El calvario del equipo de fútbol Renacimiento de Berkane en el aeropuerto de Argel
Todo empezó muy bien. A su llegada al aeropuerto internacional Houari Boumediene de Argel, hacia las 11 de la mañana, la delegación marroquí, que había volado directamente desde Oujda en un vuelo especial, fue recibida con flores por los directivos del USM Alger, su rival en semifinales de la Copa de la CAF. Las relaciones entre ambos clubes son extremadamente cordiales. Ambos ganaron el trofeo de la CAF con el mismo entrenador, el argelino Abdelhak Bencheikha, en 2022 para el Berkane y en 2024 para el USM Alger.
Justo cuando los jugadores habían subido al autobús que debía llevarlos al hotel en el que se habían instalado, se les pidió que regresaran al aeropuerto para un registro minucioso de su equipaje. El objetivo del registro no era otro que confiscar las camisetas con el emblema marroquí en forma de mapa del reino. Mientras tanto, todo el equipo fue confiscado. La delegación marroquí se negó a abandonar el aeropuerto sin recuperar sus pertenencias.
Hubo que esperar hasta última hora de la tarde para que la delegación marroquí se instalara finalmente en sus dependencias, tras haber recibido garantías de los representantes de la CAF de que se les devolvería su material y de que llevarían sus camisetas de acuerdo con las normas de la Confederación Africana de Fútbol. A pesar de que las autoridades argelinas se obstinan en que los marroquíes no jueguen con una camiseta en la que figura un mapa geográfico completo del Reino.
Les han sugerido que se pongan cinta adhesiva para ocultar lo que no ven. Su ignorancia de los reglamentos de la FIFA y de la CAF podría costarle caro al fútbol argelino. Una exclusión de los organismos futbolísticos internacionales o, como mínimo, una suspensión de dos años de todas las competiciones internacionales.
No corresponde a un tercer país decidir lo que está y lo que no está permitido llevar en la camiseta de un equipo de fútbol adversario. Además, como ignoran las autoridades argelinas, las camisetas de los equipos que participan en las competiciones de la CAF son aprobadas por un comité designado por la CAF. Y la camiseta del equipo marroquí en cuestión ha sido validada por la CAF y nadie tiene derecho a impugnarla. Por otra parte, Argelia corre el riesgo de ser sancionada por mezclar deporte y política, infringiendo el artículo 4 del reglamento de la FIFA.
La teoría esgrimida por algunos medios argelinos, según la cual “los marroquíes han venido a provocar queriendo llevar una camiseta que nunca han llevado”, queda rápidamente desmentida por los carteles de los partidos anteriores jugados por este mismo equipo en la misma competición, que pueden consultarse en la página web de la CAF.
