Con motivo de la celebración del Hajj 1444, uno de los cinco pilares del islam, 2 millones de musulmanes (340.000 oriundos de Arabia Saudí) han completado su viaje más importante. La celebración marca un punto de inflexión para el islam. El primer día de la peregrinación, conocido como el Día de Tarwiyah, fue dedicado por los peregrinos a hacer súplicas para expiar sus pecados de acuerdo con las costumbres del profeta Mahoma. Ofrecieron las oraciones de Dhuhr, Asr, Magreb e Isha, y en el transcurso de las próximas 24 horas finalizarán sus preparativos para pararse frente a Dios (wuqoof) en el Monte Arafat.

Por primera vez desde el comienzo de la pandemia de COVID-19, este año se lleva a cabo un Hajj a gran escala, y las autoridades saudíes han implementado amplios planes para garantizar el movimiento seguro y sin problemas de los peregrinos. Se prevé un total de 2 millones de personas, incluyendo 1,6 millones de extranjeros. La oración del Fajr del martes será seguida por la partida de los peregrinos hacia el Monte Arafat, lugar del último sermón del profeta, que fue pronunciado hace más de 1.400 años.
More than 1 million Muslims from all over the globe are performing Hajj_e_Baitullah.
— Imran Khan (@ImranKhan_Force) June 27, 2023
May Allah accept their Hajj, Ibadaat, Prayers & all kind deeds.
#حج_1444 #عرفات #يوم_الترويه #Hajj23 #Hajj #يوم_عرفة pic.twitter.com/gfBR5e5APv
Desde el amanecer, miles de musulmanes allí presentes acudieron a las proximidades del monte Arafat. La participación ha superado las expectativas del Ministerio de Hajj y Umrah, quienes estimaban cifras menores debido a las altas temperaturas registradas en los días de la celebración. Desde el inicio de la semana la barra de mercurio no bajó de los 43 °C, llegando a alcanzar los 48 °C durante algunos de los rezos. Pese a las dificultades que planteaba el clima, el personal médico estaba en alerta máxima por agotamiento ante posibles golpes de calor.
“Los peregrinos fueron transportados fácilmente y de acuerdo con el cronograma establecido”, según informó el Ministerio.
Como medidas de precaución las instituciones saudíes encargadas de velar por la seguridad de los practicantes junto con la Policía de la ciudad, la defensa civil, los scouts saudíes y otras agencias de seguridad se movilizaron para garantizar la seguridad de los peregrinos. Se utilizaron helicópteros para vigilar los estacionamientos los cuales estaban arrebatados personas.

En el ascenso rocoso al Monte Arafat, también conocido como el “Monte de la Misericordia”, las congregaciones de fieles que sostenían sombrillas contra el sol deslumbrante y recitaban versos del Corán formaban una fila interminable. En Muzdalifah, un valle situado entre Mina y el Monte Arafat, los peregrinos pasarán, donde juntarán piedras para usarlas en un ritual especial al día siguiente.

El día 10 de Dhul Hijjah, después de las oraciones del Fajr, los peregrinos dejarán Muzdalifah y se dirigirán a Jamarat, donde usarán los guijarros para apedrear a los tres pilares que simbolizan al diablo. En la celebración tanto las mujeres como los ancianos que puedan tener serias dificultades en completar los distintos rituales podrán confiar en un hombre de la familia que si pueda realizar dicho camino espiritual.
Luego, como lo hacen después de la Umrah, los hombres deben afeitarse la cabeza mientras que las mujeres deben quitarse un mechón de cabello. El sacrificio de un animal y la distribución de la carne a los necesitados son requisitos adicionales para los practicantes. Aquellos que son incapaces de hacer el sacrificio por sí mismos pueden delegar en un hombre que lo realice por ellos.

Los elogios a la organización de la festividad por parte del Ministerio de Hajj y Umrah desde todas las partes del mundo no tardaron en llegar. Abdulhafeed al-Hamad de Suecia elogió los servicios y los bienes proporcionados por el Ministerio de Hajj y Umrah. Asimismo, la coordinación con el Ministerio de Salud, quien puso a disposición más de 6.000 camas en 32 hospitales del país, ha logrado un alto nivel de satisfacción para el practicante de la fe islámica.
“Hemos tomado todas las precauciones; tenemos médicos aquí listos para ayudar si es necesario”, dijo Hafizullah, un peregrino de Afganistán a Arab News.
Yusifu Kargbo, de Sierra Leona, expresó: “Este es un Hajj increíble. Es difícil describir mis sentimientos y emociones. Estoy viviendo una gran alegría”.
“Admiro la cálida hospitalidad que nos brindaron durante la peregrinación. Fuimos recibidos muy bien en Yeda a nuestra llegada, y durante toda la estadía experimenté un ambiente muy solidario”, indicaba Nazim Hussain Jafri, peregrino procedente de Nueva Delhi, India.
Mohammed Maarouf, natural de Siria y residente en Alemania, señaló: “Gracias al todopoderoso, experimenté un Hajj muy bueno. Está muy bien organizado por el Gobierno saudí”.