Llega el acento francés al frente de combate en Ucrania

La corresponsal María Senovilla analiza en “De cara al mundo” la actualidad del conflicto y las consecuencias de la cumbre del G7 
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, es recibido por el presidente de Francia, Emmanuel Macron, a su llegada al palacio presidencial del Elíseo en París el 14 de mayo de 2023 - AFP/LUDOVIC MARIN
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, es recibido por el presidente de Francia, Emmanuel Macron, a su llegada al palacio presidencial del Elíseo en París el 14 de mayo de 2023 - AFP/LUDOVIC MARIN

La periodista y colaboradora de Atalayar y otros medios María Senovilla pasó por los micrófonos de “De cara al mundo” en Onda Madrid para analizar la situación en Ucrania y las primeras reacciones a la reunión del G7, celebrada en Italia, que acordó un nuevo paquete de ayuda de 50.000 millones de dólares más para poner fin al conflicto. 

G7, un crédito de 50.000 millones de dólares. Un paso importante de los occidentales porque se trata de utilizar los intereses que dan los activos congelados de Rusia en Occidente para dotar este crédito. 

Y Rusia no se lo ha tomado muy bien. La semana pasada, parece que se estaban dando pasos en esa dirección y finalmente se anunció. Además de este anuncio económico, que es muy importante por la cuantía, Zelensky ha firmado, en el seno de la cumbre del G7, un importante acuerdo bilateral de seguridad con Joe Biden y Estados Unidos y Ucrania han acordado renovar la ayuda estadounidense, que incluye el suministro de armas para el país de Zelensky y el envío oficial de instructores estadounidenses a suelo ucraniano. 

Estados Unidos se sumaría a la estela que empezaba Francia, que fue el primer país que hizo ese anuncio de enviar instructores a suelo ucraniano. Estados Unidos podría tener ya personal desplegado en Ucrania para ayudar a los ucranianos a manejar o a instruirles en esos sistemas de armas importantes como pueden ser los sistemas Patriot y otros de gran cuantía y de gran capacidad técnica. 

Se hace oficial ese anuncio, no se ha dicho cuándo, pero habrá instructores estadounidenses en suelo ucraniano. Esto es muy importante, el acuerdo tendrá una vigencia de 10 años, lo cual es un buen síntoma del respaldo estadounidense al país invadido por Rusia, sobre todo de cara a esas elecciones estadounidenses en las que Trump podría volver a ocupar la Casa Blanca y eso genera mucha desazón en los ucranianos; pero, por otro lado, un acuerdo a 10 años vista anticipa una guerra muy larga que no deja de desangrar a Ucrania y a sus ciudadanos. 

Zelensky, por su parte, ha interpretado el gesto como un puente, decía, para que su país pueda unirse a la OTAN en un futuro. Por otro lado, mencionábamos esa cumbre de paz.

OTAN - PHOTO/FILE
OTAN - PHOTO/FILE

La reunión del G7 con Zelensky y los acuerdos acercan más a Ucrania a la OTAN. Suiza ha acogido una conferencia donde Moscú, el agresor, no ha sido invitado. ¿Qué objetivos ha perseguido Zelensky con esta cumbre en Suiza? 

Zelensky persigue ahondar aún más en ese espaldarazo, en ese refuerzo del apoyo de Occidente a Ucrania. Porque no deja de sonar extraño que, en una cumbre de paz, para poner fin al conflicto entre Ucrania y Rusia, no esté invitada Rusia. Y ese punto está causando controversia. 

Figuras como Lula da Silva, el presidente de Brasil, lo ha calificado directamente como un sinsentido. China también está en el punto de mira por presionar a otros países para que no participen. Y el Kremlin está intentando desacreditar el encuentro por todos los medios. 

No se hizo pública la lista de asistentes precisamente para que no recibiesen presiones de terceros. Un hecho inusual en una cumbre internacional de este calado, que ha reunido a esta cantidad de participantes. 

Es un buen momento para volver a exhibir ese apoyo a Ucrania y seguro que Zelensky intenta de alguna manera avanzar, dar pasos en la dirección de que Ucrania siga dando pasos para formar parte de la UE. Aun así, vamos a tener que esperar para ver lo que propone Zelensky, los pasos que hay en su agenda, en esa fórmula de paz que ha llamado para que el conflicto, que ya se alarga por casi dos años y medio, tenga un punto final.

AFP/ GIANLUIGI GUERCIA - El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva (L), acompañado por la primera dama Rosangela Janja da Silva (R), llega a la Cumbre BRICS de 2023 en el Centro de Convenciones Sandton en Johannesburgo el 23 de agosto de 2023
El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva (L), acompañado por la primera dama Rosangela Janja da Silva (R), llega a la Cumbre BRICS de 2023 en el Centro de Convenciones Sandton en Johannesburgo el 23 de agosto de 2023 - AFP/ GIANLUIGI GUERCIA

María, nueva ronda de sanciones económicas impuestas por Occidente y la primera repercusión es que el dólar de pagarse a 90 rublos se paga a 200 en las primeras 24 horas. 

