Argelia busca rebajar la crisis diplomática con Francia

Con motivo del próximo 63º aniversario de la independencia de Argelia, el Consulado argelino en Nanterre ha comunicado indirectamente, según Al Arab, sus intenciones de calmar la crisis diplomática con Francia.
La festividad durará del 1 al 6 de julio con distintas actividades como “partidos de fútbol y baloncesto, proyección de la película sobre Frantz Fanon (psiquiatra, escritor y activista anticolonial del siglo XX nacido en Martinica, que fue nombrado jefe de servicio del hospital psiquiátrico de Blida en plena Guerra de Independencia argelina), conferencias y debates...”, según el medio argelino Tout sur Algerie. Incluso se ha organizado un concurso de dibujo para la juventud en ocasión del aniversario.

Las actividades organizadas por asociación Cités 2000, el Consulado de Argelia y el Colectivo del 16 de octubre 1961 se agrupan bajo el lema “Compartir, recordar y convivir”, lo cual se interpreta como un deseo de relajar la situación de crisis existente entre Argelia y Francia de manera que las autoridades argelinas no se vean en aprietos, como ha señalado el medio Al-Arab.
Esta visión se acentúa cuando se tiene en cuenta que, recientemente, Francia y Argelia se han reunido en varias ocasiones de manera oficial por motivos económicos. Según Le Monde Afrique, “algunos observadores lo consideran el inicio de una mejora en las relaciones políticas entre ambos países”.
Las Jornadas Industriales en Argelia han sido el escenario de unas conversaciones positivas relacionadas con empresas de ambas naciones. El presidente de la Cámara de Comercio e Industria Argelino-Francesa Michel Bisac, se mostró positivo ante el avance de las relaciones económicas: “El difícil clima diplomático entre ambos países nos afectó durante un tiempo. Sentíamos dificultades y tensiones, pero la situación mejoró gradualmente”.

El conflicto diplomático entre ambas naciones comenzó porque, en julio de 2024, el presidente Emmanuel Macron reconoció la soberanía marroquí sobre el Sáhara Occidental. En consecuencia, las relaciones habían quedado completamente “congeladas”, según el ministro de Asuntos Exteriores Jean-Nöel Barrot, tras la mutua expulsión de personal diplomático a consecuencia de esta importante decisión política y del enfrentamiento diplomático generado.
Desde ese entonces, las autoridades de cada lado han ido adoptando un lenguaje hostil y duro marcado por acusaciones y comentarios relacionados con el controvertido asunto del colonialismo.
Ha sido la mayor crisis que han tenido en todo el tiempo que lleva Argelia siendo independiente tras el fin de la etapa colonial francesa porque el país argelino siempre se ha posicionado de manera clara en apoyo a la celebración de un referéndum de independencia del pueblo saharaui. Una tesis que choca con la propuesta de Marruecos, que plantea una amplia autonomía para el Sáhara Occidental bajo soberanía marroquí. La fórmula marroquí ha ido contando con muchos e importantes apoyos internacionales en los últimos años, incluido el de Francia, que generó gran malestar en el seno argelino.

Un escenario que además se agravó con el arresto de influencers argelinos en Francia acusados de terrorismo e incitación a la violencia y al odio. El ministro Barrot también había manifestado su preocupación por la detención del escritor franco-argelino Boualem Sansal en Argelia por cuestiones políticas.
No obstante, los expertos han observado que las autoridades argelinas ya no tienen interés en seguir con el conflicto debido a las pérdidas y perjuicio de interese que está enfrentando el país.
El exembajador francés en Argelia, Xavier Driencourt, profundizó detalladamente en la situación del país norteafricano junto a su compleja relación con Francia desde los Acuerdos de Evian de 1962 hasta la actualidad y publicó el libro “La doble ceguera”.
Según Driencourt, existe una fuerte represión a la libertad de prensa y la libertad de expresión mediante el afán policial de reforzar la narrativa del resentimiento colonial. Además, critica la decisión francesa de ignorar la situación.

Esa narrativa llegó a tal punto que Argelia ha exigido a lo largo de los años una disculpa por parte de las autoridades francesas por los 130 años de colonialismo.
También ha subrayado que Argelia no se encuentra en un buen momento económico ni político al perder aliados importantes como los Emiratos Árabes Unidos o la propia Francia por el enfrentamiento diplomático reciente.
Por eso, Driencourt apeló a que el país francés debe construir una relación que verdaderamente beneficie los intereses mutuos, que sea totalmente transparente y se base en el respeto.