Estados Unidos sigue batallando con las compañías aéreas rusas a golpe de sanciones en respuesta a la invasión de Ucrania. Aeroflot, Azur Air y UTair, tres aerolíneas rusas, sortean las restricciones de la administración estadounidense en vuelos nacionales dentro de Rusia, o internacionales con países que no les han cerrado la entrada.
El jueves 7 de abril, el Bureau of Industry and Security, del Departamento de Comercio de Estados Unidos, dio orden de negar los privilegios de exportación a las tres aerolíneas citadas anteriormente. De acuerdo con el comunicado del Gobierno de Biden, estas tres órdenes temporales, se aplican por una duración de 180 días, impiden a las aerolíneas participar en transacciones sujetas a la regulación especial de la Administración de Regulación de Exportaciones (EAR por sus siglas en inglés), en lo que refiere a productos de origen estadounidense. Es la primera sanción que toma el Bureau of Industry and Security en cuanto a exportaciones.
Lo que busca así el departamento dirigido por la secretaría de Comercio Gina Raimondo es impedir que las tres aerolíneas rusas reciban artículos de producción y licencia estadounidense.

Aeroflot, Azur Air y UTair operan aviones Boeing, entre otros aparatos. Desde el 2 de marzo, la administración estadounidense puso como requerimiento una licencia especial a todo aparato aéreo dotado al menos en un 25% de compuestos estadounidenses. Esto afecta especialmente a esos Boeing 777 y 737 con los que vuelan las aerolíneas rusas. Las nuevas sanciones estadounidenses buscan cortar el suministro de piezas, recambios y todo lo necesario para el mantenimiento de los aparatos.
La situación es grave, y tal y como apuntan medios especializados como Aviación Digital, la falta de servicios y piezas para estos aviones pone en duda seriamente la seguridad de los aviones de las aerolíneas rusas. “Las sanciones internacionales van a dificultar que garanticen un mantenimiento adecuado de la aeronavegabilidad de las naves operadas por operadores aéreos rusos”, indica el Aviación Digital en un artículo del 16 de marzo, cuando el Departamento de Comercio ya había promulgado 2 paquetes de sanciones y preparaba un tercero para el día 18. Tal y como ejemplifica este medio especializado, algunos países han retirado los certificados de vuelo de las compañías rusas afectadas, por falta de garantías de seguridad.

"Estamos cortando no sólo su capacidad de acceder a artículos de Estados Unidos, sino también las reexportaciones de artículos de origen estadounidense desde el extranjero. Cualquier empresa que se burle de nuestros controles de exportación, específicamente las que lo hagan en beneficio de Vladimir Putin y en detrimento del pueblo ucraniano, sentirán toda la fuerza de la aplicación del Departamento”, expuso la secretaria de Comercio Gina Raimondo en rueda de prensa.
Aeroflot, Azur Air y UTair operan distintos aparatos de vuelo sujetos a las restricciones de exportación de Estados Unidos, en vuelos que se han hecho a China, la India o Turquía.
Queda aún por ver cómo se harán realmente eficaces las sanciones de la administración de Biden, y si los rusos no conseguirán sortearlas. Desde el cierre del espacio aéreo, las compañías rusas no operan en territorios bajo la administración de Estados Unidos, y esquivar las sanciones puede ser posible. La reventa de los componentes a través de otras sociedades podría ser una posibilidad para las compañías rusas, pese a que ello también está contemplado como objeto de sanción por Estados Unidos.
Coordinador de América: José Antonio Sierra.