Obama promete destruir al Daesh pero no enviará tropas a Siria

P.Z. / Agencias

Pie de foto: Obama sostiene que el terrorismo ha entrado en una "nueva fase" pero que EEUU lo derrotará

El presidente de EEUU, Barack Obama, garantizó este domingo que Estados Unidos "destruirá" al grupo terrorista Daesh, en un mensaje a la nación cuatro días después de un ataque armado en California. Definió el atentado, que dejó 14 muertos en un centro asistencial de Bernardino, como un "acto de terrorismo". Durante los años que ha gobernado solo se ha dirigido tres veces a la nación desde el despacho Oval. "El riesgo del terrorismo es real, pero nosotros venceremos. Vamos a destruir al Daesh y cualquier otra organización que quiera hacernos daño", aseguró el mandatario en su alocución desde la Casa Blanca, que duró poco más de un cuarto de hora. Durante los años que ha gobernado solo se ha dirigido tres veces a la nación desde el despacho Oval.

Esa victoria sobre grupos armados radicales, dijo el presidente, no se logrará "con palabras duras, o abandonando nuestros valores, o cediendo al miedo", sino que será posible "siendo fuertes e inteligentes, resistentes y persistentes".

Estados Unidos aumentó su participación en la "campaña militar" contra el Daesh en Siria e Irak, y continuará proporcionando entrenamiento y equipos a "decenas de miles de fuerzas" que enfrentan al grupo radical en esos dos países.

"No seremos arrastrados a una guerra terrestre"

Sin embargo, adelantó el presidente, Estados Unidos "no será arrastrado nuevamente a una guerra terrestre larga y costosa en Irak o Siria. Eso es lo que el EI quiere".

El miércoles, el estadounidense Syed Farook y su esposa Tashfeen Malik, de origen paquistaní, atacaron un centro para discapacitados en San Bernardino dejando 14 muertos y 21 heridos. Ambos fueron abatidos después en un enfrentamiento con la policía, en el peor incidente de este tipo en los últimos tres años en Estados Unidos.

Este domingo, Obama dijo a los estadounidenses que "no hay evidencias" de que Farook y Malik hayan actuado según instrucciones de "una organización terrorista" o que hayan sido parte de una conspiración mayor. Sin embargo, no titubeó en afirmar que se trató de "un acto de terrorismo, diseñado para matar personas inocentes".

De acuerdo con Obama, Farook y Malik iniciaron "el oscuro camino de la radicalización" y abrazaron una "interpretación pervertida del Islam que clama por la guerra contra Estados Unidos y Occidente". Malik habría expresado su lealtad al grupo Daesh, según una cuenta de Facebook que es investigada por las autoridades. Dado el arsenal, los miles de municiones y explosivos en poder del matrimonio, las autoridades no descartan que se estuvieran preparando para otro ataque.

Obama dejó claro que la seguridad de los estadounidenses requiere no solo perseguir terroristas en otros países sino también acciones internas, especialmente dos: mantener a las comunidades musulmanas alejadas de la radicalización, y endurecer los controles de acceso a las armas. "Es necesario hacer que sea más difícil comprar armas de asalto como las que fueron usadas en San Bernardino. (...) Sé que hay quienes rechazan medidas de seguridad sobre armas. (...) Pero lo que debemos hacer es lograr que sea más difícil matar", expresó.

Apuntó que el Congreso debería actuar para evitar que una persona a la que no le es permitido tomar un avión pueda comprar un arma. "¿Cuál podría ser la justificación para permitir que un sospechoso de terrorismo compre un arma semiautomática? Esto es una cuestión de seguridad nacional".

El Daesh no representa la totalidad del islam

Obama también expresó enfáticamente que el Daesh no representa la totalidad del Islam, y dijo que las comunidades musulmanas podrían ser la barrera más eficiente contra el radicalismo.

Para Obama, si Estados Unidos pretende tener éxito en la "derrota del terrorismo, debemos atraer a las comunidades musulmanas como uno de nuestros aliados más fuertes, en vez de empujarlas lejos a través de la sospecha y el odio".

Añadió que las "ideologías extremistas" constituyen "un problema real que los musulmanes deben enfrentar sin excusas". Los líderes musulmanes deben unirse a los esfuerzos para "rechazar inequívocamente una ideología odiosa" promovida por grupos como el EI o la red Al Qaeda. Pero si la responsabilidad de los musulmanes es poner un freno a la radicalización, dijo Obama, "la responsabilidad de los estadounidenses -de todas las confesiones- es rechazar la discriminación".

