Las empresas chinas se consolidan en la economía argelina

Por Ahmed Brahim
Foto: Las empresas chinas están bien implantadas en sectores como la construcción y la energía en Argelia.
Las empresas chinas se han abierto camino en Argelia en sectores variados de la economía como el energético y la construcción. Hace unos días, el ministro argelino de Energía, Yucef Yusfi, invitó a las compañías de la segunda gran potencial mundial a invertir en el sector energético y en cuatro proyectos en la industria de los hidrocarburos. Así se lo transmitió el ministro al embajador de China en Argelia, Yang Guangyu. Las dos partes coincidieron en la necesidad de que China y Argelia estrechen la cooperación en la industria del petróleo y eléctrica, la construcción y la obra pública. Argelia es una potencia económica en África, pero sus estructuras políticas y económicas anquilosadas y muy dependientes del Estado frenan el proceso de internacionalización de la economía. Sin embargo, el potencial de Argelia es muy importante y las grandes multinacionales occidentales y de países emergentes ya están desempeñando un papel activo en el crecimiento nacional. El 2013 se crearon 810 nuevas empresas extranjeras en Argelia, es decir 198 menos que en 2012. Por sectores de actividad, los operadores extranjeros fueron muy dinámicos en la industria y la construcción y en la importación y exportación de productos. Francia encabezó la lista de países con mayor número de empresas en Argelia, 1.831 (21,65%). China tiene 732 empresas (8,65%) en el país norteafricano, más que otra potencia emergente, Turquía, con 625 compañías (7,39%). Para el Gobierno de Abdelmalek Sellal, los sectores clave para las empresas extranjeras son la industria manufacturera, la construcción, la energía, la agricultura y el turismo.
Dura competencia
En agosto de 2009, los grupos españoles, entre ellos las multinacionales FCC e Isolux, perdieron uno de los mayores contratos ferroviarios en Argelia frente a las compañías chinas Civil Engineering Construction Corporation (CCECC) y CRG. Argelia se convirtió en el campo de pruebas para testar la competitividad de las constructoras chinas, grandes corporaciones que iniciaron hace unos años la carrera de la internacionalización con una gran agresividad. Las empresas chinas se establecieron en Argelia, un enclave básico para las constructoras españolas por su cercanía y el volumen de contratación. En los primeros enfrentamientos, los grupos chinos demostraron tanta o mayor agresividad empresarial que su rivales españoles y utilizaron su propia medicina para ganar: la competencia vía precios. Cinco años después, las compañías chinas y españolas siguen compitiendo en Argelia. State Construction Engineering Corporation (CSCEC) es una de las compañías chinas del sector de la construcción y de la obra pública más sólidas y boyantes en Argelia. CSCEC tiene mucha presencia en el mundo económico argelino. Quizá con la excepción del grupo ETRHB Haddad y del gigante público Cosider, ninguna empresa nacional o extranjera de la construcción supera a la compañía china. CSCEC construye en muchas partes del país: gran mezquita de Argel (1.500 millones de dólares), nuevas instalaciones en el aeropuerto de Argel (550 millones de dólares), ciudad universitaria de Constantina (520 millones de dólares)… CSCEC llegó a Argelia en los años 80 del siglo pasado y se quedó. Superó muchos problemas, como cuando en 2009 el Banco Mundial (BM) incluyó a la empresa china en una lista de compañías con prácticas corruptas. CSCEC tiene el respaldo político del presidente Abdelaziz Bureflika y su bandera hace parte del paisaje argelino.
Actividad frenética
En los últimos años la actividad de la compañía china ha sido frenética. Construyó el Sheraton Club, inaugurado en 2001 y sede de la 35ª Cumbre de la Liga Árabe en 2005; la Escuela Superior de Hostelería y de Restauración (ESHRA), que abrirá sus puertas en otoño; la nueva sede del Ministerio de Asuntos Exteriores; 43.000 viviendas para 11 municipios en 2002; el Círculo Nacional del Ejército de Beni Mesus (2007); el Hotel Mariott de Tlemcen; una autopista; 400 apartamentos sociales en Argel; una policlínica en Ain Taya… Pero también infraestructuras hidráulicas en varios lugares de la geografía argelina, un centro hospitalario en Orán y una fábrica de detergentes en Rahmania. Sin olvidar nuevas obras en los aeropuertos de Argel, Orán y Constantina. La empresa china no ofrece la misma calidad que las españolas y europeas, pero Argel lo acepta. También los retrasos acumulados en algunas obras. De vez en cuando algún ministro alza la voz y poco más. Las duras condiciones de trabajo a las que son sometidos los trabajadores argelinos de la compañía china han sido denunciadas por algunas medios, pero las autoridades no han tomado cartas en el asunto. Al revés, los responsables de la CSCEC son recibidos en Argelia por las autoridades como si fueran héroes de la lucha por la independencia.