Atrás quedó el dominio español en la Liga de Campeones

Multichampions: El Real Madrid gana queriendo y el Barça gana sin querer

REUTERS/MURAD SEZER - Toni Kroos del Real Madrid marca su primer gol, en el partido de liga de campeones el 22 de octubre de 2019

La Champions ha vuelto para enseñar a los equipos españoles lo que vale un título. Atrás quedaron los años de dominio azulgrana con Guardiola o los de las finales madrileñas entre el Real Madrid y el Atlético. Los que ganaron lo hicieron con mucho esfuerzo y al Valencia se le escaparon tres puntos en el 94. 

#RealMadrid
Los blancos necesitaban ganar al Galatasaray. Entre rumores de despidos y el regreso de Mourinho, los (demasiado) habituales de Zidane enfriaron la pasión turca con un gol de Kross. Lo que hace años eran goleadas a la luz del Bósforo, ahora son partidos dramáticos en los que Courtois se viste de santo. 

#Barça
Valverde tiene un problema con Griezmann. Y con Ansu Fati. Y con Dembelé. Los típicos problemas que todos los entrenadores quieren tener. Lo que pasa es que esos entrenadores no tienen como objetivo ganar la Champions a más a más. Con Ter Stegen en la portería y Messi merodeando por el área rival, el resto son buena compañía que deben saber exactamente su rol y no interpretar otro. Cuando la máquina azulgrana empiece a funcionar pocos títulos se les podrán resistir. Hasta los exóticos como la Supercopa de Catar y el Mundial de Clubes de China. La victoria en Praga fue incómoda pero se ganó y estas victorias son las que se agradecen en marzo. 

El jugador del SK Slavia Praga Peter Olayinka, después de marcar un gol en propia meta y el segundo de Barcelona

#Atlético
Estrenar un estadio para pitar al entrenador que te ha vuelto a poner en el mapa no es buena idea. Animo a los atléticos a ver partidos de la era pre Simeone para valorar incluso el sopor con el que ahora empatan derbis o juegan finales en Europa. El estilo de Simeone ha ido variando con los años, adaptándose a su plantilla. Esta temporada toca jugar feo, marcar poco, encajar menos y quién sabe si llegar lejos en Europa y en la Liga. Morata ya baila al son del Cholo, su desamparado gol frente al Leverkusen le termina de meter en la piel atlética. 

Álvaro Morata del Atlético de Madrid marca su primer gol en el partido de Liga de Campeones entre el Atlético Madrid y el  Bayer Leverkusen

#Valencia
El club ché siempre vive en fallas. La jornada de Champions les ha dejado un empate justo en un momento injusto. Cuando han olvidado a Marcelino y el plan de Celades empieza a funcionar llegan las lesiones inoportunas. Rodrigo forzó por España y se lesionó entrenando con el Valencia. Los partidos de selecciones durante la temporada tienen los días contados si el fútbol se sigue superprofesionalizando. Mestalla no puede ser problema para ganar al Lille. Luego el majestuoso Ajax que enamora a Europa y el reinventado Chelsea que no da tanto miedo. 

Denis Cheryshev celebra el primer gol de su equipo durante el partido de fútbol del grupo H de la Liga de Campeones entre Lille y Valencia en el estadio Stade Pierre Mauroy

#British
¿Será el año del City de Guardiola? Mientras él no se ponga como objetivo ganar esa competición los jugadores seguirán instalados en competir lo justo. Ya no valen las goleadas en Champions como la última frente al Atalanta. No engañan al aficionado que sabe que en los cruces es cuando tiene que aparecer el equipo… y su entrenador. 

El entrenador del Manchester City Pep Guardiola

Parece que volverá a ser el año del Liverpool. El listón lo tiene alto pero es el Real Madrid el que marca el récord de tres títulos europeos seguidos. Los de Klopp han mecanizado su juego hasta cuando duermen. Y Chamberlain puede dormir tranquilo con goles así.

Neymar jugador del PSG

#Neymar
Dijo Emery cuando el Real Madrid eliminó a su PSG en 2017 que esa derrota era una forma de crecer. Al año siguiente fue un Manchester United ramplón el que fulminó a los parisinos. Esta temporada siguen las goleadas y el paso militar en la Ligue 1 pero en caso de duda siempre nos quedará un PSG que ha devuelto a Di Maria a su máximo nivel. El que un día se “acomodó” en pleno Santiago Bernabéu y acabó saliendo por la puerta de atrás ha tomado el relevo a un Neymar perdido y a un Mbappe en proceso. Aprenden de las derrotas hasta que aprenden a ganar.