La demanda interna de Marruecos creció un 5,4 % en el cuarto trimestre de 2024

La economía marroquí experimentó un crecimiento del 5,4 % en su demanda interna durante el cuarto trimestre de 2024, contribuyendo con un 6,2 % al crecimiento económico general según la última actualización de la Alta Comisión de Planificación (HCP).
Los hogares fueron un punto clave ya que, gracias al consumo de estos, se registró un aumento anual del 3,2 % que permitió añadir dos puntos al crecimiento del PIB. Aunque los ingresos rurales cayeron debido a la sequía, otros factores se encargaron de mantener el poder adquisitivo de los hogares.
Entre estos factores destacaron la estabilidad general de los precios, los salarios más altos para los trabajadores del sector público, los programas de apoyo social y el acceso renovado al crédito de consumo.
En los hogares, el mayor consumo fue la demanda de bienes terminados, en especial vehículos, lo que llevó a que las importaciones del mercado automovilístico aumentaran un 58,1 % a finales de año.

Sector privado y público
El gasto público también aumentó durante el período y tuvo un crecimiento del 3,9 % en el consumo gubernamental, un 0,1 % más que lo registrado en el mismo trimestre de 2024. Este aumento se debe en su mayoría, al gasto en operaciones administrativas.
El crecimiento del sector público fue impulsado por proyectos de infraestructura, en los que se incluyen el desarrollo de recursos hídricos y los preparativos de la Copa Africana de Naciones de este año y la Copa del Mundo de fútbol, que está programada para 2030.
A diferencia del gasto público, el sector privado se ajustó a una actividad exportadora más lenta, pero igualmente contribuyó a la expansión general. Aunque el ahorro privado tuvo una leve mejora, el ritmo de crecimiento de la inversión superó estas ganancias, lo que generó un mayor déficit presupuestario y un aumento de la deuda corporativa.
La inversión bruta creció un 9,8 % en comparación al año anterior, sumando 3,5 puntos porcentuales al crecimiento económico. Esto estuvo respaldado por un aumento de la inversión extranjera directa y las importaciones de equipos industriales.

Es probable que las empresas privadas reduzcan sus actividades de inversión debido al bajo crecimiento de la demanda externa y el aumento de los costos salariales, mientras que la inversión pública en infraestructura, eventos deportivos y proyectos de desalinización de agua seguirá siendo fuerte. De esta manera, la HCP proyecta que la inversión bruta crecerá un 8,8 % en el primer trimestre de 2025.
Respecto a lo anterior, las mayores necesidades de financiamiento externo, impulsadas por el crecimiento de la demanda interna, representaron el 3,8 % del PIB en el tercer trimestre de 2024.
Este aumento depende del sector agrícola, ya que se espera que exista un retorno de las precipitaciones a niveles estacionales casi normales durante el invierno. Y, por otro lado, la HCP prevé que las actividades no agrícolas mantengan un crecimiento por sobre la tendencia, con tasas de 3,7 y 3,5% que se estiman para el último trimestre de 2024 y el primero de 2025, respectivamente.
Desafíos económicos para 2025
Marruecos cuenta con desafíos económicos significativos que están relacionados con su dependencia del sector agrícola y la vulnerabilidad climática. Además, el desempleo juvenil y la desigualdad económica también son un punto importante para la economía del país.
La agricultura representa aproximadamente el 15 % del PIB del país y, en los últimos años, debido a la sequía, se ha visto perjudicada la producción agrícola. Por esta razón y para apaciguar la vulnerabilidad, Marruecos ha implementado una política nacional sobre el cambio climático.
Otro de los desafíos es el desempleo juvenil (15-24 años) ya que, en el segundo trimestre de 2024, la tasa alcanzó el 48,8 %, lo que significó un 2,7 % más que en el mismo periodo del año anterior. Por esta razón, el Gobierno marroquí ha presentado planes de empleo destinados a superar esta crisis y en ellos busca mejorar la inclusión económica y fomentar la creación de empleo.

Además, Marruecos está abordando la desigualdad salarial mediante un aumento del 5 % en el salario mínimo del sector privado que comenzó el 1 de enero de este año, lo que se aplicará tanto a las actividades agrícolas como no agrícolas.
Se espera que la demanda interna de Marruecos mantenga su trayectoria positiva en el primer trimestre de 2025 y que sea apoyada por una política monetaria más flexible y la implementación de medidas fiscales y sociales para fortalecer el poder adquisitivo de los hogares. Además, se proyecta que el crecimiento anual alcance el 4,8 %, lo que equivale a un punto más que durante el mismo período del año anterior.