Marruecos, firme candidato a albergar la sede de Africom en el continente africano
El general Mohamed Berrid representó a Marruecos en la reciente ceremonia de cambio de mando del Africom, reafirmando la candidatura de este país a albergar la sede del comando conjunto en África

La participación de Marruecos en la ceremonia de cambio de mando del Africom, los pasados días 14 y 15 de agosto en Stuttgart (Alemania) ha servicio para reafirmar su candidatura a albergar la sede de Africom en el continente africano, gracias al papel que desempeña en la seguridad colectiva de la región.
Se trata de un evento altamente simbólico, donde el general estadounidense Michael Langley pasó la antorcha al general Dagvin R. M. Anderson, de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, en presencia de altos responsables militares y civiles tanto de EE UU como de África y Europa.
Acompañado por una importante delegación, Mohamed Berrid, jefe del Ejército marroquí, inspector general de las Fuerzas Armadas Reales y comandante de la Zona Sur, representó a Marruecos en Stuttgart, como delegado del Rey Mohamed VI, Jefe Supremo de los Ejércitos.

Con sede en Stuttgart, Africom es uno de los siete comandos conjuntos geográficos con que cuenta el Ejército de los Estados Unidos. Se encarga de todas las operaciones y actividades militares destinadas a proteger y promover los intereses nacionales estadounidenses en el continente africano.
Ventaja competitiva
Casi dos décadas después de que el que fuera presidente de los Estados Unidos, George W. Bush, manifestara su intención de establecer un cuartel general del Africom en África, esa visión se ha convertido, en la actualidad, en una ambición al alcance de la mano.
Marruecos cuenta comuna gran ventaja competitiva para convertirse en esa sede, gracias a su constancia, su modernización acelerada y su apertura estratégica. Como uno de los artífices de esta aventura militar, el país comparte la idea de que no se trata solo de albergar una base militar, sino que es un paso hacia el objetivo de construir una seguridad compartida, basada en la soberanía y la responsabilidad.

Además, juegan a su favor dos factores determinantes para convertirse en la sede del Africom: su posición geoestratégica en la encrucijada entre Europa, África y Oriente Medio; y su infraestructura militar de calidad.
Los criterios del Pentágono, basados en la superioridad logística, la estabilidad política y las alianzas militares confiables, parecen colocar a Marruecos en lo más alto de la lista de candidatos. De hecho, ya se están realizando estudios avanzados para establecer la futura sede del Africom en la base militar de Kenitra, y se barajan otras sedes alternativas en territorio marroquí, como Dajla o Tinduf.
Estabilizador regional
Las autoridades militares estadounidenses tienen claros los criterios de elección, que pasan por la logística, la estabilidad y la fiabilidad de las asociaciones. En este sentido, Marruecos se ha destacado frente a otras posibles opciones como la de la base española de Rota (Cádiz), que parece haber sido descartada por Estados Unidos.
Con su participación en la ceremonia del cambio de mando de Africom, Marruecos está ganando más puntos para su reubicación en la escena internacional, siendo reconocido como un estabilizador regional, una palanca económica con grandes inversiones en las infraestructuras y un cuerpo diplomático dinámico frente a las ambiciones de Moscú y Pekín.
La decisión oficial del Pentágono, que debería anunciarse en los próximos meses, supondrá redibujar de forma duradera el mapa de la presencia militar estadounidense en África.
Aprovechando su presencia en este evento internacional, el general Berrid multiplicó los encuentros bilaterales, reafirmando el compromiso de Marruecos con una cooperación militar amplia y estructurada con Estados Unidos.
Estos encuentros se centraron en la seguridad regional, la lucha contra el terrorismo, la gestión de los flujos migratorios y la modernización de las capacidades africanas para la defensa.
Marruecos tiene una estrategia clara de posicionarse como un socio ineludible para las grandes potencias, en un contexto marcado por el aumento de la presencia rusa y china en el continente africano.

Los ejercicios militares African Lion, coorganizados de manera anual por Rabat y Washington reflejan, en este sentido, la convergencia estratégica entre los ambos países. Este año, por ejemplo, reunieron a más de 10.000 militares de 30 naciones, demostrando una capacidad de coordinación excepcional y una mayor interoperabilidad entre las fuerzas estadounidenses y africanas.
African Lion no se limita a un entrenamiento táctico, sino que representa una palanca diplomática importante para Marruecos, a través de la cual el país norteafricano desempeña el papel de facilitador regional, en favor de una seguridad colectiva.
Seguridad continental
Creado en 2007 por el expresidente George W. Bush, el mando estadounidense para África sigue teniendo su sede en la ciudad alemana de Stuttgart, aunque la llegada de la Administración Trump parece favorecer una reubicación de la sede del Africom en el continente africano, para poner de relieve una presencia americana más visible y legítima en África.
Mientras los Estados Unidos buscan contrarrestar la influencia de sus rivales chinos y rusos, Marruecos aparece como un aliado creíble, fiable y operativo para Washington, poniendo de manifiesto su papel cada vez más relevante en el tablero de las grandes potencias estratégicas mundiales.