Argelia prohíbe las importaciones de trigo de Francia
El creciente impulso de Marruecos en la escena mundial y los reconocimientos de los principales países del mundo del Plan de Autonomía marroquí sobre para el Sáhara Occidental como el único plan “serio y creíble” para solventar el diferendo saharaui ha provocado que el Gobierno argelino tome la decisión de dejar de comprar trigo francés.
En un movimiento que aislará más a Argelia, el Ejecutivo de Abdelmadjid Tebboune ha instado a las compañías argelinas que no pujen por trigo proveniente de Francia.
Una acción de la cual no se conocerán las consecuencias, pero que será perjudicial para la economía argelina ya que es uno de los países del mundo que más trigo importa. Además, su principal proveedor solía ser la República francesa, lo que agrava aún más la situación para la economía argelina.
Argelia llevó a cabo una licitación en la que la Oficina Interprofesional de Cereales de Argelia (OAIC) adquirió más de 500.000 toneladas métricas, según cifras estimadas por los comerciantes. En las licitaciones de la OAIC, los vendedores pueden elegir de dónde proviene el grano dentro de una lista de orígenes aprobados, entre los que se incluye el trigo francés.
Las empresas francesas no fueron invitadas a participar esta vez, y a las empresas no francesas se les pidió que no ofrecieran trigo francés como opción de suministro. Por el momento, la OAIC y los Ministerios de Comercio Exterior y Agricultura de Francia no han dado respuesta aún a las solicitudes de comentarios.
Expertos políticos afirman que la decisión proviene de la nueva posición de Francia sobre el Sáhara Occidental, que se contrapone con los deseos de Argelia de la creación de un Estado independiente.
“La posición de París es que el presente y el futuro del Sáhara Occidental están en el marco de la soberanía marroquí”, afirmó Emmanuel Macron, presidente de Francia.
La prohibición de la compra de trigo francés no fue la primera medida tomada por Argelia. Días después de que Macron enviara una carta al rey de Marruecos, Mohamed VI, en su vigesimoquinto aniversario al frente de la monarquía alauí, Argelia retiró a su embajador en París, alegando que la decisión francesa “se tomó con gran imprudencia y sin tener en cuenta las consecuencias”.
Misma situación sucedió con España cuando en marzo de 2022 el Ejecutivo de Pedro Sánchez, presidente del Gobierno de España, anunciara su respaldo al Plan de Autonomía de Marruecos sobre el Sáhara Occidental. Argel también retiró a su embajador en Madrid, poniendo fin a un tratado de amistad de dos décadas con España como protesta por las declaraciones del Gobierno en apoyo a la posición marroquí.
Además del trigo, Francia y Argelia tuvieron problemas diplomáticos tras la retención de camiones con la pasta de chocolate El Mordjene Cebon aludiendo que no cumplían con las medidas sanitarias correspondientes para los miembros no pertenecientes a la Unión Europea que deseen exportar productos a la región.
Pero no es la primera vez que sucede esta situación. Hace tres años, Francia ya fue excluida de las licitaciones de trigo en Argelia. Esto ha llevado a que el trigo ruso, proveniente del mar Negro, domine el mercado argelino de importación.
La medida reciente podría fortalecer aún más esta posición de dominio, cuando los precios del cereal están en ascenso por las malas condiciones climatológicas de los principales productores del mundo.
Las ventas de Canadá o Australia, dos de los grandes productores y exportadores, se está paralizando por miedo a una posible escasez. En apenas un mes, los cargamentos de trigo han pasado aumentado su precio una media de 15 dólares por tonelada.
En Estados Unidos, concretamente en el estado de Kansas, donde se produce el 94 % del trigo americano, la sequedad del suelo ha reducido la producción a niveles alarmantes, un 48 % menos. El Departamento de Agricultura de Estados Unidos estima que las reservas globales de trigo llegarán a su nivel más bajo en nueve años, con 257,22 millones de toneladas en el año 2024-25.
La consultora Strategie Grains predijo que la cosecha de trigo de la UE para 2024-25 será la más baja en doce años debido a las malas condiciones climáticas. La Bolsa de Cereales de Rosario en Argentina también prevé que la cosecha del país en 2024-25 sea de aproximadamente 19,5 millones de toneladas, lo que representa una reducción del 5 % en comparación con la estimación anterior.
En este contexto, las consecuencias para la población argelina pueden ser devastadoras ya que se trata del mayor comprador del mundo de trigo.
