Vientos del pueblo
(En mis manos levanto una tormenta
de piedras, rayos y hachas estridentes
sedienta de catástrofe y hambrienta)
M. Hernández. "Elegía" a R. Sijé.
- La gota fría
- Con los pies de barro
- Cronología de una encerrona
- La izquierda violenta
- Dimisiones en todas direcciones
- Plan Hidrológico Nacional
- Asalto a TVE
Los Reyes con el pueblo, andando sobre rastrojos de difuntos en Paiporta. Acompañando a las personas abandonadas y desesperadas por los políticos cuando necesitaban abrazos, cariño y diálogo. 225 muertos y 50 desaparecidos.
[Un manotazo duro, un golpe helado, un hachazo invisible y homicida, un empujón brutal te ha derribado]
Trump ha vuelto y Sánchez continúa… huido. Estos dos últimos próceres unidos por la venganza, el desprecio y el odio acumulados para mandar sin límites, dispondrán de nuestras vidas y haciendas sin contrapoderes. Los dueños absolutos de nuestro tiempo. El socialismo “woke” retrocede.
Donald y Pedro son las caras autoritarias de una misma moneda que nos helará el alma, el corazón y la cartera durante los próximos mil días. Compartamos el dolor y la esperanza con rebeldía comunera hasta ser llamados a las urnas. ¿Qué hemos hecho los norteamericanos y los españoles para merecer esto? Votarlos en demasía.
Yo no, pero los hay que sí. Y mientras el marido de Begoña se paseaba en coche engalanado de flores en el Bollywood de la India, el dios de la lluvia lloraba desesperadamente sobre Valencia.
[Nunca medraron los bueyes en los páramos de España]
La gota fría
DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos), la gota fría de toda la vida, se ha llevado por delante casi doscientas treinta vidas. La tragedia humana, económica y social es tan grande que ya casi no importa.
Los gobiernos central y autonómico llegaron demasiado tarde. Hará falta al menos una década para construir una normalidad, con los nuevos horizontes, y unos 100.000 millones en ayudas, si no se desoye otra vez más a los técnicos de las Confederaciones del Júcar y del Segura que llevan exigiendo desde hace cinco lustros reformas estructurales para minimizar en lo posible estas riadas incontrolables. 800.000 afectados. 52.000 hogares destruidos.
Únicamente el pueblo, vecinos, voluntarios y algunos alcaldes cumplieron con su deber de ofrecer ayuda urgente a los más necesitados. La solidaridad está en nuestro ADN. El pueblo salvó al pueblo, junto al rey Felipe VI y la reina Letizia.
El pasado martes comprobamos que España es una nación y un Estado. Falló el Gobierno Sánchez, interesado en hundir políticamente al Ejecutivo valenciano. “Esta es nuestra oportunidad”, anotaba la ministra de Igualdad, Ana María Carmen Redondo, en su “Moleskine” de trabajo. Y falló la Generalitat.
[No hay extensión más grande que mi herida, lloro mi desventura y sus conjuntos y siento más tu muerte que mi vida]
Carlos Mazón, tendrá que explicar esa “comida de negocios” del día 29 que le impidió incorporarse al comité de crisis hasta pasadas las siete de la tarde. Y el próximo jueves tiene cita en las Cortes. De su transparencia depende su futuro.
La vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, ausente durante nueve días y quinientas noches se presentó sin avisar en su casa de la SER para, en 13 minutos, de entrevista-masaje, acusar a Mazón sin que tuviera una sola palabra de solidaridad con las víctimas. Ni una expresión de consuelo. Otra Bacigalupa consorte pata negra.
La responsable máxima de la Meteorología ni se ha dignado visitar a los damnificados ni dar el pésame a sus familias. Muchos lo han perdido todo.
Su agenda oficial estaba vacía durante más de una semana. No sabemos con quién almorzó ese día histórico ni los siguientes; prepara su examen a comisaria europea -una canonjía vitalicia-mostrándose, como Calviño, partidaria de apoyar en su futuro mandato la energía nuclear para obtener el voto de Francia.
Mientras tanto, en nuestro país esta energía limpia, según la UE, está sentenciada a muerte, para seguir dependiendo más de Putin. Esperemos que el PP vote en contra de la candidata Ribera como hizo el PSOE con Miguel Arias Cañete hace ahora 10 años cuando optó a la Comisaría de Energía.
Aquí, paralelamente la Moncloa encubre el cierre de la central nuclear de Almaraz en Cáceres cuando para el desarrollo de la IA tendremos que multiplicar por seis nuestra potencia energética antes de 2030.
