El secuestro de una española en los campamentos saharauis de Tinduf pone a Argelia en un compromiso

Por Pedro Canales 
Foto:  Mayuba Mohamed Hamdidaf, la joven de nacionalidad española retenida en contra de su voluntad en los campamentos saharauis de Tinduf.
 
La ciudadana española Mayuba Mohamed Hamdidaf ha sido secuestrada y está siendo retenida en contra de su voluntad por sus padres biológicos en los campamentos de refugiados saharauis de Tinduf, que la han desposeído de su pasaporte y la mantienen en un lugar secreto, ha sabido Atalayar de la organización de defensa de los derechos humanos Alkarama con sede en Ginebra.  Mayuba, que nació en los campamentos de Tinduf en 1990, es mayor de edad, y posee la nacionalidad española. La joven tiene su residencia habitual en el pueblo de Genovés, en Valencia. Su primer viaje a España se produjo en 1999 en el marco de los programas de intercambio por los que cientos de niños de los campamentos vienen a pasar unas semanas de vacaciones en familias de acogida españolas. Mayuba repitió sus viajes cada año hasta 2003 cuando contando con 13 años fue adoptada por una familia española (María Desamparados Viñás Oltra, y Bautista Llopis Vila). En julio pasado Mayuba viajó con su padre adoptivo Bautista a los campamentos de Tinduf, con el fin de visitar a su familia biológica. Durante los primeros días todo pasó normalmente. Bautista se volvió a España una semana más tarde, mientras que Mayuba decidió quedarse un tiempo más en los campamentos, con el propósito de retornar a España el 18 de agosto. 
 
Presiones sobre Mayuba
Sin embargo, una vez que Bautista dejó los campamentos, comenzaron las presiones sobre Mayuba. El padre biológico amenazó con no dejarla volver a España, le arrebató el pasaporte y le prohibió contactar con su familia adoptiva española. Es más, según Jadiya Nemar, miembro de la organización de derechos humanos Alkarama, el padre biológico amenazó incluso con quemar su pasaporte.  Pocos días antes de la fecha fijada para que Mayuba volviese a España, su familia biológica ya había tomado la decisión: Mayuba no viajaría. Le confiscaron el teléfono móvil con el que se comunicaba con España y la encerraron. La familia biológica ampliada de Hamdidaf incluye a miembros influyentes del Frente Polisario, tanto en el Sáhara occidental como en el extranjero, lo que complica aún más la sensibilidad política del supuesto secuestro, máxime tratándose de una hija única. El director jurídico de la Fundación Alkarama, el abogado Rachid Mesli, admite que el asunto es sensible y complicado, ya que involucra al Gobierno español a través de su Ministerio de Asuntos Exteriores, al Frente Polisario como responsable de la seguridad en los campamentos de refugiados, y a las autoridades argelinas puesto que el caso se produce en su territorio. “Sin embargo, cualquiera sea la sensibilidad del tema -estima Mesli- las autoridades argelinas deben reaccionar ya que se trata de un caso claro de secuestro de persona, que es un delito según el Código Penal, artículos 291 y 293”. Alkarama presentó una denuncia formal ante el fiscal en Tinduf el 17 de septiembre lo que presupone que la queja debe ser investigada por la policía dentro de las 24 horas siguientes, pero no ha recibido respuesta, ha declarado Jadiya Nemar. 
 
Situación irritante
El consulado español en Argel está al corriente del caso, así como la oficina de la Relatora Especial de la ONU sobre la Violencia contra la Mujer, que forma parte del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, porque ha sido igualmente informada. El caso de la española Mayuba ha creado una situación muy irritante para las autoridades argelinas, que no pueden aprobar tales comportamientos delictivos, pero tampoco desautorizar públicamente a ciudadanos saharauis en “un asunto familiar”, aunque éstos sean miembros o allegados a las filas del Frente Polisario.  Pero también ha generado inquietud en la propia sociedad civil saharaui que lucha por superar las relaciones sociales imperantes hasta ahora en las que dominaba el machismo, el tribalismo y el menosprecio de los derechos de las mujeres.  De la rápida solución del asunto de la retención de Mayuba en Tinduf, depende en gran parte la credibilidad que el movimiento revolucionario saharaui pretende darse como motor de las transformaciones sociales y culturales de la sociedad.