Es una caída histórica de la moneda rusa. Ningún paquete de sanciones previo había tenido este efecto en Rusia y las imágenes de los últimos días en el país nos han dejado ver colas de ciudadanos en las puertas de los bancos, colas que dan directamente la vuelta a los bancos de gente intentando sacar su dinero, unas imágenes que recordaban a los años del corralito en países como Argentina. Los bancos rusos ahora mismo están comprando el dólar a 50 rublos y lo están vendiendo a 200, más del doble que hace una semana. 

Esto sucede porque las nuevas sanciones obligan a Rusia a operar en el mercado extrabursátil en todas las operaciones que haga con dólares y no podrán participar en ese libro común de cotizaciones que sí está disponible para el resto de los participantes en el mercado estadounidense. El objetivo es evitar que Rusia adquiera insumos para fabricar armamento a través de terceros países. Se trataría de materiales como los chips, que están presentes en todo el armamento de nueva generación, y otras materias primas necesarias para que Rusia siga con ese ritmo de producción tan intenso que está llevando a cabo desde que comenzó la invasión. 

Las factorías de armas rusas funcionan 24 horas al día en tres turnos consecutivos y hay fábricas dedicadas a otros menesteres que se han reconvertido en fábricas de armamento. Es un intento de parar esa rueda que no deja de crecer y, aunque no hay datos, porque obviamente Rusia no los ha revelado, sí parece que se están fabricando tanto armamento pesado como munición para continuar esa invasión a gran escala en el país vecino.

Personas cruzan un puente destruido mientras evacuan la ciudad de Irpin, al noroeste de Kiev, durante fuertes bombardeos y bombardeos el 5 de marzo de 2022 - AFP/ARIS MESSINIS
Personas cruzan un puente destruido mientras evacuan la ciudad de Irpin, al noroeste de Kiev, durante fuertes bombardeos y bombardeos el 5 de marzo de 2022 - AFP/ARIS MESSINIS

La Casa Blanca denuncia ahora que Rusia está incluyendo niños ucranianos separados a la fuerza de sus padres y deportados en los sitios web de adopción, un escándalo que reaviva el tema de los menores secuestrados por el Kremlin en Ucrania desde que empezó la invasión. 

La denuncia es del asesor de Seguridad de la Casa Blanca, Jake Sullivan, quien recordaba que son miles precisamente los menores ucranianos que han sido separados de sus familias a la fuerza y enviados a territorio ruso desde que comenzó esta invasión a gran escala. Hace más de un año ya se denunció este crimen de guerra, porque está catalogado como un crimen de guerra el sustraer menores y llevártelos a tu país. 

Y los datos que salían a la luz tras una investigación periodística en la que participaron medios de distintos países, incluido España, se habló en aquel momento de casi 20.000 menores secuestrados por Rusia. Sus familias llevan luchando desde entonces por recuperarlos, pero son muy pocos los que han logrado volver a casa. Puedes imaginar lo que tiene que suponer para ellos ver a sus hijos en una web de adopción rusa, cuando llevan a lo mejor dos años o dos años y pico peleando por conseguir que vuelvan a casa. 

Y lo peor de todo es que no es la única historia terrible que nos llega relacionada con este tema, porque ya son varios los casos que se han denunciado en redes sociales de adolescentes que fueron secuestrados con 16 o 17 años, que han cumplido la mayoría de edad en suelo ruso y que al cumplir los 18 se les ha puesto un uniforme ruso y se les ha mandado al frente de combate a matar ucranianos.

Las tropas españolas, como parte del programa “Misión de Entrenamiento de la Unión Europea en Mali” (EUTM Mali), han estado implicadas en el entrenamiento de brigadas malienses durante más de una década <strong>- PHOTO/X/@eutmmali1</strong>
Las tropas españolas, como parte del programa “Misión de Entrenamiento de la Unión Europea en Mali” (EUTM Mali), han estado implicadas en el entrenamiento de brigadas malienses durante más de una década - PHOTO/X/@eutmmali1

Terrible, eso de meter en el seno del Ejército ruso a alguien que es ucraniano puede tener consecuencias. Es una manera de guerra total donde se usa cualquier circunstancia y herramienta para socavar la moral de los adversarios. Y nuestra moral, un poquito por los suelos, María, otro español caído en combate en Ucrania. Mueren muchas personas, lo cual es lamentable y lo sentimos por todos, pero en este caso nos toca más de cerca qué ha pasado con este español. 

Es un joven de tan solo 22 años y había desertado del Ejército español para incorporarse a la guerra de Ucrania. Él servía en el Tercio de Infantería de Marina en Cádiz, pidió una excedencia el año pasado de tres meses y cuando le tocaba volver a incorporarse en diciembre no acudió a su puesto y se supo que había pedido esa excedencia porque lo que quería era vivir la guerra en primera persona y había decidido ir a luchar como combatiente voluntario a Ucrania. Aquí en España estaba en busca y captura por deserción y ni su familia ni sus amigos tenían contacto directo con él desde diciembre del año pasado. 

