La aerolínea marroquí Royal Air Maroc ha anunciado que planea invertir casi 25 mil millones de dólares en cuadruplicar su flota en los próximos diez años. En 2019, la compañía poseía 60 aviones, aunque vendió varios de ellos tras el estallido de la pandemia del coronavirus. Con esta nueva inversión, se espera que su flota alcance los 200 aviones.
Tal y como indicó su director general, Abdelhamid Adou, Royal Air Maroc tiene como objetivo adquirir aviones de fuselaje ancho y mediano. Adou también señaló que antes de fin de año la compañía abrirá la puerta a compañías internacionales para presentar sus ofertas.
“Llamaremos a las puertas de todos nuestros socios, bancos y grandes empresas para financiar estos acuerdos”, afirmó, el directo general de la compañía, que pasará de 50 a 200 aviones. “Es decir, una media de 15 aviones al año, lo cual es mucho para nosotros, pero tenemos mucha confianza en que alcanzaremos este objetivo”, explicó Adou.
La flota actual de la compañía se compone principalmente de aviones estadounidenses Boeing. Sin embargo, su competidor Airbus está tratando de obtener un pedido para uno de sus modelos, según una declaración anterior de Hadi Akoum, vicepresidente de ventas para África de la compañía de fabricación de aviones.
Este plan sitúa a la empresa marroquí en el camino hacia la competencia regional, además de posicionarlo como un punto de conexión entre Europa y los países de África Occidental. En este sentido, varios analistas citados por Al-Arab destacaron que Marruecos tiene una gran oportunidad en este sector ya que, a diferencia de Dubái, Manama, Doha y Mascate, que compiten por ser el punto de paso hacia el este de Asia, en el norte de África no hay compañías aéreas de éxito que puedan competir con Royal Air Maroc.

El Gobierno marroquí respalda significativamente a la aerolínea con el fin de alcanzar estos objetivos. Por ejemplo, el pasado mes de julio, Rabat decidió aumentar el capital de Royal Air Maroc a través de un ambicioso programa que se extenderá hasta 2037.
Entonces, el primer ministro Aziz Akhannouch y el director general de Royal Air Maroc, Abdelhamid Adou, firmaron un acuerdo mediante el cual “la monarquía marroquí duplicará su flota aérea”. Este contrato también contempla un incremento de la contribución del Estado al capital de la empresa.
De acuerdo con los últimos datos, el capital de la aerolínea ascendió unos 370 millones de dólares en 2019, más del 98% perteneciente al Estado. Por otro lado, desde 2020, el apoyo estatal a la empresa ascendió a unos 6.000 millones de dírhams (menos de 600 millones de dólares). No obstante, debido a la pandemia del coronavirus, la aerolínea experimentó una serie de pérdidas.