Don Pedro “estoy bien”, una vez más ausente del Control al Gobierno en el Congreso de los Diputados. Lleva meses huido del Senado. Estará en la Cumbre Climática de Azerbaiyán, estableciendo doctrina contra los “negacionistas” y la extrema derecha. La ultraderecha es la culpable de esta maldita DANA. Como la de 1957 en la Valencia franquista que arrasó el rio Turia y provocó 300 muertos.
Señor presidente, no nos hable de gobernanza ni trate de engañarnos como hizo en la pandemia de la COVID-19, cuando admitió su gravedad y nos confinó anticonstitucionalmente el día después del 8-M para que Begoña y sus amigas moradas celebraran el Día de la Mujer empoderada.
¿Qué tiene que suceder para que la Moncloa declare el nivel 3 de alerta máxima y movilice todos los recursos de que dispone el Estado? ¿Un ataque nuclear de Corea del Norte? ¿Una explosión en Vandellós III? ¿Un levantamiento en Madrid como el 2 de mayo de 1808? ¿A cuántas provincias tiene que afectar la devastación? La irresponsabilidad de este presidente no tiene principio ni fin. Es un tornillo de Arquímides para achicar agua. La culpa es siempre de los otros.
Como socialdemócrata reconvertido al comunismo plurinacional, este tipo sin empatía pasará a la historia como el fugitivo que siempre huye o se escaquea en los momentos difíciles. A veces necesita cinco días más para reflexionar que va a seguir… hasta la eternidad. Y más allá.
La frase “si necesitan recursos que los pidan” figurará en su testamento político. Y en su tumba, aunque sus cenizas las esparzan sus deudos con rosas en el mar. Hay que tener mala fe, poca empatía y ser mala persona para no enviar en el minuto uno a los Ejércitos de Tierra, Mar, Aire y del Espacio. Y, además, chantajeando al PP con los Presupuestos Generales/25.
Margarita Robles se despachó como lo que es: una funcionaria con alma de esclava siempre sirviendo a su señor feudal. ¡Qué predisposición tan generosa cuando sucedieron las inundaciones de Libia y los terremotos de Turquía y Marruecos! La ayuda militar y logística estuvo lista en 24 horas.
Pero, claro, en Valencia no mandaba el embajador Puig, que elaboró una ley para impedir que se mejoraran las infraestructuras para paliar las torrenteras de la zona. No, Levante liquidó al Gobierno progresista el 28-M del 23. Y había que acabar con el PP.
En Interior, el cínico Marlaska, rechazó la ayuda francesa de 250 bomberos especialistas en rescates. “No necesitamos nada”, contestó el ministro a su homólogo galo. A Ucrania, Argentina y El Salvador ni se les agradeció el gesto.
Once días después ha pedido refuerzos urgentes a la Unión Europea ante la magnitud de este mar de tablas, cañas, murallas de chatarra y de lodo. Mucho lodo. Un Gobierno enfangado de miseria.
Los aviones de reconocimiento y los drones confirman que las 52.000 hectáreas anegadas forman parte de la antesala del infierno. Ello explica la ira y la desesperación de los afectados e incluso los abucheos a las autoridades. Por la inacción política y deliberada de este Gobierno social-comunista, nadie movió un dedo durante las primeras 100 horas. Imperdonable. Nuestra Yoli abrió la boca para hablar de “pandemia”.
Recordamos su axioma de jurisconsulta: “Hay que adaptar las condiciones meteorológicas a los puestos de trabajo”. Empiece en Valencia. Im-presentable. Los voluntarios llegaron de todos los puntos cardinales de la España real.
[Asturianos de braveza, vascos de piedra blindada, valencianos de alegría y castellanos de alma]
Menos mal que la UME estuvo allí el día después.
Las ruedas de prensa desde Moncloa del comandante en jefe de la Unidad Militar de Emergencias eran un trágala como los de Fernando Simón en el “parte” de la pandemia sin expertos.
Sánchez siempre se parapeta en los militares, como ya hizo en la COVID-19 cuando el máximo responsable de la Guardia Civil aseguró que la misión de la Benemérita era monitorizar y defender la imagen del Gobierno ante la opinión pública. Fue ascendido a la Embajada española en Washington.
Con los pies de barro
¿Cuántos muertos se hubieran salvado sabiendo como sabía el Gobierno que iba a llover a cántaros ese martes? ¿Por qué la AEMET no detectó, como hizo la agencia francesa de Meteorología que la DANA era excepcional y que el caudal podría llegar a superar tres veces el del Ebro?