Se ha confirmado su muerte ahora porque las autoridades ucranianas han enviado tanto la documentación como algunas pertenencias personales, por lo cual se deduce que han recuperado el cuerpo. Por desgracia, se da la casuística de que hay otro español que está considerado desaparecido en combate, que cayó en Advidka y de él todavía no se ha podido recuperar su cuerpo. En realidad, ya van seis muertos en suelo ucraniano desde que comenzó la invasión. 

Cinco viajaron al país para unirse como combatientes voluntarios a las Fuerzas Armadas y luego una sexta persona, una cooperante catalana, Gemma Ewald, que el año pasado recibió un misilazo directo de las tropas rusas en el vehículo con el que recorría localidades muy cerquita de primera línea de combate en la región de Bajmut, donde era imposible llevar ayuda humanitaria, y ella capitaneaba una de las pocas ONG que llegaban tan cerca a sitios tan peligrosos como esas poblaciones dejadas de la mano de Dios tan cerca de primera línea de combate. Una última misión que le costó, por desgracia, la vida. 

Así que ya son seis banderas españolas las que están plantadas en Maidán. Hemos visto muchísimas veces las imágenes de esa plaza, que está completamente sembrada de banderas, la mayoría ucranianas, pero hay de otras nacionalidades, y ya son seis las de España.

De izquierda a derecha: el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, el canciller alemán, Olaf Scholz, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, el presidente francés, Emmanuel Macron, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, el presidente estadounidense, Joe Biden, el primer ministro japonés, Fumio Kishida, el primer ministro británico, Rishi Sunak, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, posan para una foto de familia en el complejo turístico de Borgo Egnazia durante la cumbre del G7 que Italia acoge en la región de Apulia – PHOTO/Ludovic MARIN/AFP
De izquierda a derecha: el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, el canciller alemán, Olaf Scholz, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, el presidente francés, Emmanuel Macron, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, el presidente estadounidense, Joe Biden, el primer ministro japonés, Fumio Kishida, el primer ministro británico, Rishi Sunak, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, posan para una foto de familia en el complejo turístico de Borgo Egnazia durante la cumbre del G7 que Italia acoge en la región de Apulia – PHOTO/Ludovic MARIN/AFP

María, ¿cómo valoras las decisiones que ha tomado el G7, este acuerdo entre Ucrania y Estados Unidos, la decisión de utilizar ese dinero y que Rusia se moleste? Porque ese dinero es más una inyección de moral, hay que pagar, además de armas, salarios y mantener la economía… pero si es más un espaldarazo político que algo que pueda permitir a Ucrania en un momento determinado cambiar ahora mismo el desenlace de la ofensiva rusa, ¿cómo se valora y para qué va a servir este dinero?  

Va a ser un espaldarazo moral que llega en un momento en el que el pueblo ucraniano está ya pidiendo directamente venganza, porque ya son miles, decenas de miles las víctimas personales; como decíamos, esta guerra está desangrando Ucrania. No conozco a ningún ucraniano que en estos momentos no tenga un familiar o un amigo que haya caído o en el frente de combate o bajo los bombardeos rusos. 

El pueblo sí está clamando que se haga algo ya directamente contra Rusia. Y, por poner otro ejemplo, que no tiene nada que ver con el del dinero, en el caso de los prisioneros de guerra rusos, los que están en Ucrania están bajo el amparo de las convenciones de Ginebra y, por ejemplo, se les permite hacer llamadas de teléfono a sus familias, mientras que de los prisioneros de guerra ucranianos las familias no saben en la mayoría de los casos si están vivos o muertos, porque están incomunicados. 

Y, se cumplía hace poquito, los dos años de la caída de Azovstal, y una de las demandas que se hacían en la manifestación era que prohibieran las llamadas de teléfono de los prisioneros rusos, que esas no están acogidas en los convenios de Ginebra, los permite Ucrania por humanidad y les permite simplemente la correspondencia por carta, que es lo que sí está recogido en esos acuerdos. Si esos activos procedentes del rendimiento de los activos rusos congelados llegan finalmente a Ucrania y se emplean para la reconstrucción va a ser una doble satisfacción para los ciudadanos.

Hotel destruido durante un ataque con misiles rusos en Járkov - REUTERS/SOFIA GATILOVA
Hotel destruido durante un ataque con misiles rusos en Járkov - REUTERS/SOFIA GATILOVA

¿Cómo planteas tus coberturas sobre el terreno de las próximas semanas?    

La semana que viene ya estaré otra vez de nuevo por Ucrania. Hay que atender el frente de combate noreste, no solo Járkov, sino que ahora están fortificando la provincia de Sumy, que es la que hay a continuación de Járkov por el norte, porque parece que habría grupos de sabotaje rusos, intentando sobre todo que se dividan las fuerzas ucranianas y que tengan que movilizar hasta ahí efectivos, para que esa larguísima línea del frente de combate de más de 1.400 kilómetros esté lo más debilitada posible en algún punto, para que Rusia pueda romper brecha por ahí. 

Desde la llegada de la tercera brigada que últimamente han detectado un repentino acento francés en algunos sitios, con lo que esos instructores que anunciaba Macron ya están empezando a llegar sobre el terreno. Intentaré comprobarlo de primera mano para poder contarlo aquí, en estos micrófonos.