Las mujeres africanas, motor de progreso del continente

La primera Cumbre de Cooperación África-España que se ha celebrado en Madrid estos días cerraba el telón con una interesante sesión sobre el importante papel que las mujeres emprendedoras juegan en el impulso de la economía africana y donde también se puso de manifiesto los graves problemas y la discriminación que aún sufren. Un panel en el que participaron María Teresa Fernández de la Vega, presidenta de la Fundación Mujeres por África; Marta Maiques, directora de Comunicación de AFFAEME; Grace Obado, presidenta de África 2.0 (España); Massita González-Regueral kambou, de AMA; y Mariétou Coulibaly, representante de la Cámara Consular Regional de la Unión Económica y Monetaria de África Occidental. Jean Noeël Georges, CEO JNG Expert (Francia) fue el moderador.

Inauguró este encuentro María Teresa Fernández de la Vega que elogió el título elegido para el panel “porque el emprendimiento de las mujeres está empoderando a las sociedades africanas, generando desarrollo, bienestar y paz. El compromiso y generosidad de las mujeres no tiene límite”, resaltó.

Sin embargo, la presidenta de la Fundación Mujeres por África también quiso resaltar la grave situación que las mujeres siguen viviendo en el continente, donde, a nivel económico, un 64% viven de los empleos no regulados y, por tanto, sin derechos, y  relegadas a actividades de subsistencia que nos les permite salir de la pobreza, sin olvidar tampoco, añadió,  la falta de acceso a la educación, el radicalismo religioso existente, los embarazos precoces o los matrimonios obligados que sufren,  “pero son las que siempre se echan la carga, las que están ahí para ayudar”.

A pesar de la violencia o la discriminación, De la Vega afirmó que “las mujeres son el motor del continente, el agente de desarrollo y las lideres de avance y progreso en el desarrollo africano”.

De la Vega señaló que el paso a una sociedad más igualitaria se producirá si las mujeres tienen acceso a la educación y si les dejan poner en marcha sus ideas de negocios, y defendió la necesidad de que se les ayude con el acceso a los créditos, a la formación, con medios…

Tras explicar que África es el continente con la mayor tasa de mujeres emprendedoras del mundo con un 24 %, siendo Uganda y Botsuana países que destacan por potenciar programas para impulsar a las mujeres, pero con muchas disparidades en la región, De la Vega afirmó que “o a los gobiernos se les exige apoyo directo a las emprendedoras o esto no saldrá adelante, a pesar del gran esfuerzo que se están haciendo, porque se perderá el talento”.

Reflexiones y afirmaciones que fueron compartidas por el resto de las panelistas quienes expusieron sus experiencias personales los trabajos que desempeñan en las distintas instituciones que representan para que las mujeres puedan desarrollar sus potenciales. En este sentido, Marta Maiques explicó el compromiso de su Asociación con las mujeres, por lo que trabajan también con los gobiernos para conseguir que financien las iniciativas de estas mujeres emprendedoras o cómo otro de sus objetivos es dar una mayor visibilidad a las mujeres.

Analizaron también el papel que la mujer representa no sólo en las familias sino en las economías de los distintos países africanos, una labor que no está exenta de problemas, pues quedó de manifiesto que la brecha de género sigue siendo muy alta y que, aunque son muy emprendedoras, se encuentran con grandes dificultades. En este sentido, Grace Obado, presidenta de Africa 2.0 (España), señaló que todavía hay muchos cambios que hacer y que una de las vías para conseguir esos cambios es la de legislar, “tenemos que legislar para conseguir los cambios”, comentó.

En esta misma línea se pronunciaron Massita González-Regueral kambou y Mariétou Coulibaly, que, en general, contaron la dificultad de ser mujer y emprendedora, la transformación en África en el sector agrícola que se está experimentando gracias a las mujeres, la inclusión de éstas en el ámbito científico, la apuesta de algunos gobierno que incluso han creado ministerios de la mujer, el respaldo en todos los sentidos que necesitan no solo de España, sino de toda Europa, o la unión de todas las mujeres, “no solo africanas, sino de todo el mundo”, pero también con los hombres., “no hay que separarlos,  dejarlos a un lado”. Además, elogiaron la labor de entidades como la que preside De la Vega.

Lo que sí dejaron claro las participantes, es que el continente africano avanza y se desarrolla gracias a ellas, que seguirán luchando para conseguir la igualdad y que sólo si están unidas alcanzarán los objetivos marcados.

La primera Cumbre África-España que se celebra en nuestro país era clausurada por Hassan M. Alaoui, presidente de One Africa, entidad organizadora, tras abordar temas de gran interés, desde las energías renovables a la digitalización, la seguridad agroalimentaria, las inversiones y financiación o la cooperación, para resaltar las grandes oportunidades que ofrece África y cómo España debe mirar hacia este continente lleno de posibilidades.