Marruecos se abre al turismo chino
Paco Soto
Pie de foto: El rey de Marruecos, Mohammed VI, con el presidente de China, Xi Jinping.
Marruecos, un país en expansión económica en el Magreb, ha decidido abrirse al turismo chino. Cada año, unos 2.000 chinos visitan Marruecos. Es una cifra insignificante, pero en 2016 el flujo de turistas de la gran potencia asiática crecerá un 15%. El diario Aujourd´hui le Maroc asegura que el país se prepara para acoger a más turistas chinos, que generalmente disfrutan de un alto poder adquisitivo y gastan mucho dinero cuando viajan al extranjero. Rabat quiere hacerle la vida fácil al turista chino. El pasado 1 de julio, las autoridades marroquíes decidieron suprimir los visados a los chinos que visiten el país magrebí. Marraquech es el principal destino de los chinos que viajan a Marruecos.
Según el Ministerio de Turismo, 5.377 chinos viajaron a Marruecos entre enero y mayo de este año, 15% más que en el mismo periodo del año pasado. Para mantener esta dinámica, Marruecos no descarta abrir una línea aérea entre los dos países que uniría Marraquech con Pekín. En este sentido, las autoridades marroquíes iniciaron negociaciones con la compañía Qatar Airways. Mientras, los profesionales marroquíes del sector han decidido participar activamente en diversos eventos turísticos que se celebrarán próximamente en China. Además, Marruecos organizará una gira por todo el país para profesionales y medios chinos y el Consejo Regional de Turismo de Marraquech utilizará la lengua china en su labor de comunicación.
Gran potencia emergente
China es una gran potencia emergente y la segunda economía mundial. China dejó de ser hace años un país en vías de desarrollo; es el principal acreedor de Estados Unidos, cuenta con una clase media de 100 millones de personas, y se ha abierto camino económico en los viejos estados capitalistas desarrollados de Europa y también en amplias zonas del mundo en desarrollo y emergente. África es un continente atractivo para las inversiones y el comercio chinos, que compiten con ventaja en el continente con economías como la francesa y la británica.
Pie de foto: Un hotel de una empresa española en la turística ciudad de Fes.
En el Magreb, Marruecos y Argelia, y en menor medida Mauritania con la pesca, son polos de atracción para el agresivo y competitivo capitalismo chino. El rey de Marruecos, Mohamed VI, además de fortalecer los lazos bilaterales con España, Francia y la Unión Europea (UE), decidió orientar las relaciones económicas y comerciales de su país hacia las grandes potencias emergentes como China, Rusia e India. El pasado 11 de mayo, Mohamed VI firmó en Pekín una alianza estratégica con los dirigentes chinos.
Plan Visión 2020
Marruecos se está convirtiendo en una potencia turística. El país magrebí recibió a 11 millones de turistas en 2014. El objetivo a corto plazo es potenciar el plan Visión 2020, que quiere hacer de Marruecos la gran potencia turística del continente africano. Muchas empresas españolas del sector turístico están interesadas por este ambicioso plan estatal. Los franceses y los españoles son los extranjeros que más visitan Marruecos, seguidos de los británicos y los alemanes. Italia, Holanda y los países escandinavos también son importantes para el sector turístico marroquí, que en los últimos años se ha abierto a las clases medias de estados de la antigua Europa comunista como Polonia y la República de Chequia.
El país magrebí ha hecho un esfuerzo enorme en la modernización de sus vías de comunicación terrestres, ferroviarias, marítimas y aéreas. Las infraestructuras de muchas ciudades se han transformado radicalmente. Marruecos tiene a su favor que es un país estable desde el punto de vista político, económico y social. El terrorismo yihadista existe como en otros países de la región, pero está controlado por las fuerzas de seguridad. Los atractivos de Marruecos son considerables: clima, paisajes, gastronomía, diversidad cultural y amabilidad de la población.
