La Guerra en Ucrania está repercutiendo gravemente en las economías mundiales. Rusia, en respuesta a las severas sanciones que les están imponiendo las organizaciones mundiales por su acto bélico, está bloqueando la salida de varios productos esenciales para la sociedad. Uno de ellos es la gasolina, la cual, todos los países del mundo están viendo como cada vez se incrementa más. Marruecos depende de los proveedores rusos para abastecerse y tras la huelga convocada hace una semana tras este aumento, el Gobierno marroquí ha anunciado que, finalmente, financiará a los transportistas para que sigan realizando su trabajo.
“Ante esa situación excepcional, el Gobierno ha optado por intervenir para apoyar a los profesionales del sector con el fin de preservar el poder adquisitivo de los ciudadanos”, anunció Mohamed Abdeljalil, ministro de Transportes del Reino.
La decisión se ha tomado tras un encuentro entre el Ministerio y las diferentes asociaciones que defiende los derechos de los transportistas. Tras la huelga de 72 horas de hace una semana, el Ejecutivo del país ya anunció otras medidas para compensar esta subida del precio como la destinación de 250 millones de dirhams para renovar la flota de vehículos del país o la donación de 100 millones de dírhams para formar a los conductores. También se informó acerca de simplificar el proceso de obtención de matrículas para los vehículos.
Los profesionales del sector agradecieron el gesto. Tras la reunión, por fin han conseguido que se les escuche. Todos los transportistas, ya sean pertenecientes al sector de mercancías, al transporte público de pasajeros como buses, los taxis y demás, van a poder beneficiarse de la ayuda propuesta por el Gobierno de Aziz Akhannouch.

“El Gobierno intervendrá para garantizar que el suministro de los ciudadanos se mantenga en buenas condiciones”, comentó Fouzi Lekja, ministro encargado de Presupuesto, en una rueda de prensa tras la celebración de la reunión.
El Ejecutivo también ha anunciado que este consenso entre Gobierno y profesionales de transportes ha concluido que en un plazo de dos semanas los transportistas podrán empezar a beneficiarse de la ayuda. “En los próximos días, nos reuniremos de nuevo con los profesionales y anunciaremos la naturaleza de este apoyo y trabajaremos en la creación de una plataforma digital para facilitar su concesión a los profesionales que lo necesiten”, indicó el ministro Abdeljalil.
“Durante esta reunión se acordó por unanimidad continuar las discusiones a partir de la próxima semana para aportar soluciones drásticas a estos problemas para que el sector pueda superar los obstáculos que dificultan su desarrollo”, continúo el ministro.
Marruecos está viviendo una época de descontento social y su población no está satisfecha con la situación. Además, cabe destacar que la escalada de precios no solo está afectando a los combustibles, sino que ya varios alimentos básicos que vienen de Rusia o de Ucrania han aumentado considerablemente su precio y los marroquíes se las están viendo para poder conseguirlos.

Los efectos de la guerra están siendo severos para la economía internacional y muchos países como Marruecos están tratando de buscar la solución que palie los efectos de esta crisis. Ante este crecimiento, el ministro de Presupuesto dijo que el Gobierno está ya evaluando la situación. Además, comentó que, para poder preservar el poder adquisitivo del Reino, se deberían de movilizar más de 15.000 millones de dirhams, que estarán destinados principalmente para luchar contra el aumento del precio del gas butano, la gasolina y productos de alimentación básicos como el trigo y la harina.
Los últimos datos, recogidos hace una semana, confirman que ahora mismo en el reino alauí la gasolina tiene un precio de 12.960 dírhams el litro. Es una crecida brutal, ya que el 28 de febrero, cuatros días después del estadillo de guerra y la invasión rusa en Ucrania, el precio estaba fijado en 11.700 dirhams. Pero antes del conflicto, en enero, el precio de la gasolina se encontraba rondando los 10.300 dirhams.