Los vínculos entre Mauritania y Marruecos juegan un papel importante en la cooperación regional

El rey marroquí Mohamed VI y el presidente mauritano Mohamed Ould Ghazouani - PHOTO/FILE
Mauritania, desde el conflicto en el Sáhara Occidental, es un actor clave en la región del Magreb, esto se debe a su posición geoestratégica entre Argelia y Marruecos, desempeña un papel relevante en el equilibrio regional 
  1. Conflicto del Sáhara Occidental 
  2. Mauritania y su posición geográfica
  3. Importancia de las asociaciones mauritanas-marroquíes 

Marruecos y Mauritania tienen vínculos de seguridad, económicos y políticos, como la cooperación en el comercio fronterizo y acuerdos bilaterales. Además, Nuakchot busca tener buenas relaciones con Argelia para mantener un equilibrio diplomático en la región.  

Una reunión reciente entre el rey marroquí Mohamed VI y el presidente mauritano Mohamed Ould Ghazouani marcó una mejora en las relaciones entre ambos países, según expertos en el norte de África. 

El Dr. Jamal Ait Adam, especialista en asuntos del norte de África, menciona en un informe publicado por Modern Policy que las relaciones entre Marruecos y Mauritania encarnan un concepto crucial de integración regional debido a la historia y cooperación mutua.  

Uno de los puntos claves de esta alianza es la proximidad geográfica entre la región del Sahel-Sahariana y el norte de África, debido a que los posiciona a la vanguardia de las amenazas de seguridad como el terrorismo, la delincuencia organizada, la trata de personas y la migración ilegal.

 

Conflicto del Sáhara Occidental 

Tras la independencia de Marruecos en 1956, el país reclamó el Sáhara Occidental como parte de su territorio y en 1975 se organizó la Marcha Verde en donde 350.000 ciudadanos se movilizaron de manera pacífica hacia el Sáhara para presionar a España a abandonar el territorio.  

Los protagonistas del conflicto son Marruecos, Mauritania y el Frente Polisario. Este último es un movimiento independentista que lucha por la creación de un Estado saharaui y cuenta con el apoyo de Argelia, que estableció el Gobierno en el exilio de la República Árabe Saharaui Democrática en 1976. 

Mauritania también es otro de los actores clave, ya que, al igual que Marruecos, reclamó una parte del Sáhara Occidental que en los Acuerdos de Madrid fue dividido: Marruecos se quedó con el norte y Mauritania con el sur.  

Durante la administración en el sur del Sáhara, el Gobierno mauritano sufrió ataques del Frente Polisario y firmó un acuerdo de paz con el Frente, renunciando a su reclamación territorial en el Sáhara el año 1979.  

El presidente de Mauritania, Mohamed Ould Ghazouani, después de emitir su voto en la mesa electoral de Nouakchott, Mauritania - PHOTO/REUTERS

Mauritania y su posición geográfica

De esta manera, Mauritania se encuentra en una situación geopolítica crítica debido a sus relaciones fronterizas, tanto como con Argelia al este y Sáhara marroquí al norte. A pesar de las tensiones, Nuakchot mantiene una posición neutral en este conflicto y es parte de iniciativas que ayudan a fomentar un nuevo clima político y económico en la región, como su participación en el gasoducto que conecta Nigeria con los países de África occidental y Europa.  

Los desafíos geopolíticos y de seguridad a los que se enfrenta el Sahel y la región subsahariana permiten a Mauritania desempeñar un papel activo en el alivio de la creciente crisis política entre Marruecos y Argelia.  

Es por esta razón que las relaciones marroquíes-mauritanas reflejan el consenso de puntos de vista estratégicos, se centran en la integración regional y el desarrollo sostenible, debido a que el desarrollo de las provincias marroquíes del sur son claves para avanzar en la estrategia económica.  

El presidente de Mauritania, Mohamed Ould El-Ghazouani (izq.), y el exsecretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ofrecen una conferencia de prensa después de una reunión en la sede de la Alianza en Bruselas - PHOTO/OLIVIER HOSLET via REUTERS 

La iniciativa autonómica lanzada por Marruecos adopta un enfoque unificado para transformar las provincias del sur en un corredor económico crucial que une África y Europa. La infraestructura moderna, las zonas industriales y la energía renovable destacan el potencial de estas áreas para convertirse en centros globales de inversión y comercio.  

Uno de los planes estratégicos que dan vida a este concepto es el puerto marítimo atlántico de Dajla. Esto representa el fortalecimiento de la conectividad marítima entre África, Europa y América del Sur, lo que estimula los negocios regionales.  

Importancia de las asociaciones mauritanas-marroquíes 

El Gobierno mauritano considera que este proyecto es una oportunidad para fortalecer las relaciones económicas con Marruecos, además de aprovechar el puerto de Dajla para llegar a los mercados internacionales.  

Esta asociación tiene el potencial de promover iniciativas conjuntas que mejoren el papel de ambos Estados como actores clave en el equilibrio del poder regional, ya sea aportando a la seguridad regional o lanzando proyectos que incentiven a la integración africana. 

Además, esto podría servir de modelo de cooperación regional, reforzando la capacidad de los dos Estados y de la región para abordar los desafíos comunes actuales y en un futuro.  

Esta cooperación promueve el desarrollo sostenible en varios campos, incluida la ciberseguridad y las técnicas avanzadas de vigilancia e investigación, lo que permitirá a ambos países fortalecer sus capacidades de defensa y abordar desafíos emergentes. 

Ejercicios militares African Lion 2024 - PHOTO/X/@FAR_Maroc_

La cooperación marítima y militar desarrollará una red más amplia de alianzas regionales que involucren a los Estados del Sahel y África occidental para crear un marco de seguridad unificada. La capacitación conjunta y el intercambio de experiencias equipará a las Fuerzas Armadas de ambos países para gestionar desafíos inesperados.  

Las relaciones marroquíes-mauritanas requieren un marco político flexible y abierto para la realización de la asociación estratégica y sus capacidades. Es importante también que exista un marco económico fuerte, ya que esto permitirá el éxito político sostenible.  

Esta asociación debe tener una visión integral que refuerce el desarrollo mutuo de proyectos financieros y sostenibles clave, como la infraestructura regional para remodelar la situación geopolítica y económica de África del Norte y la región del Magreb para construir un continente más integrado.