El monarca alauí dirigió un mensaje este viernes a los participantes en las Reuniones Anuales del Grupo del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional organizadas en Marrakech

El rey Mohamed VI resalta el importante rol de Marruecos con motivo de las Reuniones Anuales del BM y el FMI

PHOTO/CASA REAL MARRUECOS - Mohamed VI

El rey de Marruecos, Mohamed VI, dirigió un mensaje este viernes a los participantes en las Reuniones Anuales del Grupo del Banco Mundial (BM) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) organizadas en Marrakech entre el 9 y el 15 de octubre. 

Omar Kabbaj, consejero de Su Majestad el Rey, fue el encargado de transmitir este mensaje con motivo del cónclave. Un comunicado que fue difundido también a través de la agencia oficial de noticias marroquí MAP.

En su mensaje, el rey de Marruecos se mostró halagado y encantado por la presencia de estas Reuniones Anuales del BM y el FMI en Marrakech, “milenaria ciudad rica por su historia y patrimonio cultural y civilizatorio”, que es un “lugar privilegiado para la organización de encuentros de envergadura”. 

El monarca alauí quiso hacer referencia al terrible terremoto sufrido el 8 de septiembre, ante el que el país norteafricano respondió de manera firme junto con la colaboración internacional, pudiendo además seguir organizando eventos como el de las Reuniones Anuales del BM y el FMI en Marrakech, ciudad también azotada por el seísmo. “En el contexto del terrible seísmo que recientemente ha golpeado a nuestro país, queremos expresar toda nuestra consideración por los sentimientos de amistad y confianza en nuestro país, tanto a los aquí presentes como a los países y organizaciones que han manifestado su disponibilidad de apoyar a Marruecos, sobre todo en la etapa de reconstrucción”, indicó el rey de Marruecos. 

REUTERS/SUSANA VERA - Un oficial de policía está de guardia junto a la entrada principal del lugar de celebración de las próximas reuniones del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, tras el mortal terremoto del mes pasado, en Marrakech, Marruecos, el 8 de octubre de 2023

El rey Mohamed VI destacó la importancia de la celebración de estas Reuniones Anuales en un momento en el que “la fragmentación geoeconómica y el auge del soberanismo, impulsado en parte por el deseo de buscar el reequilibrio de las relaciones de poder en lo económico y político a nivel global, están comprometiendo los notables avances que el multilateralismo ha hecho posible alcanzar en las últimas décadas”.

El monarca de Marruecos también quiso destacar el fenómeno de la globalización, con sus aspectos positivos, como el auge comercial, y negativos, como el aumento de las desigualdades, ante lo que hay que luchar, con la colaboración de todos los actores internacionales, incluidas las naciones y organismos como el FMI y el Banco Mundial. Todo ello promoviendo la diplomacia pacífica, la cooperación y el respeto a la soberanía nacional de cada país. 

En este sentido, el rey de Marruecos destacó la gran labor llevada a cabo por su país para acometer diversas reformas que han situado a la nación en una muy buena situación actualmente, algo que se demuestra con el relevante papel internacional que desarrolla en la actualidad el reino marroquí, que supone un ejemplo de cooperación y colaboración internacional en favor del desarrollo, colaboración en diversos ámbitos e intercambios a todos los niveles. 

PHOTO/FILE - Aziz Akhannouch y Kristalina Georgieva

“He aquí la visión que rige nuestro enfoque del desarrollo en Marruecos. Nuestras bazas no son otras sino nuestra milenaria historia y nuestra condición de tierra de paz, de mezcla de civilizaciones y de convivencia entre las religiones y las culturas, favorecida por una posición geográfica en la encrucijada entre África, Oriente Medio y Europa”, resaltó el rey Mohamed VI.

“En este sentido, nuestro enfoque privilegia la apertura económica y la cooperación. De hecho, nos hemos adherido a las diferentes agendas mundiales, ya sea en términos de desarrollo económico, de lucha contra el cambio climático o de combate contra el terrorismo, el blanqueo de capitales y la escalada de la inseguridad cibernética provocada por la revolución digital”, manifestó el rey Mohamed VI, quien añadió que Marruecos ha hecho de la cooperación Sur-Sur su “eje prioritario de apertura”, adoptado un enfoque de codesarrollo con países aliados. 

“En el plano interno, hemos lanzado, ya desde principios del año 2000, importantes reformas societarias, sociales y económicas, así como un vasto programa de infraestructuras. Paralelamente, hemos velado por la preservación de los equilibrios macroeconómicos que consideramos como una garantía de soberanía y resiliencia económicas. He aquí un enfoque equilibrado donde la política económica se moviliza al servicio del desarrollo humano, que hemos convertido en una prioridad absoluta desde nuestro acceso al Trono; una orientación que no hemos dejado de reforzar desde la pandemia de la COVID-19. En este contexto, hemos puesto en marcha una obra sin precedentes para la generalización de la protección social en nuestro país”, indicó el monarca alauí.

