“Vocablos españoles en la lengua del norte de Marruecos”

Con el motivo de celebrar el poder de la palabra, la cultura como nexo milenario y herramienta imprescindible para construir una sociedad más justa, la Fundación Ibn Battuta, con el apoyo del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones de España, y en colaboración con la Embajada del Reino de Marruecos y el Consulado General en Madrid, organizó la feria “Dos orillas, una lengua”.

Este evento tuvo como eje la presentación del libro “Vocablos españoles en la lengua del norte de Marruecos” de Mohamed Nouri, una obra que no solo representa un valioso estudio lingüístico y cultural, sino que también constituye un testimonio vivo de los lazos históricos, humanos y simbólicos entre España y Marruecos. En sus páginas se recoge cómo, a través de la lengua, se entrelazan las historias cotidianas de generaciones enteras que han convivido y compartido espacio, cultura, esfuerzo y futuro en ambas orillas del Estrecho.
Mohamed Nouri, además de ser escritor es doctor en nutrición, investigador en el Instituto de la Paz y los Conflictos de la Universidad de Granada, presidente de la Asociación de Diplomados Marroquíes en España y columnista habitual en medios como Atalayar o Hespress.

En palabras del director de la Fundación Ibn Battuta, Aziz Allaouzi, “hablar de vocablos compartidos es hablar de préstamos, de adaptaciones, de encuentros. Es constatar que el idioma, lejos de ser una frontera, es un espacio de fusión y diálogo. Esta obra permite reflexionar sobre cómo las palabras se trasladan, mutan, se acomodan en nuevas realidades, pero también conservan la huella del contacto humano que las ha hecho posibles”.
En el actual contexto social, marcado por la polarización, los discursos de odio y la estigmatización del otro, encuentros como este nos recuerdan que hay un legado común que merece ser recuperado y puesto en valor.

La lengua es un espejo que refleja historias compartidas, afectos recíprocos y una convivencia cotidiana que a menudo queda invisibilizada por las narrativas de división. Esta jornada pretende ser un espacio de celebración y afirmación de esa convivencia intercultural, mostrando que los lazos entre las dos orillas del Mediterráneo no solo son posibles, sino necesarios.
“Dos orillas, una lengua” no fue solo una presentación literaria, sino una afirmación colectiva de que lo que nos une es más fuerte que lo que nos separa. Y que en cada palabra compartida late una oportunidad para el encuentro, el entendimiento mutuo y la construcción de una ciudadanía plural, crítica y solidaria.

Durante la presentación destacó la presencia del Kamal Arrifi, Cónsul General del Reino de Marruecos en Madrid, y con el ministro consejero de la Embajada de Marruecos en España. Finalmente, Atalayar pudo conversar con el exitoso escritor marroquí, Mohamed Nouri.
Profesor Nouri, este libro, ¿qué objetivo tiene usted y en qué consiste?
El profesor Mohamed Nouri es presidente de la Asociación de Diplomados Marroquíes en España y autor de este libro, Vocablos Españoles en el habla del Norte de Marruecos.
Se trata de dos libros. Uno que recoge las palabras de origen español que se usan en el diálogo del norte de Marruecos y otro más grande que recoge, además de estas palabras, recoge y acopia muchas expresiones, muchos juegos infantiles, muchos hipónimos.
En cuanto al objetivo, se trata de demostrar cuán similitud tenemos españoles y marroquíes. Festejar, celebrar este legado lingüístico común y también intentando divulgar esta memoria común, enseñarla a las generaciones de hoy como a las generaciones de mañana para hacer hincapié en este capital, en este recurso fantástico que tenemos la suerte de tener, españoles y marroquíes, y constituir en base a este magnífico patrimonio un futuro mucho más próspero, mucho más acogedor, mucho más pacífico, y mucho más empático, sobre todo.

Doctor Nouri, con respecto a lo sociocultural, estos lazos son, ha dicho usted, incluso más fuertes que los económico-comerciales y políticos.
Sí, sí, si no es más fuerte, por lo menos es igual de importante a las dos dimensiones que usted dijo, es decir, la geopolítica y la geoeconómica. Creo que es el trazo de una memoria compartida y la memoria, como decía John Richter, es el único paraíso donde no podemos ser expulsados. Entonces, es un legado que llevamos, que llevamos varios milenios construyendo y ojalá que fuera la base, la piedra angular, de este futuro que anhelamos todos.
¿Cuántas palabras ha recogido usted? Porque durante la presentación ha hecho toda una serie de ejemplos, tanto en el vocabulario español como en el vocabulario marroquí. Es una autovía de ida y vuelta en los dos sentidos.
Yo he intentado en la presentación he empezado por un poco destacar la influencia del árabe en el español, del árabe y del bereber marroquí en el español. Y para pasar a la segunda parte, digamos, a magnificar un poco esa influencia del español en el dialecto, en el habla de Marruecos en general y del norte de Marruecos en particular. La idea es muy sencilla, pero a la vez muy profunda.
Es decir, que estamos hablando de dos caras de la misma manera. Estamos hablando de una influencia mutua, de un vaivén, de un proceso en los dos sentidos que ha hecho cuajar este magnífico legado lingüístico-cultural que tenemos y que tenemos que amparar y que tenemos que promover y divulgar a cuanta más escala, mejor. En este caso, en cuanto al número de palabras, estamos hablando en el libro chiquitito de unas 1.600 palabras; de 2.800 palabras o 2.750 en el segundo; y hay un tomo tercero que viene dentro de poco. En total estamos hablando de más de 6.000 palabras

Mohamed Nouri, escritor del libro "Vocablos españoles en la lengua del norte de Marruecos", durante la presentación de éste en la sede de la Fundación Ibn Battuta - PHOTO/ATALAYAR
En este caso, doctor Nuri, la información, el conocernos mejor es lo que nos puede permitir mejorar nuestra convivencia, mejorar nuestras relaciones y la cultura es algo esencial como usted demuestra.
Totalmente de acuerdo. Lo cultural se construye a largo plazo, lo económico se construye a corto y medio plazo, máximo. Pero lo cultural se crea en el pasado para proyectarse en el futuro y tenemos que ir y amparar y perseverar en ese sentido entre todos.
Entre todos marroquíes y españoles que son conscientes de que nuestros dos países están condenados a entenderse, condenados a colaborar, condenados a crear esta interdependencia cultural, sociológica, económica, de investigación. Tenemos un destino común y esa interdependencia es lo que nos va a permitir pasar de lo cultural a inscribirse en unas relaciones mucho más sostenibles en la tierra.