Lo más aproximado a la verdad es que los socios parlamentarios de don Pedro, (comunistas, separatistas, filoterroristas y golpistas) no soportan al Ejército trabajando codo a codo con el pueblo ayudando a los más vulnerables y mostrando orgullosos la bandera de España en sus uniformes. Sánchez se arrugó. Otra vez.
Como Zapatero, el patriotismo de don P. Sánchez Pérez-Castejón es un patriotismo de hojalata. Sin empatía sin humanidad. Solo el apego al poder es su fortaleza. Depende de todos sus compañeros de viaje a ninguna parte.
Recordemos que cuando estuvo de vacaciones en Lanzarote fue incapaz de visitar un centro de refugiados. Eso sí, agasajó postineramente a Zapatero y a Illa. Tres tipos a cuál más peligroso. Ahí sigue empantanado el problema de la inmigración solo para maltratar al gobierno canario-popular.
Este tipo no es un líder; es un oportunista irresponsable. Sánchez jamás se le ha escuchado públicamente pedir perdón por sus pecados políticos y por sus mentiras permanentes. No posee ni una de las siete “ces” del hiperliderazgo político: “Coherencia, convicción, credibilidad, confianza, comunicación, compromiso y conciencia”. Sánchez es Sánchez.
Este presidente no inspira ni influye, ni persuade ni guía a los individuos: solo los insulta y los corrompe merced a su dogmatismo sanchista. Exige lealtad hasta la muerte mientras afila la guillotina de la indiferencia. Casi “no conoce” a Ábalos. Nadie como Sánchez ha sacado más rentabilidad política a la polarización con su muro de la vergüenza.
Esta es una Administración con los pies de barro. Puede que por unos días, el inquilino de la Moncloa se haya olvidado de su pesada mochila de corrupción: Begoña, David, Alvarone, Koldo, Ábalos, Aldama, Tito Berni, Delcy o las implicaciones de Óscar Sánchez Gil, jefe de antiblanqueo en la Policía Nacional y detenido hace unas horas en Madrid por su relación con el narcotráfico ecuatoriano. Se han incautado 13 toneladas de cocaína y 20 millones ocultos en las paredes de su casa y 1 millón más a su pareja también policía.
El ministro Marlaska debe explicar la basura de su Ministerio. El fango y los bulos hieden todo el departamento salpicando a instituciones tan nobles como la Guardia Civil y la Policía Nacional. La corrupción vuelve. El mal sembrado a voleo siempre germina.
Cronología de una encerrona
Ahora ya sabemos que doce horas antes de que la DANA descargara sin piedad sobre la Comunidad Valenciana y sobre Castilla-La Mancha, Seguridad Nacional advirtió a la Moncloa de la gravedad de la situación. Montero presidió un comité de crisis. ¿A quién informó? A nadie.
La visita urgente del presidente del Gobierno a Valencia para darle el “abrazo del oso” a Mazón sirvió para endosarle al excantante eurovisivo la patata caliente de la tragedia colectiva. Le engañó como a un indio. ¿Por qué aceptó el presidente valenciano esa corresponsabilidad que excedía a sus competencias? Por la mala conciencia de las horas perdidas en el día de autos con su periodista de cabecera.
Que el secretario de Estado, Hugo Morán, llamara desde Cali (Colombia) para anunciar a la consejera de Interior que existía la preocupación por la posible rotura de la presa de Forata, eclipsó el peligro real del barranco del Poyo.
En la reunión de crisis celebrada en Valencia entre la delegada del Gobierno, miembros de la Generalitat, de la UME y de las cuencas hidrográficas que vierten al Mediterráneo, nadie se percató del peligro.
El correo electrónico de la Confederación del Júcar explicaba escuetamente, “a quien corresponda”, que la crecida del barranco y del río Magro iban en aumento. Pasadas las 20:10 se ordena la alerta máxima cuando los ríos y más de 20 pueblos estaban ya inundados; y las víctimas superaban el medio centenar. Forata retuvo 37.000 millones de litros de agua. La ruptura hubiera significado el apocalipsis.
La consejera de Emergencias de la Generalitat, Salomé Pradas confirmó nueve días después de la tragedia que desconocía hasta la tarde de la DANA que se podían enviar alertas a los móviles. ¡Dios mío, en qué manos estamos!
