Daniel Abascal
Pie de foto: Estudio sobre Comercio Mundial Euler Hermes.
Euler Hermes prevé que el comercio internacional nominal crecerá solo un 1,8% este año y un 4,5% en 2016, una nimiedad si se compara con la expansión del comercio mundial del 12% que se alcanzó anualmente entre 2001 y 2008.
Una mezcla preocupante de estancamiento del crecimiento económico, presiones de precio anémicas y un exceso de capacidad continuado, hacen que las previsiones inmediatas sobre el comercio mundial sean moderadas en el mejor de los casos, según un nuevo informe (“Global trade: What’scooking?”) de Euler Hermes, líder mundial en seguro de crédito.
A propósito de las tres principales razones que han llevado a esta prolongada ralentización del comercio, WilfriedVerstraete, Presidente de Euler Hermes, comenta: “En primer lugar, están los programas de austeridad que han reducido el gasto público, que históricamente había sido un importante componente del crecimiento. En segundo lugar, los volúmenes de importaciones y exportaciones en el mundo han descendido, y debido a su naturaleza interconectada, el impacto en las cadenas de suministro es exponencial, lo que a su vez debilita el crecimiento y el comercio mundiales. Por último y más importante, el crecimiento del consumo privado y la inversión, los principales ingredientes para la expansión comercial, es como mucho moderado. Por tanto, el comercio mundial ha dejado de comandar el PIB mundial para pasar a acompañarlo”.
Euler Hermes prevé que el comercio internacional nominal crecerá solo un 1,8% este año y un 4,5% en 2016, una nimiedad si se compara con la expansión del comercio mundial del 12% que se alcanzó anualmente entre 2001 y 2008. El informe anticipa que una mayor presión negativa sobre los precios resultaría en una pérdida de 560.000 millones de dólares en el comercio nominal de 2015, mientras que la recuperación del mercado mundial de bienes y servicio continúa luchando siete años después del inicio de la crisis. El riesgo del nacimiento de un círculo vicioso continúa siendo muy real: las presiones deflacionistas se intensifican y los márgenes operativos se reducen hasta el punto de que los precios del consumo son tan bajos, que las compañías tienen que hacer enormes esfuerzos para mantener la rentabilidad.
Como resultado, los países tienen un apetito creciente de impulsar su demanda doméstica a través de un enfoque más interno, mientras, en paralelo, están tratando de estimular las exportaciones. Esto corre el riesgo de acabar en un mayor proteccionismo en forma de guerra de divisas, controles tarifarios y otras medidas restrictivas del comercio.
“Es vital que los exportadores estén atentos a las tres “Pes” del riesgo exportador: precios, proteccionismo e impago”, destaca LudovicSubran, Economista Jefe de Euler Hermes. “Para ello hay que tener en cuenta la competencia de precios mundial, el proteccionismo en los países y el riesgo de impago de los clientes, para alcanzar el éxito en la expansión internacional”.
El informe muestra una estructura que divide a los países por su demanda de importaciones prevista en 2015-2016 y niveles de riesgo asociados, para ayudar a identificar oportunidades y peligros potenciales
Este informe subraya la evidencia de que los impagos de empresas serán un asunto mayor. El periodo medio de cobro mundial está aumentando. Durante este periodo de espera, los proveedores financian a sus clientes, lo que genera una carga adicional en su flujo de caja.
Se espera que Asia se la ganadora en la exportación, con 221.000 millones de dólares en exportaciones netas adiciones en 2015. A nivel mundial, China desbancará a Estados Unidos como el mayor ganador, seguido de Alemania, Japón y Corea del Sur. Los rezagados en las exportaciones son Brasil y Chile, debido a la caída del precio de las materias primas; por su parte, Portugal y Hungría están impactados por la falta de competitividad. Euler Hermes sugiere doce recetas para facilitar a los países el impulso de sus exportaciones con la ayuda de sus fortalezas únicas, que incluyen:
Francia y su industria farmacéutica.
España, que aumentó su competitividad al disminuir los salarios reales.
El uso exitoso de los tratados de libre comercio por parte de Singapur.
El informe muestra una estructura que divide a los países por su demanda de importaciones prevista en 2015-2016 y niveles de riesgo asociados, para ayudar a identificar oportunidades y peligros potenciales. Euler Hermes destaca aquellos países que tienen tanto un alto crecimiento como un menor riesgo, comparativamente, como Estonia y Corea del Sur, que se encuentran entre las “15 delicatessen”. Se advierte de los riesgos a los exportadores que se aventuran en “mercados ya copados” como Canadá, Suiza y Australia, que parecen seguros pero presentan un crecimiento poco estimulante.
En cuanto a los sectores, el principal perjudicado será el energético, cuyas exportaciones perderán, solo en 2015, 400.000 millones de dólares. Sin embargo, el químico se beneficiará de la recuperación del sector manufacturero y la disminución de los costes energéticos; el sector de la electrónica ganará con la subida de la demanda asiática; y la sólida demanda de bienes de capital en los países industrializados impulsará el sector de la maquinaria.