El rey de Marruecos, Mohamed VI, ha enviado un mensaje al monarca español, Felipe VI, deseándole “un pronto restablecimiento y total recuperación” tras su positivo en coronavirus. Mohammed VI también ha trasmitido a Felipe VI, a quien considera “un gran amigo”, “su mejor saludo”, así como “la expresión de todo su cariño y consideración”.
Felipe VI permanecerá aislado durante 7 días debido a su infección. Según ha informado la Casa Real de España en un comunicado, el monarca presenta “síntomas leves”. “El estado general de salud de Su Majestad el Rey es bueno y continuará su actividad institucional desde su residencia”, señaló el comunicado. La reina Letizia y la infanta Sofia, por su parte, continuarán “con sus actividades” y seguirán el protocolo indicado.

A finales del pasado mes de enero, con motivo del cumpleaños del rey de España, Mohamed VI le envió un mensaje de felicitación subrayando “los vínculos de sólida amistad que unen personalmente a los dos Soberanos y a las dos Casas Reales”. Además, el monarca alauí expresó “sus sinceros deseos” de progreso y prosperidad para el “pueblo español amigo”.
Estos mensajes cordiales se suman a otros similares emitidos por el rey Felipe VI con el objetivo de fortalecer las relaciones entre Marruecos y España tras la crisis diplomática que comenzó en abril del año pasado. Asimismo, las declaraciones por parte de los dos reyes demuestran que, a pesar de los problemas políticos, los vínculos entre ambas Casas Reales se mantienen intactos.

Durante la tradicional recepción al cuerpo diplomático en el Palacio Real, el rey Felipe VI expresó su deseo de redefinir la relación con Marruecos sobre “pilares más fuertes y sólidos”. “Ahora las dos naciones deben caminar juntas para empezar a materializar esta nueva relación desde ya”, subrayó el monarca español. En este sentido, indicó que los lazos con el Magreb “tienen un carácter estratégico”. Posteriormente, durante la Feria Internacional de Turismo (FITUR) en Madrid, Felipe VI y Letizia se dirigieron al stand de Marruecos en una visita simbólica.

El presidente de España, Pedro Sánchez, se ha sumado a los mensajes amistosos hacia Marruecos. El mandatario español afirmó que el Reino alauí es “un socio estratégico con el que debemos caminar juntos” durante una rueda de prensa en enero. Por otra parte, José Manuel Albares, desde que juró su cargo como ministro de Asuntos Exteriores, se ha esforzado por establecer un acercamiento con Rabat, reparando los errores cometidos por su antecesora, Arancha González Laya. La exministra respaldó la entrada en España de Brahim Ghali, líder del Frente Polisario, por “motivos humanitarios”. Ghali, además de dirigir un movimiento enfrentado con Marruecos, está acusado en España por genocidio y crímenes contra la humanidad.
Aún así, Rabat sigue pidiendo a Madrid “mucha claridad” respecto a la cuestión del Sáhara. El primer ministro marroquí, Aziz Akhannouch, ha remarcado que, aquellos países que busquen una alianza con Marruecos, deben expresar “fidelidad respecto a la causa nacional del Sáhara”.