Hach Ahmed: “Argelia tiene que hacer caso a las voces saharauis”
A través de una entrevista concedida al periódico Madar 21, el primer secretario del Movimiento Saharauis por la Paz, Hach Ahmed Bericalla, repasó la actualidad del conflicto del Sáhara Occidental, las comunicaciones que mantiene con Staffan De Mistura, el enviado especial de la Secretaría General de Naciones Unidas para el Sáhara Occidental, el papel de Argelia y del Frente Polisario, y sobre como una aceptación firme del Plan de Autonomía de Marruecos para la región promovido por el rey de Marruecos, Mohamed VI, en 2007, puede ser la solución definitiva que no solo proporcione paz y estabilidad, sino que otorgue beneficios en el corto, medio y largo plazo a la región, a Marruecos y a Argelia.
Entre las diversas cuestiones, Hach Ahmed Bericalla, insistió en que Argelia debe cambiar su postura ante la cuestión del Sáhara Occidental. “Es difícil evaluar la posición actual de Argelia y hasta qué punto estaría dispuesta a facilitar la solución política. Si estoy seguro, sin embargo, que las autoridades argelinas no ignoran el momento de extrema debilidad que atraviesa el Polisario, no solo en el plano militar y diplomático sino también en razón a la crisis de confianza”, señaló.
Durante la audiencia Hach Ahmed enfatizó en la importancia de las cartas que comparte con De Mistura, que lo único que buscan es una solución que apoye el alto el fuego en la región, y así evitar la pérdida de vidas humanas. “Somos un Movimiento que, desde su creación en 2020, apuesta por la vía pacífica y cree en el diálogo para dirimir los conflictos y las controversias”. Sin embargo, el primer secretario también mencionó que el papel de la MINURSO debe ser más eficaz para poder lograr los objetivos para los que fue creada.
Por otro lado, Hach Ahmed mencionó que una de las posibles soluciones que debería haber tenido en cuenta De Mistura es haber ampliado las mesas de diálogos e incluir a más actores afectados en un proceso político que se extiende por más de cinco décadas.
“Uno de los principales problemas es que, a estas alturas, por razones y motivos diversos, no todos los saharauis se sienten identificados con las posiciones radicales del Polisario y su proyecto político”, señaló el primer secretario del MSP, con respecto a las consecuencias que ha supuesto esa falta de mesas de diálogo y exigencias a las partes implicadas de establecer contactos que beneficien a las personas que residen en la región, que son las más afectadas.
A raíz de esto, según señaló el primer secretario, los notables tribales, cuyo peso en la sociedad es muy importante, han comenzado a advertir la necesidad de una “tercera vía”: el Movimiento Saharauis por la Paz. Esto se debe principalmente a la alianza con el “diálogo y el rechazo a la vía armada” que han establecido el MSP, los notables tribales saharauis y el Reino de Marruecos. Una tercera vía que es apoyada por políticos norteamericanos como el exasesor del pentágono, Michael Urbin, quienes, entre otras cosas, instaron a la Administración de Donald Trump, que recomiende “al secretario general de la ONU la incorporación del MSP a la futura mesa redonda y al proceso político en manos de De Mistura”.
Tras realizar un repaso histórico del surgimiento de la organización y de cómo esto ha sido posible, Hach Ahmed Bericalla explicó que la solución al conflicto a través de la creación de una República Árabe Saharaui Democrática (RASD) es inviable. “Hoy día, a la mayoría de los saharauis ya no les seduce el proyecto fallido del Polisario, ni siquiera la prometida “RASD” en la que creímos y luchamos por décadas. El sentido común y la amarga experiencia aconsejan que es hora de desvincularse de los proyectos utópicos y abrir un camino de entendimiento y convivencia con el Reino de Marruecos”, señaló.
Y añadió: “Si De Mistura hubiese procesado correctamente e incluido estos datos y realidades en su misión de buenos oficios le habría ido mejor y no se estarían contando los días que le quedan como Enviado para el Sahara Occidental”.
Finalmente, Hach Ahmed recalcó que la vía militar es imposible. “Por eso creemos que la propuesta autonómica ofrecida por Marruecos en 2007 es buen punto de partida para un arreglo político sin vencidos ni vencedores. Sobre esta base elaboramos un proyecto de Estatuto Especial para el Sahara listo para poner sobre la mesa”, señaló.