De acuerdo con Obama, hay musulmanes estadounidenses que son "nuestros amigos y vecinos, nuestros compañeros de trabajo y nuestros ídolos deportivos", además de "hombres y mujeres que visten el uniforme y están dispuestos a morir en defensa de nuestro país".

La atacante de California, una chica "normal que cambió de manera drástica"

Tashfeen Malik junto a su marido asesinó a 14 personas en un centro para personas discapacitadas en California hace una semana. Ambos habrían escondido en su vivienda un arsenal de armas y explosivos caseros suficientes para realizar un ataque.

Pie de foto: Tashfeen Malik autora de la masacre de California

"Era un curso de dos años pero no lo terminó. Era una buena chica. No sé por qué se fue ni qué le pasó", afirmaba una de las profesoras de Malik, la atacante de la masacre de California. Tashfeen Malik, de 29 años, estudió en el instituto Al-Huda de la ciudad de Multán, que acoge a mujeres de clase media que quieren acercarse al islam, indicó la profesora, que se identificó como Muqadas.

Aunque el instituto, que tiene oficinas en Estados Unidos, India, Emiratos Árabes Unidos y Reino Unido, no tiene relaciones conocidas con grupos extremistas, ha sido acusado de difundir una ideología cercana a la de los talibanes. Un responsable de Al-Huda no quiso confirmar ni desmentir la información. "En todo caso no tenemos nada que ver con eso (el tiroteo) y no somos responsables de nuestros estudiantes", aseguró.

Malik y su marido Syed Farook, de 28 años, provocaron una masacre en un centro social de San Bernardino (California) el pasado miércoles, un ataque reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico. Según la policía, Malik, que tenía un visado para residir en Estados Unidos, pero pasó largos periodos en Pakistán y Arabia Saudí, podría haber radicalizado a su marido. Los investigadores están intentado determinar si tuvo contactos con islamistas radicales en algunos de esos países.

Malik estudió en la universidad Bahauddin Zakariya de Multán entre 2007 y 2013 y según sus antiguos compañeros fue en esa época cuando acudía al instituto Al-Huda al terminar las clases. "Poco a poco se fue volviendo más seria y estricta", dijo un estudiante que no quiso identificarse y aseguró que "cambió drásticamente".

Las autoridades de Pakistán han prometido actuar contra las escuelas religiosas sospechosas de difundir el islam radical pero sus intentos han chocado con líderes religiosos que les acusan de atacar el islam.

Farook, el asesino de California era seguidor del Daesh y estaba obsesionado con Israel

"Decía estar de acuerdo con la ideología de Abu Bakr Al Baghdadi para crear el Daesh y también estaba obsesionado con Israel", dijo el padre del agresor al diario La Stampa. Durante la matanza estuvo acompañado de su mujer de 29 años, Tashfeen Malik, con quien se casó en Arabia Saudita.

Syed Farook, estadounidense de origen paquistaní, autor junto a su mujer de la matanza de San Bernardino (este de California), "aprobaba la ideología del jefe del grupo yihadista Daesh y estaba obsesionado con Israel", declaró su padre a un diario italiano.

Su padre le intentaba calmar diciendo que Israel iba a desaparecer

"Siempre le decía: cálmate, sé paciente, dentro de dos años Israel no existirá más. La geopolítica cambia, Rusia, China,inclusive Estados Unidos ya no quieren más judíos de allí. Los llevarán a Ucrania. ¿De qué sirve combatir? Ya lo hicimos y perdimos (...) pero él no quería escuchar. Estaba obsesionado" con la idea de combatir a Israel, comenta.

"Un buen musulmán solo puede ver bailar a su mujer"

Llegado a Estados Unidos en 1973 desde Pakistán, el padre, también llamado Syed, de 67 años de edad, destacó que su hijo "siendo aún adolescente, no iba a las fiestas con sus compañeros porque, decía, un buen musulmán solamente puede ver bailar a su mujer".

Dice haberlo visto una vez con una pistola y que montó en cólera contra su hijo. No obstante, asegura que "no sabe" si estaba en contacto con yihadistas.

Syed Farook era estadounidense y tenía 28 años, un empleado de los servicios de salud de la ciudad californiana y ferviente musulmán. Durante la matanza estuvo acompañado de su mujer de 29 años, Tashfeen Malik, con quien se casó en Arabia Saudita. Ella también era de fe musulmana.

Éstos, tras matar a 14 personas y herir a otras 21 durante la fiesta que organizaba su empresa en San Bernardino por las fiestas navideñas, posteriormente fueron abatidos por la policía. Eran padres de un bebé de apenas 6 meses.