Ante los rumores de que la mezquita de Argel abrirá el próximo viernes y para evitar que miles de fieles visiten este lugar de culto, cuyo inexplicable cierre alimenta la crónica diaria de los argelinos, la dirección del establecimiento ha emitido un comunicado en el que torpemente justifica el cierre de la mezquita.
Mientras que debía ser inaugurada por el presidente de la República, el difunto Abdelaziz Bouteflika en abril de 2019 en pleno "hirak" que puso en entredicho su 5º mandato, la nueva mezquita de Argel (la 3ª del mundo) que tanto había dado que hablar desde el lanzamiento de sus obras en 2011, permanece cerrada al público. Por mezquita, entendemos no sólo la sala de oración, sino también sus instalaciones auxiliares, como la biblioteca, el museo, la sala de conferencias, el hotel, etc., que ocupan una superficie de 20 hectáreas.
Ayer, la dirección de la mezquita emitió un comunicado, recogido por el diario árabe "Echourouq", en el que explicaba el cierre de los locales para las oraciones del viernes y de la tarde por "reservas técnicas". Una explicación que exige otras. ¿Cómo explicar si no estas reservas técnicas? ¿Significa esto que hay defectos que deben corregirse? Si es así, ¿es grave que un edificio cuya construcción fue seguida con gran atención por las más altas autoridades, en particular el ministro de Vivienda y Urbanismo, que no era otro que el actual presidente de la República Abdelmadjid Tebboune? En consecuencia, la responsabilidad del último nombrado está comprometida y debe, como muchos de sus homólogos, responder por este incumplimiento de sus deberes ante la ley.
Así, la declaración de la dirección de la mezquita viene a dejar en mal lugar al actual jefe del Estado que debía inaugurar la sala de oración en octubre de 2020. Una inauguración llevada a cabo por su entonces primer ministro Abdelaziz Djerrad. Una inauguración que en realidad es una puesta en escena que no tenía por qué serlo. No se inaugura una instalación que está sujeta a reservas técnicas y que se abrirá parcialmente.
Otra torpe declaración de la dirección de la mezquita justifica el cierre por "reservas técnicas" para las oraciones del viernes y de la tarde, pero no para las otras cuatro oraciones del día. Se trata de una rareza que sólo la dirección argelina puede explicar a su manera.
En realidad, el comunicado de prensa de la mezquita no aportaba nada nuevo en la medida en que anunciaba "la próxima apertura de la mezquita en cuanto se levanten las reservas técnicas". ¿Cuándo? No se especifica en el texto. Esperemos a ver.
