Marruecos afirma haber desmantelado 84 células terroristas desde 2015
En 2015 Marruecos fundó la Oficina Central de Investigaciones Judiciales (BCIJ) que se trata de un servicio de seguridad de alto nivel encargado de combatir amenazas terroristas, secuestros, tráfico de drogas y crimen organizado. Desde su fundación la Agencia ha arrestado a miles de personas vinculadas con redes terroristas y movimientos extremistas.
El director de la BCIJ, Cherkaoui Habboub, en una entrevista con la agencia de noticias oficial del reino alauí MAP, ha señalado que desde su creación “la Oficina Central de Investigaciones Judiciales ha logrado desmantelar 84 células terroristas, 78 de ellas vinculadas a la organización de Daesh y otras seis partidarias a la ideología de la nebulosa Al-Istihlal wal Faye, que legitima actividades ilícitas para financiar actos terroristas".
Habboub ha lanzado otros datos significativos como que este organismo ha llevado ante la justicia a 1.357 personas, 14 mujeres y 34 menores vinculados a casos de terrorismo. Asimismo, 137 individuos que regresaban de las zonas de combate fueron detenidos, de los cuales 115 provenían de la escena sirio-iraquí, 14 ex miembros del Daesh en Libia, y otros ocho extraditados a Marruecos en el marco de la coordinación entre el Reino y Estados Unidos.
Según ha señalado Habboub estos buenos datos son “el resultado de una cooperación estrecha y activa entre los diversos servicios nacionales de seguridad”, y subrayó que “la política de seguridad de Marruecos se distingue por su eficacia y la armonía entre las instituciones interesadas”.
La acción de la BCIJ, brazo judicial de la Dirección General de Vigilancia del Territorio (DGST), también ha permitido el desmantelamiento de numerosas bandas y redes delictivas activas en la inmigración clandestina y el tráfico internacional de drogas, gracias a las "valiosas" informaciones facilitadas por la DGST. Habboub agradeció la cooperación en la lucha contra el terrorismo de sus socios europeos, árabes y americanos, pero lamentó “el rechazo de Argelia a toda cooperación en materia de seguridad”.
“La negación categórica de Argel de cooperar en la lucha contra el terrorismo, que requiere una estrecha cooperación internacional, repercute negativamente en los esfuerzos incansables del Reino y de la comunidad internacional en la lucha contra el terrorismo, un fenómeno que trasciende las fronteras”, indicó el director del BCIJ.
En este sentido, Marruecos lleva a cabo un papel clave en la lucha contra la erradicación del terrorismo. En el año 2020, el departamento de Estados Unidos elogió la estrategia del Reino en su lucha contra este fenómeno y lo describió como un “importante aliado no perteneciente a la OTAN y un miembro activo de la asociación para combatir el terrorismo”.
Con el fin de reforzar la lucha contra el terrorismo en esta región, Marruecos entabló relaciones con Estados Unidos, lo que ya consideran como “un aliado estratégico”. Desde 2016, Marruecos forma parte de la fuerza multilateral Africom, el Mando combatiente africano del Departamento de Estados Unidos, responsable de operaciones militares en el continente. Asimismo, Marruecos ha asegurado su copresidencia en el Foro Global de la Lucha contra el Terrorismo (GCTF) por dos mandatos más.
La cooperación en el área del terrorismo entre el reino alauí y el país norteamericano perdura a pesar del cambio de Administración, prueba de ello ha sido la repatriación a Marruecos de Abdul Latif Nasir, que se trata del primer preso de Guantánamo que la Administración Biden traslada a su país de origen, como señaló en un comunicado el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.
En el comunicado, el portavoz agradeció el papel de Marruecos para facilitar este traslado, así como su disposición para repatriar a los terroristas desde el norte de Siria, lo que "debería animar" a otras naciones a hacer lo propio con sus ciudadanos que viajan a otros países para unirse a organizaciones terroristas.
