Elon Musk demuestra su poderío con el disparo de tres Falcón 9 en poco más de 24 horas

Elon Musk y su compañía SpaceX han querido demostrar su superioridad tecnológica con el despegue de tres cohetes Falcón 9 en poco más de 24 horas - PHOTO/SpaceX
Acelera su ritmo de despegues para recuperar los 16 días que su vector principal ha estado inactivo y conseguir 144 lanzamientos en 2024
  1. Un triple retorno al vuelo para recuperar los días perdidos
  2. La familia Falcón, una de las más fiables del mundo

El protagonista número uno indiscutible del sector espacial internacional, el fundador y presidente ejecutivo de la compañía SpaceX, el multimillonario norteamericano Elon Musk, ha vuelto a dejar anonadados a sus más firmes competidores de Estados Unidos, China y Europa.

El sonado fracaso del 12 de julio de su veterano lanzador Falcón 9 hizo que Elon Musk creara de manera inmediata una Comisión de Investigación que, puesta bajo la supervisión de la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA), ha dictaminado la causa más probable del accidente. También ha concedido su visto bueno a las medidas técnicas correctoras para garantizar el éxito de las misiones posteriores, tripuladas y no tripuladas.

El primer Falcón 9 en pleno vuelo de ascenso desde Cabo Cañaveral en la madrugada del 27 de julio. Otro permanece en su rampa en tierra, a la espera del momento de su despegue - PHOTO/SpaceX

En su informe oficial, los ingenieros de SpaceX acreditan que el problema detectado y las soluciones planteadas “no conllevan riesgo para la seguridad pública”, con lo que la autorización oficial para que el Falcón 9 siga volando al espacio no se ha materializado en meses como suele ser habitual, sino en poco más de dos semanas.

Pero hay más. Para demostrar su poderío y corroborar ante propios y extraños la fiabilidad de su principal vector de transporte ultraterrestre, la empresa SpaceX ha hecho todo un alarde de su dominio de la tecnología espacial y de su alta capacidad de lanzamiento.

Elon Musk con el teniente general Jay Raymond, primer jefe de la Fuerza Espacial. Para la seguridad nacional de Estados Unidos, el Falcón 9 resulta crucial para poner en órbita los satélites espía del Pentágono - PHOTO/USAF

Si lo ortodoxo es probar la fiabilidad de las correcciones introducidas con un único lanzamiento, a veces seguido varios meses después por otro, Elon Musk ha querido demostrar su superioridad con nada menos que tres despegues consecutivos de otros tantos cohetes. Y los tres disparos, algo totalmente inusual… ¡en poco más de 24 horas! 

Un triple retorno al vuelo para recuperar los días perdidos

En concreto, los tres Falcón 9 han partido al espacio los días 27 y 28 de julio, uno tras otro, en un espacio de unas 27 horas. Lo han hecho desde localizaciones que distan entre si alrededor de 3.600 kilómetros. Dos partieron desde las instalaciones que SpaceX tiene asignadas en el Centro Espacial Kennedy y en Cabo Cañaveral, ambas en Florida, en la costa del Atlántico. El tercero se ha efectuado desde el otro extremo de Estados Unidos, la base Vandenberg de la Fuerza Espacial (California), en la costa del Pacífico.

El Falcón 9 ya lleva 75 lanzamientos en lo que va de 2024, pero Elon Musk quiere alcanzar la cifra record de 144 vuelos antes del 31 de diciembre - PHOTO/SpaceX

En cada una de las tres misiones se han puesto en órbita una veintena de satélite Starlink. En otras palabras, los ingenios que han asumido el riesgo eran del propio Elon Musk. Con ello, el admirado hombre de negocios ha querido certificar su confianza en las mejoras implantadas. De ese modo, intenta asegurar las fechas de despegues a la larga cartera de clientes de su Falcón 9, entre ellas a las españolas FOSSA, Hisdesat, Sateliot y Satlantis, cuyos satélites siguen programados para surcar el espacio en 2024 y que es posible que no sufran demoras, al menos de importancia. 