El rey Mohamed VI también destacó que “los resultados de esta visión son actualmente palpables, ya que la economía nacional ha dado la prueba de una notable resiliencia en este complejo e incierto panorama internacional, marcado por una sucesión de choques improbables en estos últimos años”.

AFP/FADEL SENNA - La oficial de prensa del FMI, Randa Elnagar, directora del Departamento de Mercados Monetarios y de Capitales del FMI, Tobias Adrian, director adjunto del Departamento de Mercados Monetarios y de Capitales del FMI, Fabio Natalucci, y subdirector del Departamento de Mercados Monetarios y de Capitales del FMI, Jason Wu, participan en una conferencia de prensa el segundo día de las Reuniones Anuales del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Grupo del Banco Mundial (GBM), en Marrakech el 10 de octubre de 2023

A continuación, se reproduce el texto íntegro del mensaje enviado por el rey Mohamed VI a los participantes en las Reuniones Anuales del BM y el FMI en Marrakech:

“Loor a Dios, la oración y el saludo sean sobre nuestro señor Enviado de Dios, su familia y compañeros,

Excelencias,

Señoras y Señores,

Es un placer para nosotros darles la bienvenida en Marruecos, y precisamente en Marrakech, esta milenaria ciudad rica por su historia y patrimonio cultural y civilizatorio, que la convierten no sólo en un destino turístico mundial, sino también en un lugar privilegiado para la organización de encuentros de envergadura, algunos de las cuales han marcado nuestra historia moderna, como fue el caso de la cumbre del GATT en 1994, que vio el nacimiento de la Organización Mundial del Comercio y, muy recientemente, de la COP22 en 2016.

Estamos seguros de que lo mismo será el caso para estas Reuniones Anuales del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional.

En el contexto del terrible seísmo que recientemente ha golpeado a nuestro país, queremos expresar toda nuestra consideración por los sentimientos de amistad y confianza en nuestro país, tanto a los aquí presentes como a los países y organizaciones que han manifestado su disponibilidad de apoyar a Marruecos, sobre todo en la etapa de reconstrucción.

Excelencias,

Señoras y Señores,

Hoy nos alegramos de que, después de dos años de aplazamiento a causa de la pandemia, este prestigioso foro regrese al continente africano después de medio siglo, y a la región MENA, 20 años tras aquel celebrado en Dubái, en 2003.

En efecto, dado el contexto excepcional que atraviesa el mundo y los desafíos geopolíticos, económicos y ambientales que enfrentamos desde hace varios años, altas son las expectativas para estas Reuniones Anuales.

A medida que nuestro planeta afronta cambios climáticos que los datos confirman cada vez más como una nueva realidad, el mundo se va hundiendo en problemas que considerábamos, en gran medida, como resueltos, gracias a las reglas e instituciones multilaterales establecidas después de la Segunda Guerra Mundial.

En la actualidad, la fragmentación geoeconómica y el auge del soberanismo, impulsado en parte por el deseo de buscar el reequilibrio de las relaciones de poder en lo económico y político a nivel global, están comprometiendo los notables avances que el multilateralismo ha hecho posible alcanzar en las últimas décadas.

La globalización, vigente desde los años 80, que ha llevado a una reducción de los costos de producción y favorecido la promoción del comercio mundial, ha contribuido en parte a la moderación de la inflación que ahora está erosionando el poder adquisitivo de los hogares en todo el mundo, a pesar de las agresivas políticas monetarias, ampliamente sincronizadas, pero no exentas de consecuencias para la actividad económica.

En este sentido, la misma ha propiciado avances tangibles en términos de mejora de los niveles de vida, permitiendo a grandes sectores de la población mundial escapar de la pobreza, a pesar de los efectos indeseables que ha comportado, particularmente en términos de desigualdades cada vez más pronunciadas.

Excelencias,

Señoras y Señores,

Los desarrollos económicos, sociales y políticos de los últimos años reclaman, desde luego, una reforma de las instituciones y normas que rigen el multilateralismo, pero los principios básicos de este último requieren la consolidación y recuperación del espíritu que lo anima. No obstante, siguen siendo necesarios para preservar la estabilidad y la paz global, así como para impulsar las sinergias a fin de afrontar los desafíos comunes que atraviesan nuestro planeta y nuestros pueblos.

Pero, como todos sabemos, frente a los desafíos globales, necesitamos soluciones globales que sólo pueden diseñarse dentro de un marco de unidad y respeto mutuo entre las naciones, donde se integre y valore la diversidad como fuente de riqueza y no de conflicto, tomando en consideración las especificidades intrínsecas de cada país y de cada región.

