España continuará en el Consejo Ejecutivo de la UNESCO hasta 2019

The Diplomat

España seguirá siendo miembro del Consejo Ejecutivo de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) los próximos cuatro años, después de haber sido reelegida en las elecciones del órgano que tuvieron lugar el pasado miércoles en París durante la Conferencia General.

La presencia española en el órgano ejecutivo de la UNESCO comenzó en 2007 y después de dos períodos, 164 de los 186 miembros de la organización que participaron en la votación respaldaron, durante la XXXVIII Conferencia General, la decisión de que continúe en el mismo para el próximo, de 2015 a 2019.

Si bien son ocho años los que España ha sido miembro del Consejo Ejecutivo, el país forma parte de la organización desde 1953. Según indicó el ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación en un comunicado, España ha alcanzado recientemente “niveles históricos de presencia y relevancia” en la UNESCO, aumentado significativamente no sólo su implicación a nivel institucional, sino también su aportación económica. De hecho, España es uno de los 10 principales contribuyentes al presupuesto ordinario de la organización y, en palabras de Exteriores, un “importante colaborador” en materia de aportación extrapresupuestaria.

Durante sus próximos cuatro años en el Consejo General, España seguirá trabajando no sólo por la consolidación de la paz, la erradicación de la pobreza o el diálogo intercultural a través de la educación, la ciencia, la cultura, la comunicación y la información, sino que también luchará para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible recién adoptados por parte de la Asamblea General de la ONU, para los que la investigación será crucial, tanto como “factor de aceleración del desarrollo económico” como “elemento determinante en la construcción de sociedades más sostenibles”, tal y como indicó la directora general de la UNESCO, Irina Bokova, durante la conferencia.

Además, durante la conferencia, que durará hasta el 18 de noviembre, se tomaron otras decisiones, como la de no incluir a Kosovo en la organización, que se quedó fuera por tres votos, entre ellos el español. España es uno de los cinco países europeos —junto a Grecia, Rumanía, Chipre y Eslovaquia— que no lo reconocen como país después de su declaración unilateral de independencia de Serbia en 2008.