Irán volverá a ser sancionado por la Unión Europea
La Unión Europea está a expensas de aprobar una resolución que imponga sanciones contra varias personalidades iraníes por violación de derechos humanos. El país persa lleva ya una larga trayectoria de sanciones, la última impuesta en el 2013, por atentar contra los derechos humanos tras vulnerar el derecho a la libertad de expresión y cometer actos de tortura.
La República Islámica vuelve a estar en el punto de mira por vulnerar los derechos humanos, así como por represiones internas. El 12 de abril de 2011, el Consejo Europeo decretó una serie de medidas restrictivas dirigidas contra personas y diferentes entidades por una violación sistemática de los derechos civiles, de la libertad de expresión y de los derechos fundamentales.
Un documento aportado por Amnistía Internacional afirma que en Irán existe un uso generalizado de la tortura y otras lesiones por parte de la Policía y los servicios de inteligencia, así como de funcionarios en las cárceles contra hombres, mujeres y niños.
Según Naciones Unidas, más de 600 personas fueron ejecutadas sólo en el año 2011 sin haber pasado por el proceso judicial correspondiente. Del mismo modo, en el año 2013, representantes de las Naciones Unidas denunciaron el gran incremento de denuncias por violaciones de los derechos humanos y el aumento de las ejecuciones.
A estas acciones se le uniría la violenta persecución que están sufriendo las minorías religiosas en el país, incluidos cristianos, derviches de gonabadi, judíos y musulmanes suníes y sufíes.
Las sanciones que se decretaron desde la Unión Europea iban dirigidas a prohibir transacciones económicas entre bancos europeos y bancos iraníes junto con la inmovilización de los activos económicos. Junto a esto, se aprobaron sanciones sobre la exportación de bienes que puedan ser destinados a la represión interna.
Según el medio Al-Arabiya, las sanciones previstas para esta ocasión incluirían la misma congelación de activos, así como la prohibición de viajar a varias personalidades, cuyos nombres se harán públicos cuando se emitan las sanciones de manera oficial.
En este contexto, el nuevo Gobierno de Joe Biden aseguró que Estados Unidos volvería a formar parte del acuerdo nuclear firmado por Teherán en 2015. Este acuerdo se aprobó con el fin de que el país persa limitara su carrera de armamento nuclear ajustándose a los compromisos aprobados en el acuerdo a cambio de eliminar las sanciones impuestas al Estado iraní.
Según el acuerdo, Irán debía reducir sus reservas de uranio enriquecido en un 98% y no superar el 3,67% de enriquecimiento. Del mismo modo, se estableció un mecanismo de vigilancia de posibles incumplimientos a través del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). El expresidente Donald Trump abandonó el acuerdo en 2018 tras acusar al régimen de los ayatolas de incumplir la resolución.
En esta línea y de acuerdo con volver a establecer relaciones diplomáticas con el país estadounidense, el ministro iraní de Exteriores, Mohamad Javad Zarif, ha advertido de que el primer paso que tiene que dar Estados Unidos es “levantar incondicional y eficazmente todas las sanciones”. En su cuenta oficial de Twitter explicó que “En cuanto EEUU retirase todas las sanciones impuestas, nosotros revertiremos todas las medidas correctivas”.
