Arabia Saudí y Estados Unidos reclaman la ampliación del embargo de armas a Irán
El Ministro de Exteriores saudí, Adel al-Jubeir, y el representante especial de Estados Unidos para Irán, Brian Hook, han pedido este lunes a la comunidad internacional que se extienda el embargo de la ONU sobre la venta de armas a esta nación, según informa este martes el diario Arab News. La prohibición de venta de armas al régimen de los ayatolás fue impuesta hace 13 años y expira el próximo octubre. En una conferencia de prensa conjunta en Riad, Al-Jubeir ha afirmado que la política exterior saudí y estadounidense hacia Teherán es la misma. “Ambos vemos a este país como un grave peligro, no solo para la estabilidad regional, sino también para la estabilidad internacional. Es el principal financiador del terrorismo. La comunidad internacional tiene que ser más firme en su trato con los iraníes”, ha asegurado el responsable de exteriores saudí.
El embargo, adoptado en virtud de la Resolución 1747 de la ONU, endureció las sanciones en respuesta a la negativa de Teherán a detener su programa nuclear, prohíbe a Irán mover armas convencionales más allá de sus fronteras. La Coalición Árabe ha mostrado armamento, incluyendo aviones teledirigidos y misiles, que se cree que fueron suministrados por Irán a las milicias hutís de Yemen, que se utilizaron en los ataques transfronterizos contra ciudades saudís.
Los hutís, grupo armado respaldado por Irán, han llevado a cabo 1.659 ataques contra Arabia Saudí en los últimos cinco años. Han utilizado diversas armas, entre ellas 318 misiles balísticos, 371 aviones teledirigidos, 64 embarcaciones explosivas y 153 minas navales. Los ataques tienen por objeto amenazar y atacar a civiles, perjudicar la economía mundial e interrumpir la navegación, en violación del derecho internacional y comunitario, según ha informado la coalición.
Al-Jubeir ha asegurado que Teherán continúa suministrando armas a los grupos terroristas a pesar del embargo, y si se levanta, Irán se volverá aún más agresivo y perturbador. El enviado estadounidense ha coincidido con Al-Jubeir: "Las armas que vemos hoy aquí son toda la evidencia que necesitamos de que el embargo contra Irán no debe ser levantado. Tenemos que asegurarnos de que a Teherán le resulte más difícil propagar armas mortales".
"Esta es una fracción del tipo de armas mortales que han llegado no sólo a Arabia Saudí, sino a todo el Oriente Medio, por lo que es el momento adecuado para que el Consejo de Seguridad de la ONU haga lo correcto y necesario". Ambos funcionarios coincidieron en que la comunidad internacional debe ejercer una fuerte presión sobre Teherán para que cumpla las leyes internacionales, deje de apoyar el terrorismo, de tratar con organizaciones delictivas y cárteles de la droga y detenga la matanza de personas inocentes. "Ambos deseamos que Irán sea un país normal que viva en la comunidad internacional de la manera en que lo hacen otros países, que respete el derecho internacional y la soberanía de otros estados, que no interfiera en sus asuntos internos, y que (ponga fin) a sus programas de misiles balísticos y terrorismo", ha solicitado Al-Jubeir.
