Andrés Manuel López Obrador, presidente del Gobierno mexicano, anunció mediante un comunicado la creación de un “plan anti-inflación” que propone mantener “precios de garantía” para los principales productos de la canasta básica en México.
La tasa interanual de inflación se sitúa actualmente en 7,72%, el valor más alto registrado en México en los últimos 21 años, generando un aumento sostenido y generalizado de los precios de los bienes y servicios. Esta realidad, unida a los salarios insuficientes, impide el acceso a la canasta básica para el 43,9% de la población mexicana, es decir, cerca de 55,7 millones de personas no tienen acceso a una alimentación adecuada.
La propuesta del Gobierno mexicano afectaría a 24 productos básicos de los 82 que componen la canasta básica, entre los que no se encuentran bienes esenciales como el maíz, el frijol, el arroz, y la leche, aunque aseguró que habría acuerdos con los grandes productores.
“Un precio justo, es una contribución de los productores, distribuidores y de las grandes tiendas departamentales que van a ayudar. Estamos definiendo que sean 24 productos básicos para que la gente más humilde no padezca y que tenga garantizado lo básico a un precio justo”, señaló López Obrador.
Como parte del desarrollo del “plan anti-inflación”, el presidente mexicano confirmó la existencia de reuniones convocadas por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público con todos los sectores implicados, con la finalidad de orientar y definir los objetivos a seguir para disminuir los niveles de inflación.

La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) representa a gran diversidad de empresas y está tratando de llegar a acuerdos para evitar las subidas de los productos básicos, pero advirtió que no está dispuesta a aceptar un control de precios, declaró José Medina Mora, presidente nacional del organismo.
“Desde Coparmex y los organismos empresariales, nos manifestamos en contra del control de precios. Cuando un gobierno pone un precio límite, es decir, mete el control de precios, esto distorsiona los mercados y finalmente quien paga las consecuencias es el consumidor”, señaló José Medina Mora.
La disposición al diálogo por parte de las empresas de Coparmex está abierta para llegar a acuerdos en donde cada empresa pueda contener el aumento de precios al consumidor final a costa de un porcentaje de sus utilidades en los productos que afectan la canasta básica.

Dentro del plan anti-inflación, la participación de los pequeños productores es esencial para lograr la autosuficiencia del país en la producción de alimentos básicos como son el maíz y el frijol.
“Exhortar, llamar de manera respetuosa a los campesinos para que se siembre maíz y frijol, lo básico porque la carestía o inflación se enfrenta con el auto consumo, no solo con la producción comercial; si somos autosuficientes en alimentos vamos bien porque no es lo mismo comprar el frijol y el maíz que tenerlo en la casa”, resalto López Obrador.
Los campesinos, según el presidente, han mostrado su apoyo a la solicitud, ante lo que López Obrador propuso la posibilidad de ampliar el programa de fertilizantes gratuitos.
Como está ocurriendo a nivel mundial, la inflación en México se está situando en niveles muy elevados, al igual que Estados Unidos con un 6,2% de inflación a finales de 2021. Sin embargo, su problemática aún está lejos de la hiperinflación que sufren naciones como Venezuela, con 2.700%, Argentina con un 52% o Haití con un 16%.
Coordinador de América: José Antonio Sierra.