En su comunicado oficial del 25 de julio, SpaceX asegura que sus equipos de ingeniería han realizado una revisión “exhaustiva” para facilitar la vuelta al servicio del Falcón 9. La compañía confirma que “se han eliminado los sensores que provocaron el fallo del motor Merlín de la segunda etapa del cohete, porque ya existen otros alternativos que cumplen las mismas funciones”.

Los tres astronautas norteamericanos y el ruso que componen la tripulación titular de la misión Dragón Crew-9. De izquierda a derecha, Stephanie Wilson, Alexander Gorbunov, Nick Hague y Zena Cardman - PHOTO/NASA

Elon Musk ya lleva 75 lanzamientos en lo que va de 2024 y quiere recuperar su frenético ritmo y alcanzar los 144 vuelos que quiere conseguir a lo largo de todo el año, en su inmensa mayoría gracias al Falcón 9. Su cohete es indispensable para la seguridad nacional de Estados Unidos y para poner en órbita satélites espía del Pentágono. 

También lo es como vehículo de transporte de vuelos tripulados, de los que dos están previstas para las semanas próximas: SpaceX Crew 9, para el 18 de agosto, con cuatro astronautas con destino a la Estación Espacial Internacional (ISS). Otra es Polaris Dawn, una misión privada también con cuatro astronautas prevista para finales del próximo mes, que pretende estar cinco días en órbita sin atracar en la ISS. 

La familia Falcón, una de las más fiables del mundo

Pero ¿cuáles son los cambios y mejoras introducidos en el Falcón 9? SpaceX recalca que el cambio de diseño “se ha probado en sus instalaciones de desarrollo de cohetes de su sede de McGregor (Texas), con la participación del equipo de investigación de SpaceX y bajo la supervisión de la FAA”.

Elon Musk ha vuelto a dejar sorprendidos a sus más firmes competidores de Estados Unidos, China y Europa. En imagen con el comisario europeo responsable de industria espacial, Thierry Breton - PHOTO/EU-Thierry BretonX

Las revisiones y análisis de los datos tomados durante el vuelo han confirmado que en la primera combustión del motor de la segunda etapa de propulsión del Falcón 9 “se produjo una fuga de oxígeno líquido debido a una grieta en una línea de detección de un sensor de presión conectado al sistema de oxígeno del vehículo”. 

La grieta se produjo a causa de la fatiga causada por la elevada vibración del motor y la holgura en la abrazadera que normalmente restringe la línea. A pesar de la fuga, el motor Merlín de la segunda etapa funcionó durante su primer encendido y completó su apagado.

Los equipos de ingeniería SpaceX han revisado de forma exhaustiva todos los sensores vinculados con el sistema de alimentación del motor Merlín de la segunda etapa del Falcón 9, el que provocó el accidente del 12 de julio - PHOTO/SpaceX

Sin embargo, en el segundo encendido, el motor experimentó “un arranque difícil en lugar de una combustión controlada”, detalla el informe. El resultado fue que “el hardware del motor resultó dañado y la etapa superior perdió el control de actitud. No obstante ‒continua el documento‒, la segunda etapa continuó funcionando y desplegó los satélites Starlink”.

Desafortunadamente, “todos los satélites fueron posicionados en un entorno de enorme resistencia aerodinámica a solo 135 kilómetros sobre la Tierra”, lo que provocó que volvieron a reingresar en la atmósfera terrestre, aunque “sin representar amenaza para la seguridad pública”. 

El comunicado oficial de SpaceX concluye que “nuestras misiones de llevar astronautas, cargas útiles de clientes y miles de satélites Starlink a órbita de manera segura son de importancia crítica y dependen de que la familia de cohetes Falcón ‒Falcón 9 y Falcón Heavy‒ sea una de las más fiables del mundo”.