Marruecos diversificará la financiación de su programa de protección social en una tarea de ingeniería financiera
Marruecos trabaja en una profunda reestructuración de la financiación de los diversos programas sociales que ha puesto – y quiere seguir poniendo – en marcha el Reino. Con la universalización de la cobertura sanitaria y el apoyo social como dos pilares sobre los que basar sus decisiones, el Gobierno de Aziz Akhannouch comenzará este mismo mes a desembolsar pagos de apoyo directos y para la vivienda. Un anuncio que ha llegado durante la novena ronda de los foros regionales de la Federación Nacional de votantes congregacionales en la región de Marrakech-Safi.
Fawzi Lekjaa, ministro encargado de presupuestos, describe como “ingeniería financiera” el nuevo modelo que ha decidido adoptar el Gobierno para la financiación del programa de protección social. La ley relativa a este aspecto, emitida en 2021, contemplaba dos formas de financiamiento: “el primero se basa en la suscripción para las personas que pueden contribuir al financiamiento de la protección social, y el segundo se basa en la solidaridad en beneficio de las personas que no pueden soportarlo”. Ahora, el Gobierno trabaja para adoptar nuevas formas y, además, actualizar las ya existentes.
Para incorporar estos nuevos métodos, una de las preocupaciones más importantes del rey Mohammed VI, quien está siguiendo muy de cerca estas iniciativas, es el desarrollo local y, sobre todo, el fomento de las inversiones locales que impulsen el desarrollo territorial. Todo esto, teniendo en cuenta que la financiación anual del programa de protección social asciende hasta los 35 mil millones de dírhams (algo más de 3 mil millones de euros), aunque la intención es elevarlo hasta los 40 mil millones (3,6 mil millones de euros).
Sin embargo, no se pierde de vista el sistema de salud, que está enfrentando algunas dificultades, según aseguró Lekjaa. Los últimos indicadores señalan un gasto mayor en comparación a los recursos, lo que podría poner en riesgo la “sostenibilidad financiera de los sistemas básicos de seguro de enfermedad obligatorio”. Por eso, el Consejo Social, Económico y Ambiental ha instado al Ministerio de Salud y al Ministerio de Economía y Finanzas revisar los estándares de financiamiento del sistema de cobertura básica de salud.
Una de las ideas del Gobierno es cancelar el fondo de compensación y transferir el presupuesto asignado para este a la protección social. Desde el Ejecutivo marroquí quieren centrar el foco en los grupos más vulnerables, y para ello se está trabajando en una reforma del Fondo de Apoyo Social, especialmente en el aumento progresivo de ayudas en materiales subvencionados, como por ejemplo el gas butano.
Akhannouch también anunció que su Gobierno activará mecanismos de solidaridad que se espera puedan proporcionar siete mil millones de dírhams en ingresos fiscales. En este aspecto, las empresas van a jugar un papel fundamental, ya que estos ingresos estarán relacionados con la “contribución social solidaria sobre los beneficios e ingresos de las empresas en el marco de su implicación responsable en el éxito de este proyecto nacional”.
