Lobos con piel de cordero

Roberto Mateos

Los recientes ataques contra población civil ocurridos en Orlando y Niza, por parte de individuos auto-radicalizados y sin ningún nexo aparente con Daesh, nos muestran una amenaza real a la que los países occidentales no están acostumbrados.  En ambos casos, individuos con perfiles antisociales, con problemas y posibles atisbos de enfermedad mental, se unen al carro del Daesh para asesinar de forma violenta y cruel a personas inocentes y sin posibilidad de defenderse y así, conseguir ser portada en todos los periódicos del mundo. El Daesh aprovechando la situación hace suya la reivindicación del atentado llamándolos soldados del estado islámico, algo irónico y sin sentido en el caso de estos dos asesinos,  cuando el propio Daesh en Siria decapita homosexuales como es el caso del asesino de Orlando y a personas que no cumplen el Ramadán como en el de Niza. 

Estos individuos en un principio no pertenecen a células terroristas, ni durmientes ni activas y tampoco han combatido en Siria o Irak, se sienten atraídos por la feroz propaganda y por el falso ideal que promueve el Daesh descargando su odio contra la sociedad que les rodea.

Existen varias publicaciones de grupos terroristas yihadistas, Inspire es una de ellas, se trata de una publicación de muy alta calidad gráfica en la que se pretende adoctrinar  y captar adeptos fomentando el odio hacia Occidente y sirviendo de ideario para sus propósitos. En varios de sus números se enseñan técnicas para asesinar a aquellos que no comparten su fanática ideología, en uno de sus primeros números se dice que si no se poseen armas convencionales se pueden utilizar otras formas para matar, una de las que se describen consiste en atropellar a personas con vehículos para causarles la muerte.

Europa se enfrenta a una nueva forma de terrorismo a la que no está preparada, En el caso de Francia el Estado de Emergencia instaurado desde noviembre de 2015 no ha servido para evitar el asesinato de un policía y su mujer en junio de este año en Niza, ni tampoco para evitar o detectar la masacre del 14 de julio, también en Niza, con un resultado de 84 muertos y más de 200 heridos. Detectar "lobos solitarios" no es una tarea fácil para unos estados hiper-legislados, es necesario un cambio radical de mentalidad, ser conscientes de que se está librando una guerra en la que el enemigo está entre nosotros y sin embargo no sabemos quién es y  que es muy probable que estos hechos no hayan hecho más que empezar. 

La colaboración ciudadana, cambios legislativos, y la incorporación activa de la sociedad civil en la seguridad pública son solo algunas de las medidas que se han de instaurar para detectar a estos lobos con piel de cordero, este tipo de medidas y otras utilizadas en países como Israel, con amplia experiencia en este tipo de atentados y situaciones, deberían de ser tomadas en consideración por los gobiernos europeos, este problema es un problema que atañe a todos y todos debemos estar involucrados.