Opinión

Intermediarios oportunistas

photo_camera Recep Tayyip Erdogan

El guion de la crisis de Ucrania se va cumpliendo de acuerdo a los intereses de ambas partes que apuntan a ganar una pugna mediática y pública, con un relato lo más acorde con sus intereses y objetivos, pero siempre manteniendo abierto el canal de comunicación y negociación directa entre los responsables de la diplomacia rusa y norteamericana o indirecta con la participación de otros líderes políticos europeos como el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el nuevo canciller alemán, Olaf Scholz. 

Además, un intermediario más o menos imprevisto, se ha colado de rondón, haciendo gala de un oportunismo a prueba de todo, como es el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan. En estos casos de río revuelto, ganancia de pescadores, no hay nada que descartar siempre que la ambición de Erdogan de quedar bien con las dos partes le coloque al final enfrentado con todos. 

Es curiosa su situación: internamente los turcos sufren una crisis económica muy aguda con una política errática que ha hundido la lira y el empleo, con malas perspectivas de renovar mandato en las elecciones del año que viene, pero con una política exterior agresiva y contradictoria: tan pronto está bien con el presidente ruso Vladimir Putin y le compra misiles antiaéreos S-400 creando un enorme malestar en el seno de la OTAN como que ahora se plante en Kiev, y diga que Ucrania tiene pleno derecho a su libertad para decidir su futuro, enfrentándose a Putin, pero haciendo valer su relación con Moscú para interpretar el papel de intermediario. 

Veremos cómo se desarrolla la crisis donde este tipo de actuaciones son utilizadas según las necesidades de cada uno que modulan sus declaraciones según interese tensar o desescalar el ambiente.  Mientras tanto Washington se reivindica en su anterior papel de guardia del orden mundial u aprovecha la ocasión para asestar un golpe mortal a la banda terrorista del Daesh en Siria. Joe Biden explicó que el jefe terrorista sucesor de Al-Baghdadi, se suicidó antes de ser detenido por el comando especial de los Seals.

Los terroristas juegan con la vida de los demás, incluida la de sus familiares, la de sus niños para utilizarlo después como propaganda. Y frente a esta violencia, esta tensión, se celebraba el Día Internacional de la Fraternidad Humana por la paz mundial y la convivencia según reza el documento firmado por el papa Francisco y el gran Imán de Al-Azhar en El Cairo. En Madrid, la FICRT (Fundación for Islamic Culture and Religious Tolerance) organizó un interesante debate sobre la fraternidad humana y la diplomacia de las religiones, con participación de prestigiosos representantes de las tres religiones. Un ejemplo de que la diplomacia y la solución pacífica de los conflictos es muy posible.