La muerte del futbolista camerunés Albert Ebossé Boojongo avergüenza a los argelinos

Por Ahmed Brahim

Foto: Albert Ebosséç Boojongo, delantero de la Jeunesse sportive de Kabylie (JSK), murió tras recibir una pedrada en la cabeza durante un partido de fútbol.

El pasado sábado, Albert Ebossé Boojongo, delantero camerunés de 26 años, murió en el estadio de fútbol de Tizi Uzu, capital de la Gran Cabilia, tras recibir un golpe en la cabeza con una piedra  lanzada desde la grada de su propia afición. Ebossé Boojongo era el máximo goleador de la Liga argelina con 17 goles y el día que falleció había sido el autor del tanto de su equipo, la Jeunesse sportive de Kabylie (JSK), que perdió en casa 1-2 frente al USM Alger. El jugador africano murió en la ambulancia durante el traslado al hospital de Tizi Uzu tras haber sufrido un traumatismo craneoencefálico. El mismo día de su muerte, por la mañana, el joven delantero de origen camerunés  había sido padre. Muchos argelinos expresaron su “vergüenza” por lo ocurrido. Murad, un joven de 19 años aficionado al fútbol y residente en Argel, dijo a Atalayar que la muerte de Ebossé Boojongo “nos debe hacer reflexionar, porque el deporte debe ayudarnos a romper barreras y no a generar violencia”. Abundando en la misma línea, un aficionado de la JSK de la ciudad de Tizi Uzu destacó que “las autoridades futbolísticas argelinas tienen que tomar medidas para frenar la violencia en el fútbol, porque es un cáncer que avanza peligrosamente en el tejido social del país”. La indignación por esta absurda muerte es un sentimiento dominante entre los aficionados argelinos. El presidente de la Confederación Africana de Fútbol (CAF), Issa Hayatou, pidió “sanciones ejemplares” contra los violentos. “Pienso en la familia y en los amigos de este muchacho que hacía su trabajo pacíficamente y se fue al extranjero por pasión futbolística”, señaló Hayatou a través de un comunicado. Por su parte, el presidente de la Liga Nacional argelina, Mahfud Kerbadj, calificó la muerte del delantero camerunés de “catástrofe para el fútbol nacional”.

Mucho talento
Mahfud Kerbadj rindió un homenaje al futbolista fallecido, que “conquistó el corazón de millones de argelinos” y era una persona con “mucho talento y grandes cualidades humanas” y “muy apreciada por sus compañeros y adversarios”. El club y la Federación Nacional argelina de fútbol decidieron entregar una indemnización de 100.000 dólares a la familia de Ebossé, y ésta  también seguirá percibiendo el sueldo del delantero hasta que finalice su contrato. “Han matado a Ebossé”, titularon los periódicos deportivos argelinos. Un miembro de la directiva de la JSK expresó su profundo malestar porque al club cabila “lo han cubierto de vergüenza”. El ‘Huffington Post Maghreb’ destacó que “la muerte de Ebossé es una catástrofe infamante” para Argelia, según escribió su director, Ihsane El Kadi. Así las cosas, el ministro de Deportes, Mohamed Tahmi, denunció el “crimen” cometido contra el delantero de la JSK y el Ministerio del Interior anunció la apertura de una investigación policial. Además, la Liga Nacional de Fútbol ordenó el cierre del estadio de Tizi Uzu.