Francia quiere eliminar el acuerdo que permite a los funcionarios argelinos entrar al país sin visado

El ministro francés de Justicia, Gérald Darmanin, anunció, en una entrevista para el medio francés LCI, que los últimos "encontronazos” diplomáticos entre Francia y Argelia han derivado en la decisión de querer “abolir” el acuerdo gubernamental franco-argelino por el cual se permitía a más de 1.000 diplomáticos argelinos viajar libremente por Francia sin la necesidad de tener visado.
Tensions France/Algérie : @GDarmanin appelle à revenir sur l'accord de 2013 permettant aux tenants d'un passeport diplomatique algérien de circuler en France sans visa.
— LCI (@LCI) January 12, 2025
"Il faut supprimer cette facilité", demande le garde des Sceaux.
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La decisión que comunicó el ministro no afectará a la población de origen argelino que reside en Francia, a los ciudadanos argelinos o a los “pied-noirs”, que son los franceses que residían en territorio argelino durante el período colonial francés. “Esta medida de represalia no tendría impacto en el 10 % de nuestros ciudadanos que tienen vínculos de sangre, tierra y cultura con Francia”, aclaró Darmanin.

La resolución pretende asestar un golpe a la élite argelina. En palabras del ministro, la decisión de privar a los argelinos que poseen el pasaporte oficial o diplomático es “lo más inteligente, efectivo y de rápida ejecución”. Las relaciones entre los dos países no están en su mejor momento. Las acusaciones de medios y políticos argelinos son una constante de la diplomacia norteafricana.
“Estamos en un punto muy crítico y esta humillación que nos quieren infligir no es aceptable. Argelia debe respetar a Francia, y Francia debe respetar a Argelia”, concluyó el ministro. Argelia a su vez acusó a Francia de querer promover una escalada en el conflicto mediante una campaña de desprestigio, desinformación y distorsión de la realidad argelina.

Caso Doualemn
El último caso fue el de la detención en el sur de Francia, en Montpellier, del influencer argelino Doualemn a quien se le canceló el permiso de residencia tras pedir éste que se torturara a la oposición del líder del régimen argelino, Abdelmadjid Tebboune.
Desde el prisma argelino, este encarcelamiento fue una “decisión arbitraria de la ultraderecha francesa”. Los acontecimientos entre ambos países no pasan solo por la encarcelación del influencer.
La detención del escritor franco-argelino por el régimen militar que gobierna Argelia es una de las máximas preocupaciones del Ministerio de Asuntos Exteriores francés.

Asimismo, los fiscales franceses anunciaron que el influencer argelino conocido como “Zazo Youssef”, se enfrentará a un juicio en Francia por cargos de incitación al terrorismo a través de TikTok. Ante esto, el ministro del Interior francés, Bruno Retailleau, de acuerdo con Darmanin, aclaró que la actitud de Argelia es “absolutamente inaceptable” y que “pretende humillar a Francia”.
En la misma línea se expresó el ex primer ministro de Francia, Gabriel Attal, en una columna publicada en el diario francés Le Figaro, donde insta a denunciar el acuerdo franco-argelino de 1968 y al deber de fijar límites y asumir el equilibrio de poder.
“Frente al régimen argelino que aumenta sus provocaciones, es hora de asumir la responsabilidad del equilibrio de poder. Y para garantizar que se respete la voz de Francia. Entre la ceguera de la extrema izquierda y el odio ciego de la extrema derecha hay un camino: el de una nueva relación con Argelia, una relación desapasionada, basada en el respeto. Respeto a nuestras leyes, nuestras fronteras, nuestros intereses y entre nuestros dos pueblos”, señalaba Gabriel Attal en Le Figaro.

Megacárcel
Además, Gérald Darmanin anunció en la misma entrevista que creará una megacárcel para “los 100 mayores narcotraficantes del país”, lo que es una decisión fuerte y asertiva cuyo fin es mostrar a los dueños del mercado de la droga que los delincuentes en Francia dejarán de llevar una buena vida.
“Vamos a tomar una prisión francesa, vaciarla por completo y transformarla en una fortaleza segura. Estos delincuentes ya no podrán llamar por teléfono, ordenar su tráfico ni amenazar a nadie”, explicó.