Alemania reiteró hace pocos días su apoyo al plan de autonomía propuesto por Marruecos en el año 2007. Creen que el reino alauí “ha hecho una importante contribución para lograr una solución política en el marco de las Naciones Unidas”, según afirmaron en un comunicado esta semana. Sin embargo, la intención de la ONU es llevar a cabo un referéndum que los saharauis esperan desde hace tiempo, aunque la organización supranacional está siendo objeto de crítica por todas las partes debido a la incapacidad de llevar su idea a cabo.
La delegación de la sociedad civil saharaui llegó el martes a Berlín para llevar a cabo una serie de reuniones con parlamentarios alemanes. El Bundestag acogió a los representantes saharauis que critican al Frente Polisario por querer postularse como único actor en defensa de los saharauis, afirmando que los únicos representantes legítimos de la población del Sáhara marroquí son los representantes locales electos de la región, de los que forma parte Shaibata Mrabih Rabou, presidente del Centro de Estudios e Investigación sobre Desarrollo y Derechos Humanos del Sáhara, uno de los integrantes de la delegación.
Además, también han cargado contra el Polisario por la dura represión que existe dentro de la organización, algo que ha sido reconocido por el propio Frente Polisario. Brahim Ghali admitió “reparaciones a las víctimas de errores y abusos del pasado”, lo que supone una confirmación de las históricas acusaciones de violación de los derechos humanos por parte del Polisario.
Por primera vez en medio siglo, estas palabras reconocen la comisión de crímenes de lesa humanidad en los campamentos de Tinduf en Argelia contra la población disidente. Además, esta localidad es testigo del reclutamiento forzado de niños para convertirlos en soldado, algo que la delegación saharaui que ha viajado a Alemania también denuncia. Y lo ha hecho concretamente en una conferencia en la Quadriga University de Berlín bajo el nombre de “Detener el reclutamiento de niños soldados en los campamentos de Tinduf por parte del Polisario”.
Esta ponencia ha contado con la presencia de Shaibata Mrabihrabou, vicepresidente del Consejo Provincial de Tarfaya y los emprendedores Zeinabu Ramdan de Laayoune y Limam Boussef de Dajla. La conferencia en la universidad alemana supone el colofón a una semana de reuniones por parte de la delegación saharaui que ha acudido a Berlín precisamente en un momento en el que el problema sobre el Sahara está en boca de muchos políticos alemanes. El Gobierno de Olaf Scholz ha reafirmado su posición del lado marroquí ante las críticas de un sector de la izquierda representada por Sevim Dağdelen, diputada del partido Die Linke (La Izquierda) quien cree que “Alemania ignora el derecho internacional, es hipocresía”.
A pesar de estas palabras, el Ejecutivo de Scholz tiene claro que Marruecos es un importante aliado y, sobre todo, porque la posibilidad de la independencia del territorio “es una posibilidad que ya no se considera”, según Werner Ruf, profesor de relaciones internacionales de la Universidad de Kassel. Aun así, y ante la de delicadeza de este asunto y sus repercusiones en las relaciones con Rabat, Berlín ha desarrollado una importante labor dando voz a un sector de la población saharaui que se desmarca del Frente Polisario y critica duramente los crímenes cometidos por este.
Precisamente estas violaciones en regiones saharauis fueron parte del segundo panel en la conferencia celebrada en Quadriga, donde Khira Suleiman y Ramdan Mesaud Larb abordaron la temática de derechos humanos. Mesaud habló sobre las desapariciones forzadas y los abusos perpetrados por las milicias separatistas en los campos de Tinduf con la complicidad de las autoridades argelinas e hizo una actualización sobre la querella presentada antes los tribunales españoles por la entrada ilegal de Brahim Ghali en España. Por su parte, Suleiman habló desde la experiencia personal, aportando un testimonio acerca de la complicada situación que viven muchas personas en la región que, como ella, se ven obligados a separarse de sus familias.
Zeinabu Ramdan de Laayoune y Limam Boussef centraron sus intervenciones en las oportunidades empresariales de los jóvenes en las provincias del sur y ahondaron en el potencial de la región en lo que respecta a inversiones sostenibles, desarrollo de energías verde y potenciales oportunidades pesqueras y portuarias. En este sentido, la delegación saharaui, además de explicar los problemas y denunciar la situación a la que está sometida la población por el Frente Polisario, también mostraban el futuro y las oportunidades que ofrece la región.