La radio y la televisión nos han permitido compartir las tragedias con tanta cercanía como si hubiéramos estado en directo en esa guerra interminable. Hemos llorado con los valencianos, los castellanomanchegos, los andaluces y los catalanes porque nos sentimos orgullosos de ser españoles.
La visita de los Reyes a Paiporta, insistimos, nos ha reconciliado con la solidaridad, con el pueblo, con la Nación y con el Estado. Cuando Felipe VI y la reina Letizia se acercaron al pueblo para escuchar la ira y el dolor de unos ciudadanos abandonados por los Gobiernos nacional y autonómico, comprendimos que el diálogo es el misil más poderoso para entendernos y continuar juntos en la unidad. [Andaluces de relámpagos, nacidos entre guitarras, extremeños de centeno, gallegos de lluvia y calma]
La huida del presidente Sánchez contrasta con la valentía de Adolfo Suárez, en la tarde noche del 23-F/81 cuando Tejero disparó al techo del Congreso y el presidente permaneció impasible en el escaño. Años después me confesó en una campaña electoral del CDS que “estaba preparado para que pudiesen atentar contra él”. Siempre se negó a utilizar aquella imagen potente para su provecho electoral. Fue un estadista.
Pedro Sánchez “estoy bien” aseguró mientras anunciaba las primeras medidas de apoyo rápido (10.600 millones) que los que atacaron su coche blindado eran elementos orquestados de extrema derecha. Un bulo como la “navajita plateá” de la exministra Reyes Maroto o las balas de la Guerra Civil a Marlaska y Pablo Iglesias. Bulos archivados.
La Fiscalía ha pedido a la Audiencia Nacional que los tres detenidos y puestos en libertad por supuesta agresión a la autoridad sean acusados poco más o menos que de “tentativa de magnicidio”. Lo que las cámaras recogen una y otra vez es que alguien lanza un palo de escoba que roza a un fotógrafo. Su huida, a petición de los escoltas, contrasta con los mismos consejos a los Reyes, que permanecieron en la calle junto a su pueblo.
Sorprendentemente la Fiscalía General no ha tomado ninguna iniciativa para conocer a las personas que arrojaron barro a los Monarcas. La Casa Real se ha opuesto a que se investigue a los indignados.
[Catalanes de firmeza, aragoneses de casta, murcianos de dinamita frutalmente propagada, leoneses, navarros, dueños del hambre, el sudor y el hacha]
La izquierda violenta
La izquierda y la extrema izquierda valencianas, aún con los muertos sin enterrar, salió este sábado a las calles de la ciudad del Turia para protestar por la mala gestión de Carlos Mazón en la DANA de finales de octubre. No les faltaba razón. La consigna era clara: ¡Mazón dimisión! Unas 100.000 personas según la Delegación del Gobierno ocuparon el centro de la ciudad e intentaron quemar la puerta del Ayuntamiento que resultó dañada.
La izquierda anexionista catalana y los cuadros de Compromìs fue la “muchachada” más violenta. “¡Barreremos a Mazón como al barro!”, coreaban con ferocidad y odio mientras en pancartas de encargo de agitadores profesionales se podía leer: “¡No estamos todos, falta la gente a la que habéis ahogado!” La respuesta del PSOE no se hizo esperar: moción de censura en Requena al PP con los muertos todavía de cuerpo presente.
Dimisiones en todas direcciones
El mayor desastre natural de España no ha hecho más que empezar. La DANA ha abierto una herida de difícil cicatrización. La falta de coordinación entre las administraciones ha posibilitado este caos. Nada hemos aprendido de la pandemia, de Filomena, de las inundaciones del Ebro y del Guadalquivir, menos del volcán de La Palma o de las inundaciones en Baleares y Cataluña.
Tiempo habrá para exigir responsabilidades. Y que las dimisiones o ceses se produzcan en todas direcciones. Lo urgente es despejar las calles, abrir los colegios, los restaurantes, los negocios, pero antes, reconstruir las infraestructuras viarias, la luz, el agua, el gas, el teléfono, internet y dar techo y comida a todas las personas que han perdido sus casas. El Plan DANA 24 no puede dejar a ningún ciudadano en la cuneta.
La izquierda ha aprovechado esta tragedia para ganar la calle porque la victoria de Trump es demasiado alargada. Como ya adelanté hace dos semanas, la UE, la OTAN, Ucrania y en especial España serán los países más perjudicados por el trumpismo. Es hora de despertar y de pagar, euro a euro, la Seguridad y la Defensa común. La libertad y la democracia nunca son gratis.
