Las consecuencias de la decisión de Recep Tayyip Erdogan aún están causando serios estragos en la economía turca

Continúa el terremoto económico en Turquía tras el despido del gobernador del Banco Central

photo_camera REUTERS/MURAD SEZER - El presidente turco Tayyip Erdogan habla durante una reunión para anunciar un paquete de reformas económicas, en Estambul, Turquía, el 12 de marzo de 2021

Naci Agbal ha dejado su puesto al frente del Banco Central en lo que algunos expertos, como Timothy Ash, prestigioso analista de Bluebay Asset Management, han catalogado como “una decisión verdaderamente idiota”. La nueva muestra de la escasa – por no decir absolutamente nula – independencia del poder económico respecto al Ejecutivo de Recep Tayyip Erdogan, que ha tardado tan sólo cuatro meses en fulminar al que ha sido su tercer gobernador del Banco Central en menos de dos años. Sahap Kavcioglu ocupará el cargo para sorpresa de inversores, economistas y expertos en el sector, al tratarse de un hombre con escasa experiencia en el sector.  

Uno de los motivos fundamentales del cese de Agbal sería la subida del tipo de interés del 17% al 19%, en un intento por estabilizar la lira turca. Tras su salida del Banco Central la situación no ha hecho otra cosa que empeorar. La caída de la lira turca durante la jornada del lunes fue de lo más dura, perdiendo un 9% de su valor en pocas horas. Además, la Bolsa de Estambul se vio obligada a parar su actividad hasta en dos ocasiones, experimentando pérdidas de más de un 9%. Una tendencia que mantuvieron durante la mañana del martes, cuando la actividad volvió a verse suspendida, a pesar de haber recuperado mínimamente la estabilidad el lunes por la noche. 

La creencia de Erdogan acerca de los tipos de interés lastra, una vez más, la economía del país turco. Y es que, al contrario que todos los economistas, cree que la subida de los tipos de interés provoca un aumento de la inflación. Este argumento que escapa a la comprensión de los expertos parece ser una cortina de humo más en lo que sería un mero intento de tener más controlado el Banco Central. Kavcioglu parece estar más en la cuerda ideológica del régimen que, junto a la buena relación que guarda con el presidente, le permitirían tener más poder – quizá no todo el que le gustaría – en el órgano económico. 

El exgobernador del Banco Central de Turquía, Naci Agbal

Si bien es cierto que la pandemia de la COVID-19 no golpeó en exceso a la economía de Turquía, la moneda local encadenó su octavo año consecutivo en descenso, según datos proporcionados por Bloomberg. Tan sólo en el 2020 perdió el 25% de su valor, situándose entorno a las 7,25 liras por dólar. Si miramos a las cifras actuales, el dato es más desastroso todavía, alcanzando casi las 8 liras por dólar, como consecuencia, entre otras cosas, a las continuas injerencias de Erdogan en el terreno económico. 

Y es que la turca no ha sido la única economía que ha sufrido las consecuencias del despido del gobernador del Banco Central. El propio BBVA comenzó esta semana con unas pérdidas que alcanzaron casi el 8%. La adquisición por parte del banco de 60.000 millones de dólares en activos del banco privado Garanti – entidad en la que se encuentra al frente Carlos Torres –, ha provocado una gran exposición ante la deuda turca. No obstante, el BBVA ya ha amortizado más o menos el 75% de su inversión debido a la caída del precio de la acción, así como a su devaluación. 

El nuevo gobernador del Banco Central de Turquía, Sahap Kavcioglu, sentado en su oficina en Ankara, Turquía, el 21 de marzo de 2021

La visión desde el exterior de las fronteras turcas es muy negativa en cuanto al cambio de gobernador ya que lo ven como un nuevo obstáculo en la economía de los de Erdogan. Desde Bankinter aseguran que “los fundamentales de Turquía son débiles y el previsible cambio en la política monetaria es un nuevo obstáculo”. Prevén que la nueva política monetaria sea mucho más laxa y cercana a los deseos de Erdogan en contra de la subida de los tipos de interés. A esto se le debe sumar que actualmente Turquía es uno de los países en el mundo con el dato de inflación más negativo de todos – 13,6% en el mes de febrero – al igual que el de paro – también un 13,6% – y un déficit por cuenta corriente del -5,2%/PIB. 

Los clientes esperan frente a una agencia de cambio de divisas mientras una pantalla muestra los tipos de cambio cerca del Gran Bazar, en Estambul, el 22 de marzo de 2021

Una situación compleja a la que tendrá que hacer frente el nuevo gobernador, Sahap Kavcioglu, y que esperan desde el exterior puedan superar con cierta independencia de las decisiones que pueda tomar Recep Tayyip Erdogan. No obstante, las previsiones apuntan a todo lo contrario y el presidente tendrá un mayor peso en el Banco Central, lo que, apuntan los expertos, podría culminar dinamitando por completo la economía del país turco.