
El objetivo es llegar a 550.000 millones de dirhams de inversión privada de ahora a 2026, aprovechando el potencial y el apego a sus orígenes de la diáspora marroquí.
Invitados a invertir en Marruecos
La Semana de Inversión tiene el fin de reafirmar a los marroquíes de todo el mundo no como meros visitantes de verano, sino como actores económicos con ambiciones, capital y voluntad de desarrollar su país de origen, atrayendo iniciativas innovadoras y compartiendo su experiencia en el extranjero al servicio de la economía nacional.
Este colectivo, formado por unos seis millones de personas residentes en Europa, América, África y Asia, constituye una importante palanca estratégica de desarrollo para Marruecos, según ha manifestado el ministro de Inversiones, Karim Zidane.
Su impacto no se limita a su contribución al desarrollo del país norteafricano, sino que colabora en la mejora del atractivo internacional de Marruecos, mediante su condición de representantes permanentes de su cultura, sus valores y su ambición.
Como subrayó el ministro Zidane durante la apertura de la primera edición del Foro Económico Marroquíes en el Mundo (FEMM), celebrado el 9 de mayo en Marrakech, “gracias a su éxito, compromiso y experiencia, los marroquíes de todo el mundo contribuyen activamente a la influencia internacional del Reino”.
El profundo apego de la diáspora marroquí a su país de origen, arraigado en lazos familiares, culturales y espirituales, hace que este colectivo esté listo a invertir en su país y participar en su progreso, aprovechando el potencial y las competencias de los portadores de proyectos innovadores que deben ser reconocidos y movilizados al servicio del desarrollo nacional.
Los residentes en el extranjero contribuyen de manera significativa a la economía marroquí, con unas remesas que alcanzarán los 117.700 millones de dirhams en 2024, lo que constituye el 7 % del PIB.
No obstante, la parte de la inversión privada procedente de la diáspora sigue estando limitada al 10 %. Por esta razón, el Gobierno quiere crear un entorno más atractivo, replantear el enfoque, simplificar los procedimientos, a fin de dar un nuevo impulso a la inversión de este colectivo en el territorio nacional.
Para el Ministerio de Inversiones, el objetivo último es convertir la riqueza humana de la diáspora en una fuerza económica estructurante para un Marruecos más inclusivo y resiliente, implicando plenamente a los residentes en el extranjero en el proceso de reformas.
Los CRI, a disposición de los expatriados
En cada Centro Regional de Inversiones, los marroquíes del mundo podrán descubrir, a lo largo de una semana entera, las nuevas oportunidades que ofrece la Carta de Inversiones y los recursos de los que dispone cada región, tanto humanos como naturales y tecnológicos.
Estos centros prestarán un apoyo diario, entre el 11 y el 15 de agosto, de 11 a 12:30 horas, mediante una unidad específica que acogerá a los marroquíes residentes en el extranjero para presentarles las oportunidades de inversión en cada región, explicarles los incentivos previstos por la nueva Carta de Inversiones y ayudarles a estructurar proyectos de gran potencial.
La iniciativa tiene dos dimensiones en su estrategia de acompañamiento de los expatriados: primero, facilitar la integración en la dinámica económica local de las competencias y capitales marroquíes en el extranjero; y segundo, eliminar los obstáculos administrativos, responder a las preguntas y orientar a los iniciadores de proyectos hacia las oportunidades más adaptadas a sus ambiciones, ofreciéndoles un apoyo personalizado.
El apego de los marroquíes del mundo a su propia patria se ve también en la intención de formar parte de la dinámica que experimenta el país en todos los sectores económicos, a través de invertir, crear valor y participar en el crecimiento integrado, en el marco de una visión política que tiende puentes eficaces entre las diferentes instituciones, regiones y la diáspora.