Plan Hidrológico Nacional
Las imágenes de guerra que hemos vivido por las televisiones y los móviles nos marcarán muchos años. El heroísmo nos engrandece como seres humanos. Sobrevivir a la pérdida de seres queridos y de las pertenencias materiales de toda una vida, necesitará de una terapia individual y colectiva. Ya nada será igual porque la mayor parte de los recuerdos se los ha llevado la riada. Pero hay que volver a empezar.
Emiliano García Page, tras recuperar y llorar a sus cinco muertos en Letur (Albacete) ha pedido cuando el asfalto vuelva a pisarse en los pueblos afectados, que se cree una Autoridad Independiente Nacional para gestionar todas las crisis y las catástrofes humanitarias futuras.
Recuerdo que ya se anunció un organismo similar para coordinar la Salud Pública en caso de pandemias. Nunca más se supo. Es loable la idea, pero ineficaz. Pensar que ese organismo va a mandar sobre la UME, los Ejércitos, la Policía y la Guardia Civil no hay Marlasca ni Robles que lo suscriban.
Sí sería deseable que PSOE y PP acordasen con urgencia en el Parlamento un Plan Hidrológico Nacional que limpie los ríos, construya presas y pantanos para evitar las riadas como ya hacían los sumerios en el siglo IV antes de Cristo.
Este Pacto -adelanto- sería imposible con el doctor Sánchez en el puente de mando porque pretende “federalizar” hasta la Agencia Tributaria y, si lo dejan, descentralizar los Ejércitos y trocear España en una docena de repúblicas bolivarianas. La España plurinacional de nuestro líder se parecería a los Reinos de Taifas.
[Crepúsculo de los bueyes está despertando el alba]
Asalto a TVE
Termino con una información que debería quedar escrita en la Historia General de la Infamia. El pasado día 29, el Congreso, a iniciativa del PP consideró que dada la magnitud de la catástrofe causada por la gota fría -se contabilizaban ya medio centenar de muertos- se suspendiera la sesión del control al Ejecutivo con una batería de preguntas sobre la corrupción que salpica a la Moncloa.
El PSOE, molesto porque el tanto político se lo apuntaban los populares, aceptó la propuesta y se dio por finiquitada la jornada, como así se hizo en el resto de los parlamentos regionales y ayuntamientos. Se guardó un minuto de silencio. Pero… la maldad del PSOE nunca descansa.
El presidente en persona desde la India había ordenado que se votaran a los 11 comisarios políticos del nuevo Consejo de Administración de RTVE. La presidenta Francina Armengol, siguiendo las instrucciones directas del plenipotenciario Bolaños reunió con urgencia a la Junta de Portavoces, con mayoría Frankenstein, y convocó una hora después un “pleno extraordinario” con un único punto en el orden del día: “Nombramiento de los 11 miembros del Consejo de Administración de la RTV Pública”.
Y así se hizo, después de que la representante de Sumar anunciara públicamente que “los diputados no están para limpiar las calles del barro y del fango”. Patxi López sentenció: “Estamos aquí para redactar leyes”. PP, VOX y UPN abandonaron el hemiciclo. Por dignidad.
¿Le explicarán los socialistas valencianos a sus paisanos olvidados y abandonados a su suerte con el agua al cuello que era más importante votar el asalto a RTVE que respetar su dolor, el de los muertos y el de las víctimas? ¿Y los 8 socialistas castellanomanchegos? ¿Y cómo le contarán esa hazaña de indignidad a sus electores y a sus paisanos los socialistas andaluces? Votando comisarios con decenas de muertos inocentes, ahogados en el fango político.
Horror, infierno, impotencia, pillaje, miedo… Mucho miedo. Todo el dolor del mundo les pertenece a los afectados por esta DANA criminal que nos ha enseñado algo importante: que somos españoles, un pueblo unido, con una juventud comprometida con la solidaridad, una nación de ciudadanos libres e iguales.
Hemos descubierto, como el 3 de octubre de 2017 que tenemos una Monarquía constitucional y una Carta Magna que sobrevivirá a todos los gobiernos incompetentes y golpistas. [Vientos del pueblo me llevan, vientos del pueblo me arrastran, me esparcen el corazón y me aventan la garganta]
Nota: Para comprender mejor la tragedia de la DANA sería deseable leer los poemas “Vientos del pueblo” y “Elegía a Ramón Sijé”, de Miguel Hernández (Orihuela, 1910-1942) Miguel vive.