La crisis entre Francia y Argelia sigue estancada, a pesar de la visita del director de Inteligencia Exterior francesa a Argel
La crisis entre Francia y Argelia continúa estancada, a la espera de nuevos avances que podrían inclinarse hacia la escalada o la desescalada. En este contexto, se prevé una reunión de alto nivel entre el presidente Emmanuel Macron y altos funcionarios, en la que se estudiarán y anunciarán las posibles medidas a adoptar al respecto. Mientras tanto, la reciente visita del director de la Inteligencia Exterior francesa a Argelia no produjo resultados concretos. El viaje parece haber quedado en un simple intercambio de posiciones, sin avances significativos.
Según informó Le Figaro, la visita del Director de Seguridad Exterior, Nicolas Merler, a Argelia tiene lugar en un momento en que “la cooperación en materia de seguridad entre los dos países se ha interrumpido desde el verano pasado”. “Este gesto refleja el deseo de Argelia de mantener abiertos los canales de diálogo, a pesar de las recientes tensiones y las acusaciones mutuas de espionaje”, añade.
Todos los ojos están puestos en los resultados de la próxima reunión entre el presidente francés Emmanuel Macron y altos funcionarios en el Elíseo, donde se analizará la crisis entre París y Argel y se buscará formular una “respuesta adecuada”. Este encuentro podría dar forma a las medidas anunciadas por los ministros franceses, que incluyen la posibilidad de revisar la acreditación de los consulados argelinos en Francia, suspender el acuerdo de visados de élite firmado en 2013 y congelar la ayuda financiera destinada a Argelia.
Los dos países atraviesan una tensión sin precedentes. Además del acalorado debate en los círculos políticos y mediáticos, la ira oficial se intensificó en París después de que Argelia se negara a recibir al activista Boualem Nomane, deportado de Francia por fomentar el discurso de violencia, terrorismo y odio.
El ministro francés del Interior, Bruno Retailleau, acusó a Argelia de intentar “humillar a Francia”, advirtiendo que el país europeo "no tendrá más opción que tomar represalias” si "Argelia sigue adoptando esta postura cada vez más desafiante”.
Argelia mantiene 20 consulados en suelo francés, un número que refleja la magnitud de su comunidad en Francia, estimada en alrededor de una décima parte de la población total, según cifras oficiales francesas. Esta cifra incluye tanto a inmigrantes comunes como a aquellos con doble nacionalidad. En contraste, Francia solo cuenta con tres consulados en Argelia.
Las autoridades francesas filtraron una lista de ciudadanos argelinos beneficiarios del visado diplomático destinado a Francia o al espacio Schengen, revelando que numerosos no diplomáticos y altos funcionarios del Ministerio de Asuntos Exteriores o del gobierno habían obtenido dicho visado.
Esto ha sugerido que el programa de visados de élite podría haber sido utilizado con propósitos no diplomáticos ni gubernamentales. Además, se ha especulado sobre la posibilidad de que esta situación se utilice como una herramienta de presión, como ha insinuado el ministro de Justicia, Gerard Darmanin.
Por su parte, Argelia ha convocado al embajador francés, Stéphane Romatet, para expresarle su protesta oficial y su última advertencia sobre la supuesta implicación de agentes de seguridad franceses en un plan para desestabilizar el país.