La Embajada de Estados Unidos en Turquía emitió una alerta de seguridad el viernes, diciendo que recibió informes de un posible ataque a estadounidenses y otros extranjeros, y suspendió temporalmente los servicios consulares.
"La Misión de Estados Unidos en Turquía ha recibido informes creíbles de posibles ataques terroristas y secuestros contra ciudadanos estadounidenses y extranjeros en Estambul, incluso contra el Consulado General de Estados Unidos, así como potencialmente otros lugares en Turquía", dijo la embajada en un comunicado.
La Embajada en la capital turca instó a los ciudadanos norteamericanos a tener precaución, incluso cuando se encuentren en edificios grandes de oficinas, centros comerciales y otros lugares donde se reúnen extranjeros.
Además, la misión diplomática americana publicó que los servicios de ciudadanos y visados se suspenderán de manera temporal en todos los consulados de EEUU en Turquía.
Un portavoz de la Embajada de Estados Unidos dijo: “La misión de Estados Unidos a Turquía emitió este aviso como resultado de nuestra evaluación continua de las condiciones de seguridad. La declaración habla por sí sola. Estamos agradecidos por el apoyo del gobierno turco para garantizar la seguridad de los estadounidenses que viven en Turquía, así como de los ciudadanos turcos que visitan nuestra Embajada y Consulados ".
Hace unas semanas, la compra de armamento ruso por parte de Ankara encendía las alarmas en la OTAN. El secretario general de la Alianza del Atlántico Norte, Jens Stoltenberg viajó a la capital turca para mostrar su preocupación por las consecuencias de adquisición del sistema antimisiles S-400 de fabricación rusa.
"Es una decisión nacional que le compete a Turquía, pero el sistema S-400 no puede integrarse en el sistema de defensa antimisiles de la OTAN. Urjo a Turquía a trabajar con los aliados para encontrar una solución alternativa", señaló Stoltenberg en presencia del ministro turco.
Turquía viene discutiendo con Estados Unidos durante años por el acceso a su sistema de misiles Patriot, y Washington se ha resistido a las demandas turcas de una transferencia de tecnología.
Estados Unidos propuso recientemente proporcionar el Patriot a Turquía como parte de una solución al impasse de los S-400. La idea de Trump es que el país otomano renunciara a estos antimisiles a cambio de los Patriot estadounidenses. Ankara se ha negado a aceptar la propuesta insistiendo en que la amenaza de sanciones estadounidenses no iba a cambiar.
Hasta ahora, la Casa Blanca se ha resistido a la creciente presión del Congreso para exigir retribuciones a Turquía, que alberga instalaciones clave de la OTAN. Erdogan, por su parte, se ha acercado al presidente francés Emmanuel Macron para adquirir también sistemas de defensa aérea de fabricación europea, conocidos como Eurosam SAMP / T.