Trump insiste en el ataque a las congresistas demócratas

Raúl Redondo

Pie de foto: Imagen de Donald Trump. AFP/NICHOLAS KAMM

Tal y como se apuntó recientemente en Atalayar, Donald Trump ha vuelto a dar muestras de soberbia y ha insistido en la ofensiva verbal contra las cuatro congresistas demócratas con las que mantiene una gran polémica en las últimas fechas. Así, el presidente de Estados Unidos ha señalado recientemente que estas deben disculparse con su país y con Israel por las “cosas horribles que han dicho”.

De esta forma, el cariz del presidente norteamericano, visto por muchos como arrogante, ha vuelto a aflorar, y, lejos de dejar algún esbozo de disculpa por sus anteriores declaraciones tildadas de racistas contra las congresistas, ha vuelto a lanzar una andanada contra las mismas en su medio de comunicación favorito, la red social Twitter. “No creo que las cuatro congresistas sean capaces de amar a nuestro país. Deben disculparse con Estados Unidos (e Israel) por las cosas horribles (llenas de odio) que han dicho”, ha expresado Trump en un reciente ‘tuit’.

La semana pasada, el máximo mandatario republicano criticó duramente a estas legisladoras, que integran el grupo conocido como ‘La brigada’ (‘The squad’), compuesto por la latina Alexandria Ocasio-Cortez, la afroamericana Ayanna Pressley y las musulmanas Ilhan Omar y Rashida Tlaib. Trump indicó sobre estas que “están destruyendo el partido demócrata” y que "son personas débiles e inseguras que nunca pueden destruir a nuestras gran nación".

Dentro de las pasadas afirmaciones que muchos calificaron como racistas, el líder republicano instó a estas políticas a “volver a su país”; cuando las mismas son, a todos los efectos, ciudadanas norteamericanas y representantes legislativas del pueblo americano elegidas democráticamente para esos puestos, aunque tengan otros orígenes familiares. Ocasio-Cortez es nacida en EEUU, pero de origen puertorriqueño, Omar nació en Somalia antes de llegar como refugiada a territorio americano junto a su familia, Tlaib procede de Detroit (Michigan) y sus padres son palestinos y Ayanna Pressley nació en Chicago y es de origen afroamericano.

Estas congresistas ya remarcaron que son ciudadanas norteamericanas con todas las de la ley y denunciaron el corte racistas y supremacistas de las afirmaciones de Trump. La propia Ocasio-Cortez respondió al mandatario también desde su cuenta de Twitter y destacó la labor que llevan a cabo: "Luchamos para garantizar atención médica, universidades públicas y el perdón de los préstamos estudiantiles, protección ambiental, salarios mínimos, derechos humanos básicos”. La legisladora señaló además al presidente por incrementar el precio de los medicamentos y por lastimar a niños inmigrantes, entre otros.

La Cámara de Representantes ya reprobó a Trump por sus palabras en las que exigía a las congresistas “volver a su país” tras acusarlas de “despreciar” a la nación. Por un resultado de 240 votos a favor y 187 en contra, la Cámara Baja del Congreso repudió el ataque dialéctico del presidente norteamericano contra las políticas afectadas. El propio líder del Comité de Supervisión y Reforma de la Cámara Baja, el demócrata Elijah Cummings, habló sobre el asunto de si Trump es racista y aseguró que "no hay duda de eso".

"Cuando no estás de acuerdo con el presidente, de repente eres una mala persona", indicó Cumminngs en una entrevista con la cadena ABC News, y aseguró que en sus 37 años de servicio público nunca había escuchado a un votante decir que le tenían "miedo a su líder".

El mismo Trump ya catalogó como "patriotas increíbles" a los seguidores de la formación republicana que manifestaron cánticos racistas contra la congresista Omar durante un encuentro político republicano en Greenville (Carolina del Norte), quitando así credibilidad a su reciente afirmación de que no estaba "de acuerdo" con esos lemas.

A pesar de haberse desmarcado de los cánticos de "¡envíenla de vuelta (a su país)!" que profirieron sus seguidores durante un mitin, Trump volvió a criticar a Omar y dio nuevos argumentos a quienes creen que su rechazo a los gritos se debió solo a la presión de sus asesores. Preguntado por si desaprobaba los cánticos que se escucharon en el acto de campaña, Trump respondió: "No, ¿saben con lo que estoy descontento? Con el hecho de que una congresista pueda odiar a nuestro país".