Essaouira, remanso de paz en la costa de Marruecos
Sus playas kilométricas ideales para deportes como el surf o windsurf, así como sus suaves temperaturas y la tranquilidad que se respira caminando por sus calles buscan convertir a Essaouira en una de las principales atracciones turísticas de la costa atlántica de Marruecos.
Situada a unos 180km de Marrakech, Essaouira y sus alrededores son aún un destino poco conocido a pesar de su gran atractivo turístico y belleza natural. No obstante, gracias a la recién inaugurada ruta aérea entre Madrid y Essaouira, más españoles podrán descubrir y disfrutar de esta pequeña ciudad y todo lo que ofrece.
Esta localidad costera marroquí es perfecta para una tranquila escapada de fin de semana. A apenas dos horas de distancia de Madrid en avión, Essaouira es el lugar perfecto para desconectar de la frenética rutina de la capital española.
De la misma forma, Essaouira es considerado un remanso de paz dentro del propio Marruecos, ya que un alto número de marroquíes de otras ciudades como la bulliciosa Marrakech optan por desplazarse a Essaouira en busca de tranquilidad y buen clima.
El tiempo en Essaouira es único en el país. Las temperaturas agradables hacen que sea posible visitar la ciudad en cualquier época del año. Dentro del clima de la zona, el viento es quizá el elemento más destacable. Esto, unido a las playas de mar abierto, hacen de Essaouira un destino imprescindible para los amantes del surf o windsurf.
Además de sus salvajes playas, la ciudad ofrece numerosos puntos turísticos interesantes e históricos en la Medina, declarada Patrimonio Mundial de la UNESCO en 2001, como la puerta Bab el Mechouar, el caravasar, el barrio judío -‘mellah’-, la Iglesia portuguesa, la ‘sqala’ del puerto o el bastión del norte, lugar donde se grabaron escenas de la famosa serie Juego de Tronos. Essaouira también ha sido escenario de películas como El Reino de los Cielos o Lope.
Es sencillo moverse dentro de la ciudad y visitar todos estos lugares a pie ya que, además de no ser una gran metrópolis, la urbe sigue la planificación romana, es decir, en forma cuadricular, tal y como la diseñó el matemático y arquitecto Théodore Cornut en el siglo XVIII.
Además de los puntos turísticos e históricos es un placer caminar y perderse por la Medina, salpicada por casas blancas con ventanas azules, multitud de cafés y comercios que se dedican a trabajar con materiales típicos de la zona, como la madera de thuya. Asimismo, también es recurrente encontrar orfebrería típica amazigh, plateada o prendas elaboradas con rafia originaria de Madagascar.
Essaouira no es solo surf e historia. La ciudad portuaria marroquí cuenta con una gran oferta artística, algo que se percibe caminando por sus calles y descubriendo las numerosas galerías de arte. Igualmente, la localidad acoge más de 10 festivales de música al año de distintos géneros, incluido el flamenco o la electrónica. Respecto a este último, Essaouira, en concreto el hotel Sofitel Essaouira Mogador Golf & Spa, recibe cada octubre el famoso festival de música electrónica Moga.
Igualmente, hablando de música y Essaouira, es interesante destacar la visita del famoso guitarrista Jimi Hendrix a la zona en la década de 1960, años en los que la ciudad era la cuna del movimiento hippie. Por ello, es normal ver imágenes, camisetas o incluso bares dedicados al cantante estadounidense en Essaouira y sus alrededores.
Otras opciones dentro del viaje a Essaouira puede ser una visita a Le Domaine du Val d’Argan, un viñedo a unos 20 kilómetros de la ciudad que también ofrece la posibilidad de alojarse en uno de sus acogedores riads.
Cerca de ahí, se encuentra la Coopérative Féminine Mogador Essaouira, una sociedad creada en 2007 especializada en la producción y comercialización de aceite de argán y sus derivados. La empresa, que da empleo a 37 mujeres, ha recibido varias ayudas estatales a través de, por ejemplo, la iniciativa nacional de desarrollo humano o el programa Marruecos Verde.
Durante la escapada a Essaouira también es recomendable un paseo a camello o quads por las dunas y las playas de zona. Asimismo, hay hoteles que cuentan con una ubicación privilegiada y servicios como spa que facilitan la desconexión y el relax total del turista, como es el caso de Sofitel Essaouira Mogador Golf & Spa, un resort con vistas al océano rodeado de naturaleza donde el sonido más recurrente es el canto de los pájaros.