Asimismo, es importante revisar y mejorar la arquitectura financiera global para hacerla más justa e inclusiva. Estas Reuniones Anuales constituyen, en este sentido, el foro idóneo para el diálogo y el debate constructivo en torno a esta reforma.

Si toda la humanidad está destinada a vivir en el mismo planeta, ningún país podrá forjar su futuro si tomar en consideración el destino de los demás países.

Excelencias,

Señoras y Señores,

He aquí la visión que rige nuestro enfoque del desarrollo en Marruecos. Nuestras bazas no son otras sino nuestra milenaria historia y nuestra condición de tierra de paz, de mezcla de civilizaciones y de convivencia entre las religiones y las culturas, favorecida por una posición geográfica en la encrucijada entre África, Oriente Medio y Europa.

En este sentido, nuestro enfoque privilegia la apertura económica y la cooperación. De hecho, nos hemos adherido a las diferentes agendas mundiales, ya sea en términos de desarrollo económico, de lucha contra el cambio climático o de combate contra el terrorismo, el blanqueo de capitales y la escalada de la inseguridad cibernética provocada por la revolución digital.

Asimismo, hemos hecho de la cooperación Sur-Sur nuestro eje prioritario de apertura, adoptando un enfoque de codesarrollo con los países hermanos y amigos del Continente.

En el plano interno, hemos lanzado, ya desde principios del año 2000, importantes reformas societarias, sociales y económicas, así como un vasto programa de infraestructuras. Paralelamente, hemos velado por la preservación de los equilibrios macroeconómicos que consideramos como una garantía de soberanía y resiliencia económicas.

He aquí un enfoque equilibrado donde la política económica se moviliza al servicio del desarrollo humano, que hemos convertido en una prioridad absoluta desde nuestro acceso al Trono; una orientación que no hemos dejado de reforzar desde la pandemia de la COVID-19. En este contexto, hemos puesto en marcha una obra sin precedentes para la generalización de la protección social en nuestro país.

Los resultados de esta visión son actualmente palpables, ya que la economía nacional ha dado la prueba de una notable resiliencia en este complejo e incierto panorama internacional, marcado por una sucesión de choques improbables en estos últimos años.

Por otro lado, nuestro país ha podido consolidar y fortalecer su posicionamiento como isla de paz, seguridad y estabilidad, así como su estatuto de socio creíble y centro económico y financiero regional y continental.

Por ello, consideramos el hecho de que nuestro país acoja estas Reuniones como el fruto de una relación de cooperación construida, desde hace muchos años, con las instituciones de Bretton Woods y una señal de confianza en la solidez de nuestro marco institucional, en nuestras infraestructuras y en nuestro compromiso de contribuir al fortalecimiento de las relaciones internacionales.

Excelencias,

Señoras y Señores,

En tanto que país africano, Marruecos espera que el Continente, cuya voz es audible ahora en el seno del Grupo de los 20 a través de la Unión Africana, pueda encontrar el lugar que le corresponde en otras instancias internacionales para que sus agendas económicas y sociales puedan ser impulsadas.

Bien saben ustedes que los países del Continente se encuentran entre los que más sufren las consecuencias del cambio climático, mientras que su contribución a las actividades que producen el calentamiento global se halla entre las más bajas.

En este sentido, las normas y marcos que rigen el tratamiento de la problemática de la deuda deberían ser reequilibrados para tomar más en consideración las limitaciones y el margen de maniobra de los países más endeudados y de ingresos bajos.

África, que en 2050 albergará la cuarta parte de la población mundial, hoy debe reunir las condiciones que le permitan reforzar su margen de maniobra, así como fructificar su potencial, a fin de satisfacer las necesidades de su población, en un mundo cada vez más incierto marcado por profundas inestabilidades que han alcanzado los modelos y sistemas existentes.

Señoras y Señores,

Durante la pandemia de la COVID-19, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, junto con todas las agencias y organismos internacionales que constituyen los pilares del sistema multilateral mundial, han dado la prueba de una gran agilidad y capacidad de respuesta. De este modo, han constituido un apoyo crucial para muchos países miembros, en los esfuerzos destinados a atenuar el impacto económico y social de la pandemia.

Estamos convencidos de que estas dos instituciones no escatimarán esfuerzo alguno para que estas Reuniones desemboquen en avances tangibles y concretos. En este sentido, es deseo nuestro ver que las divergencias entre las grandes economías puedan ser atenuadas y que los esfuerzos y las sinergias sean movilizados aún más al servicio de la paz y la prosperidad mundiales, en el seno de un espíritu de solidaridad hacia los países más frágiles.

Solo un diálogo franco, constructivo y equilibrado es susceptible de conciliar entre los retos económicos y financieros, por una parte, y humanos, por otra, a fin de construir juntos el futuro común que todos anhelamos para nuestros hijos.

Dios les asista y corone con éxito sus trabajos.

Wassalamou alaikoum warahmatoullahi wabarakatouh".