GMV muestra al rey de España sus tecnologías para control satelital, explorar el cosmos y defensa
El grupo empresarial e industrial español GMV goza de renombre y prestigio en el sector aeroespacial y de defensa mundial y sus productos y servicios están presentes en agencias espaciales, operadores de satélites y grandes empresas de los cinco continentes.
Creado en 1984 como empresa privada e independiente, características que mantiene a pesar de tentaciones, GMV acaba de cerrar el año de su 40 aniversario con la visita del Rey de España a su cuartel general. Para la ocasión, el equipo directivo del grupo ha exhibido ante Felipe VI sus principales innovaciones tecnológicas en los segmentos en los que ofrece altas competencias estratégicas: espacio, aeronáutica, defensa y seguridad, sistemas inteligentes de transporte, ciberseguridad, y servicios públicos digitales.
Así lo ha recalcado la presidenta del grupo, Mónica Martinez, que frente al monarca ha puesto de relieve que GMV es “una multinacional española que apuesta por el talento y la innovación para competir con los mejores”. Que su equipo humano es de “casi 3.500 profesionales”, lo que la ha convertido en el “sexto grupo industrial espacial europeo en cuanto a número de empleados” y en una “referencia global en tecnologías avanzadas, con clientes en los cinco continentes y que compite con grandes empresas a nivel mundial”.
La presidenta asegura que GMV mantiene el “espíritu de innovación, compromiso y vocación por la excelencia que caracteriza a nuestra organización desde su origen”. Así lo acreditan los datos provisionales de ingresos económicos del grupo en 2024 que, a la espera de ser consolidados, el director general de GMV desde 2009, Jesús Serrano, ha adelantado a ATALAYAR que “están comprendidos entre los 450 y 470 millones de euros”, lo que significa un incremento entre el 17 y el 22 por ciento respecto a 2023, año en el que la cifra de negocio ascendió a 384,38 millones.
Del volumen de negocio registrado en el año que acaba de concluir, Serrano ha precisado que “en torno al 75 por ciento proviene del mercado internacional” y que “alrededor de las dos terceras partes del volumen de facturación ‒en torno a los 300 millones‒ corresponden al sector espacial”, que está estructurado en dos grandes unidades de negocio y que ambas han logrado posicionar a GMV al rango de contratista principal.
Presencia hasta en las antípodas de España
Una rama se dedica al desarrollo de Sistemas Espaciales. Su director general desde 2022 es Enrique Fraga y engloba las competencias de observación de la Tierra, exploración, ciencia, transporte y seguridad espacial, así como telecomunicaciones vía satélite. La otra es Sistemas de Navegación por Satélite, que también desde 2022 dirige Miguel Romay. Ejemplos concretos de éxitos le fueron mostrados a Felipe VI, en especial la réplica existente en la sede central de GMV de los centros de control operativos en tierra de la constelación Galileo, localizados en Oberpfaffenhofen (Alemania) y Fucino (Italia).
Víctor Pozo y Ana Romero, director y responsable de ciberseguridad, respectivamente, de la réplica de ambos centros de control, explicaron a Felipe VI que se trata de una infraestructura “fundamental para el correcto funcionamiento de toda la constelación”, ya que entre sus principales responsabilidades están las de diseñar, desarrollar, integrar y desplegar versiones mejoradas de software.
En las pantallas de la sala que supervisan Víctor Pozo y Ana Romero se recibe “la telemetría de todos los satélites Galileo, se verifica su estado de salud, generamos y mandamos todas las señales”. Además de trabajar en la segunda generación de Galileo, se integran todas las nuevas versiones de algoritmos, “que luego instalamos en las salas de control de Alemania, Italia y en las estaciones remotas a lo largo y ancho de todo el mundo”.
Uno de los últimos logros del grupo tuvo lugar a mediados de diciembre, cuando la Agencia de la Unión Europea para el Programa Espacial (EUSPA) adjudicó un contrato de 6 millones de euros a un equipo industrial encabezado por GMV para desarrollar nuevos servicios del Sistema de Alerta de Emergencias de Galileo o ERAS. Debe estar operativo en la primera mitad de 2026, para permitir que las organizaciones de protección civil de los países de la UE puedan transmitir mensajes de alerta a los teléfonos inteligentes particulares e informar a sus propietarios de zonas afectadas o de riesgo por desastres.
El grupo ha llegado a sembrar su marca en las antípodas de España, en Oceanía, donde consiguió el mayor contrato adjudicado a una empresa espacial española fuera del marco geográfico de la Unión Europea. Allí, GMV última el desarrollo de los centros de procesado y control de SouthPAN, el sistema de navegación y posicionamiento conjunto de Australia y Nueva Zelanda para proporcionar servicios críticos a sus sectores minero, energético, de transporte y agrícola.
Con 11 filiales en Europa, América y Asia
En el marco de las comunicaciones satelitales, el grupo capitanea el consorcio de empresas del programa GovSatCom, una iniciativa de Bruselas para proporcionar servicios de comunicaciones seguras vía satélite a usuarios gubernamentales de la Unión Europea para la gestión de infraestructuras críticas y situaciones de crisis.
Otra esfera que ha tenido una creciente pujanza en GMV es la de Defensa y Seguridad, que desde más de una década dirige Manuel Pérez. Su director de Desarrollo de Negocio, José Prieto, ha explicado al Rey la aportación de la compañía al programa del sistema de combate a pie o SISCAP. Se trata del llamado ordenador “ciego” ‒porque no tiene pantalla de visualización‒, pero que mediante micro ordenadores integra la capacidad de mando y control, las señales de los sensores optronicos, la gestión y recarga de las baterías y lo envía al visor del soldado.
El presidente del Consejo de Espacio del grupo, Miguel Ángel Molina, ha confirmado que Airbus Space Systems GmbH, el contratista principal que va a dar vida a la pareja de satélites de comunicaciones seguras SatcomBw-3 de la Bundeswehr, ha seleccionado a GMV para que aporte el software de control y todos los componentes del segmento terreno del nuevo centro de control y seguimiento de ambos ingenios.
El Rey de España también ha presenciado la demostración de un vehículo de cuatro ruedas desarrollado por GMV para rodar por el Planeta Rojo y del sistema de captura de satélites “Cat”, gato en inglés. Concebido por el equipo de estrategia y desarrollo de negocio de Ciencia, Exploración y Transporte a cuyo frente se encuentra Mariella Graziano, es una especie de garra para atrapar ingenios y encaminarlos hacia la Tierra, para que se destruyan en las capas altas de la atmosfera y no generen residuos en el espacio.
El colectivo profesional de GMV está compuesto por cerca de 3.500 profesionales, el 92 por ciento ingenieros, distribuidos entre sus diferentes sedes en España ‒Barcelona, Madrid, Sevilla, Valencia, Valladolid y Zaragoza‒ y sus 11 filiales en Europa ‒Alemania, Bélgica, Francia, Países Bajos, Polonia, Portugal, Reino Unido y Rumania‒, América ‒Colombia y Estados Unidos‒ y Asia, en Malasia.
La compañía fue fundada por el profesor Juan José Martinez, catedrático de Mecánica de Vuelo de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Aeronáuticos de la Universidad Politécnica de Madrid. Su cuartel general se encuentra en el Parque Tecnológico de Tres Cantos, localidad a tan sólo 30 kilómetros de la capital de España, cuyo alcalde, Jesús Moreno, acompañó a Felipe VI en su visita.