La posibilidad de que la Unión Europea y otras naciones, como Japón, apliquen medidas adicionales contra las importaciones de productos energéticos rusos -no solo al carbón- presiona las cotizaciones del gas y el petróleo. Los futuros de gas natural de Estadios Unidos han alcanzado este lunes un nuevo máximo de 13 años y medio al cotizar a más de 7,55 dólares por millón de unidades térmicas británicas.
A las tensiones debidas a la guerra en Ucrania se unen otros factores; como son la disminución de la producción y los diversos problemas operativos en gasoductos, entre ellos los que operan en Nuevo México. Si bien el tema central se focaliza en la preocupación respecto a la recuperación de niveles aceptables en los inventarios de gas en Europa. Tema que, asimismo, se suma al aumento de las exportaciones de Gas Natural Licuado (GNL) por parte de Estados Unidos que alcanzan una cifra histórica. Una muestra es que se ha convertido en el principal suministrador de ese hidrocarburo a España.

Alemania, no obstante, como también Hungría, actúan de freno a la alternativa de ampliar los embargos a Rusia. La opinión de expertos destaca que una reducción drástica de las compras de gas y crudo rusos tendría un impacto muy negativo en el país que dirige Olaf Scholz.
Si Europa de media depende en un 40% del gas ruso, el peso del hidrocarburo que le proporciona Gazprom es casi del 60% en el caso alemán. No obstante, Berlín ha optado por la nacionalización de la filial del gigante ruso en su país. Gazprom Germania controlaba las infraestructuras que almacenan las reservas de gas, lo que se ha considerado como un primer paso para reducir la dependencia de los yacimientos siberianos.

En este contexto, el presidente ruso, Vladimir Putin, ha manifestado que en la actualidad no existe alternativa para el gas de su país ante la posibilidad de que Europa y sus aliados impongan un embargo a esta materia prima. En una reunión sobre la situación en los sectores petrolero y gasístico rusos, también subrayó que reemplazar los recursos energéticos rusos con suministros alternativos afectará a toda la economía global. “Los suministros de otros países, principalmente de Estados Unidos que pueden enviarse a Europa, serán más caros”, añadió.
Mientras, el primer ministro italiano, Mario Draghi, ha declarado que la propuesta de poner un techo al precio del gas está ganando adhesiones en la Unión Europea y se analizará en el próximo Consejo Europeo.