El jefe de Estado Mayor argelino anima a su población a movilizarse contra Marruecos

La crisis diplomática entre Marruecos y Argelia se acentúa. Tan solo un día después de que Marruecos informase, de forma oficial, la ruptura total de relaciones entre el reino alauí y Argelia, el jefe de Estado Mayor del Ejército Nacional Popular (ANP), Said Chengriha, ha llamado a la población argelina a movilizarse con el objetivo de frustrar las supuestas “maniobras desveladas” por parte de Marruecos.
Este llamamiento supone la confrontación directa de Argelia hacia Marruecos, lo que acentúa la tensión entre ambos países en un momento en el cual el norte de África vive una etapa de inestabilidad política.

Según declara la revista El Djeich, este llamamiento, que arremete directamente contra Marruecos, afecta también a “la seguridad en el Sahel y Libia” y motiva la “reanudación de la acción armada por parte del Frente Polisario”.
No es la primera vez que Chengriha arremete directamente contra Marruecos e insta a librar un conflicto contra el mismo. Al jefe de Estado Mayor se le acusa de haber sido uno de los principales responsables de causar una de las mayores crisis diplomáticas en el norte de África y en diferentes medios marroquíes le acusan de tener “un odio colérico” contra Rabat. Asimismo, muchos analistas señalan que este general estaría persiguiendo “librar una guerra abierta contra Marruecos”.

Junto a esto, se le acusa a Chengriha de formar parte de un triunvirato conformado también por los generales Khalid Nezzar y Mohamed Mediéne, responsables de haber ejecutado una purga en el Ejército argelino y de llevar a Argelia a “un callejón sin salida”.
En la actualidad Marruecos y Argelia atraviesan una de sus crisis diplomáticas más complicadas. El pasado agosto Argel anunciaba la ruptura unilateral de las relaciones mientras argumentaba que su decisión respondía a “un cúmulo de circunstancias”. Desde ese momento Rabat ha tratado de tender la mano a Argel sin éxito.

El cierre del gasoducto del Magreb, la posición de Argelia frente a la cuestión del Sáhara Occidental o el cierre del espacio aéreo argelino hacia Marruecos han sido ejemplos de las medidas que se han tomado en solo seis meses como consecuencia de la fractura diplomática.
Así, durante este tiempo Argelia y Marruecos han ido protagonizando una carrera armamentística como consecuencia de la escalada de tensión en la región, aunque desde Rabat señalan que “no se dejaran arrastrar a una guerra con Argelia”.

En este sentido, ambas naciones continúan enfrentándose por la supremacía territorial y política del norte de África. En el aspecto militar, Marruecos ha mejorado sus relaciones diplomáticas con Israel, país del que ha adquirido tanto drones militares como su sistema defensivo Iron Dome. Asimismo, ha tratado de modernizar sus capacidades navales con sus últimas incorporaciones: dos fragatas francesas y tres fragatas de clase SIGMA, que contaría con armamento y sistemas electrónicos de última generación. Además, debido a las buenas relaciones diplomáticas que mantiene con Estados Unidos, Marruecos es el país de la región que más armamento ha comprado al país norteamericano.
Por otra parte, Argelia ha hecho uso de sus buenas relaciones con Rusia para erigirse como el tercer importador a nivel mundial de armamento ruso. En esta línea, el país argelino cuenta con una poderosa fuerza aérea que estaría asentada en la tecnología rusa.
Así, en la actualidad, Argelia se ha conformado como uno de los Ejércitos más poderosos de África, encontrándose sólo por detrás de Egipto.