El país heleno ha firmado también un acuerdo con Israel por valor de 1.700 millones de euros

Grecia dispara su presupuesto de Defensa por la amenaza de Turquía

photo_camera REUTERS/COSTAS BALTAS - El ministro de Defensa de Grecia, Nikos Panagiotopoulos

Grecia se ha visto obligada, pese a la crisis económica consecuencia de la COVID-19, a aumentar su presupuesto de Defensa, debido a la creciente tensión en el Mediterráneo oriental por culpa de Turquía y el afán expansionista de Erdogan. El país heleno ya era uno de los pocos que mantenía su presupuesto de Defensa por encima del 2% del PIB, según habían acordado los países miembros de la OTAN, sin embargo, parece no ser suficiente.

A mediados de diciembre el Parlamento griego aprobó los Presupuestos de 2021, en los que se contemplaban un aumento del presupuesto de Defensa en un 57% respecto al año anterior. Este aumento, sitúa la inversión en Defensa en un 3,4% sobre el PIB griego, unos 5.500 millones de euros, mientras que lo destinado en 2019 se mantuvo en el 2,3%.

Dentro de este aumento de la inversión, el Gobierno griego, empezando por el primer ministro Kiriakos Mitsotakis y el ministro de Defensa, Nikos Panagiotopoulos, pretenden incluir parte de las nuevas adquisiciones previstas, aunque parte de estas también serán financiadas a través de presupuestos posteriores.

En este contexto de aumento del gasto, es necesario recordar que Grecia lleva invertidos alrededor de los 11.000 millones de euros en el último lustro para modernizar sus Fuerzas Armadas ante la tensión con Turquía y los últimos acontecimientos ocurridos en la zona oriental del Mediterráneo. Atenas ha anunciado también la extensión del servicio militar obligatorio que los griegos afrontan a los 20 años, en tres meses, por lo que durará un año mientras continúen las malas relaciones con Ankara.

Atalayar_Buques Turquía Grecia Francia mar Mediterráneo

Una de las adquisiciones ya confirmadas son los 18 aviones Rafale, de la compañía francesa Dassault, de los cuales una parte serán nuevos y otra serán de segunda mano, y cuyo coste supera los 2.300 millones de euros, a pagar entre este año y el siguiente. De la misma forma, Grecia está en la terna de candidatos que tratan de adquirir el F-35 estadounidense.

A mediados de noviembre, Atenas hizo una petición formal para adquirir entre 18 y 24 aviones F-35 estadounidenses, con el objetivo de sustituir sus actuales F-16. Estos aviones podrían ser los que se ha quedado sin adquirir Turquía, después de ser expulsada del programa debido precisamente a su actitud hostil en la región. Grecia sabe que la Fuerza Aérea es el punto débil de las Fuerzas Armadas turcas, por lo que trata de distanciarse aún más con estas adquisiciones.

Grecia también está a las puertas de adquirir cuatro helicópteros MH-60R Sea Hawk a Estados Unidos y modernizar cerca de un centenar de sus F-16. También está sobre la mesa la adquisición de submarinos alemanes tipo 412 que la armada griega ya utiliza, y la posibilidad de comprar nuevas fragatas, sin estar decidido aún el modelo, que podría proceder de Francia o de Alemania. Por último, el Ministerio de Defensa griego pretende aumentar el número de efectivos de sus Fuerzas Armadas en otros 15.000.

Atalayar_Israel (3)
Acuerdo de Defensa con Israel

El Ministerio de Defensa griego ha firmado con el israelí un acuerdo de colaboración para el desarrollo de una escuela de vuelo para la Fuerza Aérea helena, en el que se incluyen 10 aviones Leonardo M-346 Lavi para la formación de los pilotos griegos, y también la compra de simuladores y otros elementos de apoyo logístico. El acuerdo alcanza una cifra de casi 1.700 millones de euros y tendrá dos décadas de duración.

La escuela de vuelo será construida y mantenida por la empresa israelí Elbit, al haber sido la seleccionada en la licitación internacional llevada a cabo por el Gobierno griego. También está contemplada la actualización de los T-6 de la Fuerza Aérea helena por la misma compañía israelí. Grecia refuerza con este acuerdo la capacitación de sus pilotos, para tratar de marcar diferencias con Ankara.

Se produce así un acuerdo histórico entre ambos países en un contexto regional bastante convulso, en el que tanto Turquía como Grecia vigilan con precisión cualquier adquisición o decisión de este tipo, pues enseguida se trata de reaccionar, algo que mantiene los medios disponibles por ambas Fuerzas Armadas, sobre todo en el ámbito aéreo y marino, bastante parejos.