El jefe de la diplomacia marroquí expresa ante las cámaras de televisión su afición madridista

Rachid Elalamy
El ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Salahedín Mezuar, es un político centrista y liberal y una persona muy cercana a España. Hombre afable, habla con fluidez el español. Lo que no se sabe tanto del jefe de la diplomacia marroquí es que es un aficionado del Real Madrid. Tanto es así que Mezuar estuvo en la noche del pasado sábado, durante el partido de fútbol entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid con motivo de la Liga de Campeones, en el Estadio da Luz de Lisboa. El ministro marroquí había asistido la víspera en la capital portuguesa al foro empresarial organizado por el grupo Diálogo 5+5, y aprovechó después para asistir al partido. Lo confirmaron fuentes del Ministerio marroquí de Exteriores, pero también las imágenes de televisión que circulan por la red desde hace varios días. Algunas informaciones periodísticas señalaron que el propio ministro reconoció que había asistido al partido. Mezuar vivió con pasión el evento deportivo, y cuando Cristiano Ronaldo marcó el último gol, el ministro se quitó la camiseta y se acercó a un lateral del estadio. Desde este sitio, el canciller marroquí se abrazó con un aficionado merengue. Las cámaras de televisión recogieron este momento ilustre. En ese hervidero de merengues y colchoneros que fue el estadio lisboeta durante 120 minutos, el jefe de la diplomacia marroquí demostró que es un ser humano como los demás. Ni más ni menos. Situado en primera fila, acompañado de su mujer y con un vaso en la mano y una bufanda de color azul, Mezuar no dejó de sonreir, excepto cuando el Atlético marcó el primer gol del partido. Pero Mezuar fue un hombre muy feliz en la recta final del partido, cuando el Real Madrid se impuso a sus contrincantes y acabó ganándole la partida al equipo colchonero. El ministro es uno de los centenares de miles de madridistas que coexisten en Marruecos con los aficionados del Fútbol Club Barcelona. La mayoría de los aficionados marroquíes son merengues o azulgranas. Los partidos entre el Barça y el Real Madrid son celebrados en las calles de muchas ciudades como Tánger, Tetúan, Nador, Rabat o Casablanca con gritos de alegría, pitidos de claxon, canciones y bufandas como si fueran equipos marroquíes.
Merengues o azulgranas
En Marruecos, hay pasión por el fútbol español. Muchos jóvenes exhiben camisetas del Real Madrid o del Barça y hablan de Leo Messi y Cristiano Ronaldo como si fueran sus vecinos del barrio. Los marroquíes amantes del fútbol lo saben todo de los equipos españoles, aunque no hablen la lengua de Cervantes. En las calles y mercadillos se venden camisetas y pósteres futbolísticos españoles. La primera o la segunda pregunta que hacen muchos marroquíes cuando se encuentran con un turista o residente español en el país norteafricano es: “¿Madrid o Barcelona? Algunas cafeterías se han convertido en lugares emblemáticos donde se reúnen madridistas y barcelonistas para presenciar los partidos entre los dos grandes equipos españoles. A la mayoría de los marroquíes, le gustan más el Real Madrid y el Barça que el FAR de Rabat, el Raja Casablanca o el Mogreb Atlético Tetuán. La Liga española es sujeto de acalorada discusiones y algunas disputas y en muchos zocos es frecuente encontrar tiendas con réplicas de camisetas de equipos de fútbol españoles, pero también llaveros, muñequeras y pulseras.