¿Es realmente un golpe de Estado político-económico lo ocurrido en Brasil con Rousseff?

Diariocrítico/EP

Dilma Rousseff se despidió este viernes del cargo de presidenta de Brasil denunciando ser víctima de un "golpe de Estado" por la acción del Senado, que por 55 votos a favor y 22 en contra aprobó iniciar el juicio político con miras a su destitución. Los princinpales líderes latinoamericanos se solidarizaron con ella y denunciaron también este extremo o, al menos, exigen una restauración inmediata de la presidenta.

El hasta ahora vicepresidente brasileño, Michel Temer, ha tomado posesión del cargo como presidente interino, tras recibir la notificación oficial del Congreso de que Dilma Rousseff ha sido cesada temporalmente a la espera de que se celebre un juicio político en su contra por irregularidades contables.

El senador Vicentinho Alves, del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), el mismo partido de Temer, ha notificado a las 11.27 (hora local) a Temer la suspensión de Rousseff, según ha informado la agencia de noticias pública.

"La misión se ha cumplido, tanto a la presidenta Dilma como al vicepresidente Michel Temer", ha dicho Alves. Según el senador, el nuevo jefe de Estado se ha mostrado "esperanzado" y con "entusiamo".

Rousseff ha defendido su inocencia tras calificar de "farsa jurídica" lo ocurrido, ha denunciado que el nuevo gobierno interino de Michel Temer carece de legitimidad porque no fue elegido en las urnas.

Arropada por todos sus ministros antes de abandonar el Palacio de Planalto, Rousseff ha comparecido horas después de la decisión del Senado para recordar que fue "elegida por 54 millones de ciudadanos" y para defender su "honestidad y dignidad", lamentando que se le está castigando por "un crimen que no cometí" y acusando a la oposición de haber buscado desde el principio apartarla del cargo.

Rousseff ha advertido de que está en juego "la voluntad soberana de los brasileños", y con ello la democracia, y también las "conquistas para los más pobres y las clases medias" que han supuesto los trece años de gobierno del Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil.

"Desde que fui elegida parte de la oposición inconforme pidió recuento de votos, buscó anular las elecciones y luego pasó a conspirar abiertamente contra mí", ha denunciado la presidenta suspendida.

Retos económicos del Brasil

El Senado de Brasil aprobaba ayer someter a la presidenta del país a un juicio político, una decisión histórica en un país sumido en su peor recesión en décadas y golpeado por un escándalo de corrupción al que ahora deberá enfrentarse su sucesor, el vicepresidente Michel Temer. La votación 55 a favor y 22 en contra termina así con más de 13 años de gobierno del Partido de los Trabajadores. Asesores del presidente interino ya han afirmado que el gobierno entrante anunciará una serie de medidas de austeridad para ayudar a reducir el gigantesco déficit presupuestario, equivalente a más del 10% del PIB. Pero hay más retos económicos. Dilma Rousseff heredó en 2010 un crecimiento del PIB del 7,5%. En 2015 la caída del PIB fue del 3,8%. En este mismo período, la inversión ha pasado de registrar un crecimiento anual del 17,9% a una caída del 14,1%; la tasa anual de inflación ha pasado del 5,9% al 10,7%; el tipo promedio de interés de referencia Selic ha subido del 9,78% al 13,27%, y la tasa de paro ha aumentado del 5,3% al 6,9%.

En un comunicado, Moody's señalaba ayer que es probable que la prolongada tensión política complique la puesta en marcha de reformas. "Brasil se enfrenta aún a retos crediticios significativos, incluida la necesidad de revertir la actual contracción económica y lograr una consolidación fiscal destacable", indicó la agencia calificadora. La creciente probabilidad de que Michel Temer -un político de centro considerado más cercano a los empresarios- se convirtiera en presidente, ya había impulsado al índice Bovespa un 22% y al real un 12% frente al dólar, en lo que va del año. Importantes gestores de fondos globales, como BlackRock, incrementaron su exposición a Brasil incluso antes de que la presidenta fuera suspendida de su cargo, aunque en general continúan mostrando preocupación sobre las perspectivas de recuperación de la mayor economía latinoamericana.

Reacciones en América Latina

Los líderes latinoamericanos han expresado su "preocupación" por la inestabilidad política en Brasil provocada por la decisión del Senado de Brasil, con Venezuela a la cabeza.

El Gobierno venezolano ha condenado "categóricamente el golpe de Estado parlamentario en curso, que mediante farsas jurídicas de las cúpulas oligárquicas y las fuerzas imperiales pretende el derrocamiento" de Rousseff "para sustituir la soberanía popular, poniendo en riesgo la Constitución y la democracia".

En la misma línea, Ecuador ha manifestado su "profunda preocupación por los acontecimientos políticos en Brasil" y su "decidido respaldo al Gobierno de Rousseff, legítima depositaria del mandato popular expresado en las últimas elecciones democráticas, y contra la que no pesa, hasta el momento, una sola imputación".

En Bolivia, aunque el presidente, Evo Morales, aún no se ha pronunciado, sí lo ha hecho el partido gobernante, el Movimiento Al socialismo (MAS). "Es un antecedente nefasto para la democracia Latinoamericana. Cuidado, estamos supeditando la voluntad del pueblo brasileño, materializada en las urnas, por una voluntad pactada, corrupta e ilegal", ha dicho el oficialista Víctor Borda.

En un tono más moderado, el ministro de Exteriores de Chile, Heraldo Muñoz, ha destacado las "excelentes relaciones" que su Gobierno ha tenido con la "amiga" Rousseff y ha recalcado su "decidido respaldo al Estado de Derecho, los procesos constitucionales y las instituciones democráticas".

Argentina, por su parte, ha señalado su respeto por "el proceso institucional que se está desarrollando en Brasil" y ha confiado "en que el desenlace de la situación consolide la solidez de la democracia brasileña".

El Ministerio de Exteriores de Cuba ha condenado el "golpe de Estado parlamentario-judicial" contra Rousseff por irregularidades contables. "Hoy se consumó un paso fundamental para los objetivos golpistas. Se trata, en realidad, de un artificio armado por sectores de la oligarquía en ese país, apoyados por la gran prensa reaccionaria y el imperialismo, con el propósito de revertir el proyecto político del Partido de los Trabajadores, derrocar al gobierno legítimo y usurpar el poder que no han podido ganar con el voto electoral", ha dicho en su comunicado.

El secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), Ernesto Samper, ha alertado sobre la existencia de "poderes fácticos" que influyen "de manera peligrosa" en la "gobernabilidad democrática" de la región, en respuesta al 'impeachment'.