Marruecos se convierte en el principal proveedor de automóviles de la Unión Europea

Fábricas modernas, parques industriales, personal cualificado y bajos costes de producción son las patas sobre las que la Administración marroquí está impulsando su producción anual de vehículos. Superándose cada año, Marruecos ha logrado establecer, concretamente en la región norte del país, un fuerte tejido empresarial que, en el último año logró elaborar más de 535.000 coches.
El impacto en la economía es plausible. Según los últimos datos de la Oficina de Cambio del país, el aporte del sector automovilístico alcanzó los 13.700 millones de dólares. Un dato que, en comparación con otras grandes corporaciones, adquiere más valor. Las exportaciones lograron en 2023 un crecimiento de más del 30%. En el informe se detalla que el aumento del valor añadido de la industria es debido al aumento de exportaciones de elementos de construcción de vehículos.

Una ubicación estratégica y unas conexiones con Europa son dos de los grandes facilitadores que tiene el Estado alauí. A apenas 14 kilómetros de España, Marruecos es considerado la puerta de Europa a África.
Este ecosistema ha generado que, según la web África Financial Afrik, Marruecos haya superado a países productores de automóviles como China, Japón e India, todas ellas superpotencias económicas y de una alta tradición de producción en el sector. A su vez, Marruecos se ha convertido en el proveedor y desarrollador más importante de África.

El país, que es consciente del potencial, no ha cesado en un intento de mejorar, automatizar y desarrollar su infraestructura. Con una gran red de comunicación vía carretera y ferroviaria, el norte del país ha comenzado su camino para convertirse en un hub económico y comercial. En concreto, la ciudad de Tánger es hoy uno de los centros de negocios más importantes del Mediterráneo.
El impulso del puerto de Tánger Med y sus acuerdos comerciales con el resto de los puertos, no solo ha generado más movimiento de capital, sino que también es una fuente infinita de puestos de trabajo de empresas que se asientan en la ciudad.
A esto se le añade que el Gobierno está impulsando medidas regulatorias, incluidas todas ellas en la Carta de Inversiones, que no hará más que atraer a más compañías. Entre las iniciativas ya activas destaca el Plan de Aceleración Industrial 2014-2020. Plan que fue clave en la creación y desarrollo de las plantas de Kenitra y Tánger.

Neo Motors, Snop, Renault, Dacia y Stellantis son solo una parte de las decenas de marcas que trabajan en el país norteafricano. La representación de las ventas de estas marcas supone el 88% del total de vehículos desarrollados. El asentamiento de las multinacionales más conocidas en Marruecos no es casualidad. La integración de Marruecos en la economía mundial gracias al libre comercio ha favorecido y solidificado la oferta marroquí y ha aumentado el atractivo de la región para nuevos inversores.
Desarrollo e inclusión son las prioridades de las autoridades. El indicador de la brecha de género es un desafío que Marruecos está llevando a cabo con gran éxito reduciendo dicha brecha año tras año. La caída es cada vez más pronunciada desde que en 2019 comenzara a reducirse. Los ultimo datos arrojan que en el sector automovilístico marroquí la integración es del 63%. Integración que se espera alcance el 80% en 2030.
Bajo el seguimiento de estándares acordes al mantenimiento del medio ambiente y de la lucha contra el cambio climático, Marruecos ha elevado su producción de coches eléctricos. En una lucha por independizar la economía de los hidrocarburos, Rabat espera que en los próximos años la producción de coches eléctricos suponga el 40% de la oferta total.